El gobierno de Finlandia ha comenzado la construcción de una valla metálica en los tramos más vulnerables de su frontera con Rusia. La medida, aprobada en octubre pasado, tiene como objetivo frenar la inmigración ilegal y una eventual llegada masiva de refugiados, en medio del conflicto entre Rusia y Ucrania. Es por eso que varías personas y medios de comunicación han bautizado a esta frontera como "el nuevo Muro de Berlín".
La construcción de la valla ha comenzado en el municipio fronterizo de Imatra, en el sureste de Finlandia, donde se talaron árboles y se desbrozó una franja de 3 kilómetros. El proyecto piloto tendrá un costo de 6,000,000 de euros y consiste en la construcción de una carretera y una valla metálica de tres metros de altura con concertinas en su parte superior y cámaras de videovigilancia.
Este tramo se encuentra en uno de los cruces fronterizos más transitados, debido a su proximidad con San Petersburgo. Si el proyecto piloto es satisfactorio, las obras continuarán con la construcción de varios tramos más, cubriendo una extensión total de unos 200 kilómetros, lo que representa alrededor del 15% de los 1,340 kilómetros de frontera que separan Finlandia y Rusia.
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Se espera que las obras duren entre tres y cuatro años y supongan un desembolso de "varios cientos de millones de euros", según estimaciones de la guardia fronteriza. La valla forma parte de la vigilancia fronteriza global de la Guardia de Fronteras y no se espera que por sí sola solucione la problemática.
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El proyecto de construcción de la valla fue propuesto inicialmente por la Guardia de Fronteras y autorizado por el gobierno de centro-izquierda que dirige la primera ministra, Sanna Marin, y respaldado por todos los grupos parlamentarios.
"Se trata de poder asegurarnos de que la frontera está bien vigilada y de ser capaces de anticiparnos a lo que pueda ocurrir en ella", afirmó entonces la primera ministra.
El inicio de las obras coincide con el aumento de las tensiones entre Finlandia y Rusia a raíz de la invasión rusa de Ucrania y del proceso de adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN. El proyecto también es una respuesta al aumento de las tensiones con Moscú en el contexto del conflicto ucraniano.
Finlandia tiene la frontera con Rusia más larga de toda la Unión Europea (UE) y la segunda de Europa, después de la de Ucrania. Con la construcción de esta valla, se busca prevenir el ingreso ilegal de personas y evitar una eventual llegada masiva de refugiados en el marco del conflicto entre Rusia y Ucrania.
Con información de EFE.
DJC