La Secretaría de la Función Pública (SFP) ha gastado más de 8.8 millones de pesos en la remodelación de baños y cableado de su edificio central, ubicado en la Ciudad de México, un proyecto para el cual la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) le autorizó 51 millones de pesos.
Aprobadas en 2021, las obras significaron un gasto de 8 millones 819 mil pesos para 2022, mientras que, para este año, el monto autorizado asciende a 42 millones 765 mil pesos.
Al ser consultada sobre los trabajos, la Función Pública aseguró que, hasta el momento, la Hacienda solo había aprobado el ejercicio de 8 millones 738 mil 885 pesos.
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De ese dinero, 4 millones 555 mil pesos se han utilizado en “la rehabilitación integral de núcleos sanitarios”. Los 4 millones 183 mil pesos restantes fueron pagados por “la rehabilitación de las instalaciones eléctricas”.
“Hasta el momento únicamente ha asignado $8,738,885. Esto fue en el año 2022. Los recursos se ejercieron mediante licitaciones públicas de la siguiente manera: para la rehabilitación integral de núcleos sanitarios: $4,555,599. Para el proyecto ejecutivo de la rehabilitación de las instalaciones eléctricas: $4,183,129”, informó la SFP.
La institución asegura que continúan realizando trabajos para mantener en buen funcionamiento las instalaciones, sin embargo, no ha detallado el avance de las mismas o el estado en que se encuentran.
“La SFP sigue trabajando para mantener en óptimas condiciones sus instalaciones a fin de garantizar la continuidad de operaciones y la seguridad de las personas servidoras públicas y usuarias”.
En caso de llevar a cabo los trabajos de remodelación, argumentó la institución, continuaría el desperdicio de agua potable, altos costos de mantenimiento y facturación ante Comisión Federal de Electricidad (CFE), desperdicios en energía en el sistema de alumbrado, desorden o bajo control de tableros remotamente y en los circuitos de contactos, actualmente no permite controlar de manera remota en algunas áreas, así como espacios mal alumbrados.
Los baños
De acuerdo con el proyecto, las obras en el inmueble ubicado en la Colonia Guadalupe Inn, alcaldía Álvaro Obregón, en la Ciudad de México, fueron planeadas para realizarse en un plazo de dos años (2022-2023).
Los trabajos fueron autorizados por el director de Conservación y Servicios en ausencia de la María de la Luz Padilla Díaz, directora General de Recursos Materiales y Servicios Generales, “con fundamento en lo dispuesto por el artículo 100 del Decreto por el que se expide el Reglamento Interior de la Secretaría de la Función Pública, así como al oficio de designación Núm. 514/DGRMSG/622/2021 de fecha 10 de junio de 2021”.
Los argumentos de la Secretaría de la Función Pública para la remodelación de los baños y el cableado fue la antigüedad de 40 años del inmueble, lo que ha ocasionado, por una parte, el deterioro de los sanitarios.
“Debido a que el edificio sede de la Secretaría de la Función Pública tiene más de 40 años de construcción; tanto los núcleos sanitarios como las instalaciones eléctricas se encuentran en malas condiciones”.
Según la información incluida en el proyecto, los 44 núcleos sanitarios que están distribuidos en 11 niveles del inmueble (22 núcleos en el lado norte y 22 en el lado sur), están hechos a base de paneles de madera aglomerada y marcos de aluminio, mármol travertino, loseta de cerámica, plafones reticulares, puertas de acceso de tambor, llaves y fluxómetros remanufacturados por personal propio de la secretaría.
“Dichos elementos que componen cada uno de los servicios sanitarios, se encuentran deteriorados por el uso constante, toda vez que brindan un servicio durante 15 horas continuas al día, de lunes a viernes, por lo que ya no garantizan totalmente el servicio con las condiciones higiénicas y de operación requeridas”.
El documento que se utilizó para justificar ambos proyectos menciona que el deterioro de los sanitarios ha originado fugas recurrentes en las instalaciones de agua potable y drenajes, lo cual provoca filtraciones constantes y módulos sanitarios fuera de servicio.
“Con la consecuente molestia a los usuarios, ya que debido a que las instalaciones sanitarias, están ahogadas en las losas de entrepisos, es necesario romper los acabados para solucionar en ese momento la fuga presentada, e incrementa los costos de mantenimiento, sin embargo, es imperativo sustituir el sistema hidrosanitario en general, a fin de aplicar nuevas tecnologías en lo que respecta a accesorios y tuberías y reacondicionar los acabados en general”.
Para la Secretaría de la Función Pública el mal estado de los sanitarios es un problema que pone en riesgo la salud de empleados, así como los visitantes.
“Esta problemática repercute de manera directa en la prestación del servicio ya que la totalidad de los servidores públicos y visitantes externos los utilizan con frecuencia y al no contar con instalaciones adecuadas para ofrecer un servicio sanitario con higiene y calidad, se afecta la salud de los usuarios y el desempeño del personal, ya que este es un servicio básico e indispensable para la continuidad de las operaciones”.
Los trabajos de remodelación, según el esquema trazado, incluye “preliminares y desmontajes, de accesorios, muebles de baño, puertas, plafones, instalación sanitaria (PVC), piso cerámico, mamparas (puertas, chapas), plafón (reticular), pintura vinílica, montaje de mueble, -así como- lavabos (ovalines, mezcladoras, espejos y accesorios en general)”.
“Actualmente el inmueble sede de la Secretaría de la Función Pública dispone de 44 núcleos sanitarios distribuidos 4 por piso (dos hombres y 2 de mujeres), los sanitarios de hombres cuentan con 7 W.C., 6 lavabos y 8 mingitorios, mientras los sanitarios de mujeres cuentan con 6 W.C. y 6 lavabos, los cuales son considerados muebles y accesorios claves para ser reemplazados en su totalidad de manera urgente, ya que se encuentran en muy malas condiciones y ya no garantizan el servicio adecuadamente y con la higiene necesaria”.
Agrega el proyecto: “de igual manera se tiene contemplado el reemplazo de la red hidráulica, por las constantes fugas de agua tanto de alimentación como de drenaje, asimismo, las puertas de los WC, las mamparas divisorias de mármol, placas de mármol, muebles de madera bajo ovalines, plafones e iluminación, así como las puertas de madera de accesos principales, se encuentran en muy malas condiciones. Es evidente la necesidad de renovar estos servicios en el edificio sede ya que después de más de 40 años de uso, es necesario realizar este proyecto lo antes posible”.
El cableado
La segunda parte del proyecto que contempló la SFP y el cual fue autorizado, incluye la remodelación del cableado eléctrico, el cual, según la institución ya rebasó su vida útil.
“Las instalaciones eléctricas han rebasado por mucho su vida útil, por lo que es imperativo realizar un levantamiento eléctrico con la actualización de planos, cuadros de cargas, así como un desarrollo de ingeniería y mejora continua para prevenir contingencias en las instalaciones eléctricas de alumbrado, contactos y alumbrado de emergencia, asimismo llevar a cabo la sustitución programada de las instalaciones descritas a fin de evitar cualquier posible riesgo a las propias instalaciones y activos de la SFP”.
La Función Pública aseguró en el proyecto que el edificio “sufre deterioro y desgaste por el uso normal o forzado, y por lo tanto tiene una vida útil, por lo que debe realizarse una revisión, sustitución y cambio de canalizaciones y conductores eléctricos, así como de los accesorios de control. Los especialistas sugieren que cada cinco años se deben realizar estas revisiones”.
El riesgo, menciona el documento, es latente, por lo que son necesarios los trabajos para evitar percances, como un incendio.
“Una de las varias razones, es porque a consecuencia del mal estado de los materiales por envejecimiento, el forro del cableado sufre una degradación, lo cual genera instalaciones inseguras que pueden derivar en un conato de incendio, afectando la integridad de los servidores públicos, prestadores de servicio y el recurso material de la Secretaría”.
Para realizar los trabajos se proyectó utilizar cables, canalización y accesorios, configurar los circuitos de contactos que permitirá controlar las áreas que se dejarán fuera de servicio, en caso de no haber ocupantes en la zona, mejora en la instalación, controlando los tableros remotamente, así como la optimización de los espacios de alumbrado.