Un elemento de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) lee con evidente nerviosismo la orden de aprehensión que tiene en sus manos: “se le señala por el delito de delincuencia organizada en su modalidad de operaciones con recursos de procedencia ilícita”.
Frente al uniformado está Rosalinda González Valencia, alias “La Jefa”, esposa de Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación; y cabecilla de “Los Cunis”, el brazo financiero de la organización criminal de su esposo. Era el 28 de mayo del 2018.
Aunque estuvo solo unos meses en prisión, la breve detención de González Valencia fue suficiente para enfurecer a “El Mencho”, quien anotó en su lista de enemigos al entonces jefe de la AIC: Omar García Harfuch.
Un año y medio después, García Harfuch dejó la AIC y se convirtió en el titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México. Y con ocho meses en el puesto, en junio de 2020, fue víctima de un atentado del que apenas salió con vida.
En su columna en El Universal, Héctor de Mauleon asegura que la captura de “La Jefa” fue la gota que derramó el vaso y que provocó el atentado contra García Harfuch.
La encomienda quedó en manos de Carlos Andrés Rivera, “La Firma”, un capo colombiano que es el jefe de plaza del CJNG en Puerto Vallarta, Jalisco, el bastión financiero del cártel, quien a su vez se ayudó de su principal operador, César Montero Pinzón, alias “El Tarjetas”, y de José Armando Briseño de los Santos, alias “La Vaca”, para el cometido.
“La Firma” también tenía sus razones para tener éxito en el atentado. La AIC de García Harfuch detuvo a su primo Mauricio Valera Reyes, alias “El Manotas”, y a 17 miembros más del CJNG. El operativo era en respuesta al secuestro, tortura y plagio de dos agentes de la AIC en Nayarit.
El fallido atentado contra García Harfuch, del que salió con vida gracias a la respuesta de su equipo de seguridad y de la inexperiencia de los atacantes, evidenció que había más funcionarios en la mira de “El Mencho”.
En la lista de blancos del CJNG estaba además Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF); Alfonso Durazo, entonces secretario de Seguridad y Protección Ciudadana; y Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco. Todos ellos aumentaron su seguridad.
Sin embargo, también había exfuncionarios en el radar como Aristóteles Sandoval, exgobernador de Jalisco, quien fue asesinado en un restaurante de Puerto Vallarta, Jalisco, seis meses después del atentado de Harfuch.
“La Firma” también estuvo a cargo del atentado que acabó con la vida de Sandoval, así lo confirmó el gobierno de Estados Unidos al incluir al capo colombiano en la lista negra del Departamento del Tesoro el pasado 6 de abril.
Rivera también es señalado de orquestar el fallido atentado contra Luis Carlos Nájera, exfiscal de Jalisco y entonces secretario del Trabajo del gobierno de Jalisco cuando Sandoval era gobernador, en mayo del 2018.
Desde el cierre del gobierno de Enrique Peña Nieto y tras el comienzo de la administración de Andrés Manuel López Obrador, el CJNG ha sido objetivo de una cacería que se suma a la del gobierno de Estados Unidos.
De acuerdo con datos de Eduardo Guerrero, un experto en seguridad pública que encabeza la agencia de datos sobre violencia, crimen organizado y políticas de seguridad, Lantia Consultores, miembros del CJNG son los que más han caído en la actual administración federal.
De la organización de “El Mencho”, señala Guerrero, han sido detenidos más de 600 miembros; mientras que del Cártel de Sinaloa, por ejemplo, han sido capturados apenas poco más de 200.
Sin mencionar que el gobierno de Estados Unidos añade a más miembros del CJNG a su lista de objetivos.
En febrero del año pasado logró la extradición de Rubén Oseguera González, “El Menchito”, hijo de “El Mencho”.
Ese mismo mes fue detenida en Estados Unidos otra de sus hijas, Jessica Johanna Oseguera González, quien se declaró culpable en marzo pasado.
Juan Manuel Abouzaid El Bayeh, uno de los principales jefes del CJNG y operador financiero del cártel, fue incluido en la lista negra del Departamento del Tesoro y a los pocos días fue detenido en México con fines de extradición.
El mismo Carlos Andrés Rivera fue incluido en la lista negra del Departamento del Tesoro junto a Alejandro Chacón Miranda y Francisco Javier Gudiño Haro, quienes trabajan para Gonzalo Mendoza Gaytán, alias "El Sapo", el segundo al frente del CJNG.
Sin mencionar la recompensa que ofrece por Audias Flores Silva, alias "El Jardinero", operador del CJNG en Zacatecas, Nayarit, Jalisco, Michoacán y Guerrero.
El cártel de “El Mencho” introduce fentanilo, heroína, metanfetamina y cocaína a Estados Unidos por toda la frontera norte de México, desde Tijuana, en Baja California, Ciudad Juárez, en Chihuahua y Nuevo Laredo, en Tamaulipas.
La Administración para el Control de las Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) destaca el control del CJNG sobre el puerto de Manzanillo, en Colima, por donde ingresan drogas sintéticas y precursores químicos a México.
También señala la violencia con la que se enfrenta tanto al gobierno como a sus rivales criminales.
Actualmente el CJNG opera en 26 ciudades de Estados Unidos y 23 estados en México, según la DEA.
rgg