León.- Los 280 pesos que costaba el Festival del Globo, más el traslado o estacionamiento y la comida dentro excedieron el bolsillo de muchas personas que ilusionadas, pero convencidas de que nada les iba a impedir tener esta experiencia con sus hijos, buscaron la manera de ver este espectáculo.
Desde un cerrito, a unos kilómetros del Parque Metropolitano, leoneses abrigados y con frío se amontonaron para ver el despegue de globos. Así le han estado haciendo desde el viernes que comenzó el Festival Internacional del Globo.
“Es muy caro”, dicen los papás leoneses. Ir al Festival del Globo podría salir en, más o menos, 2,000 para cada familia. Tan solo el estacionamiento cuesta entre 160 y 320 pesos; el boleto (por día) que solo incluye el despegue cuesta 280; una orden de tacos o hamburguesa estaban en alrededor de 100. No todas las familias pueden costarlo.
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Por eso la voz se corrió rápida cuando unos cuantos descubrieron un lugar secreto para ver el despegue de globos sin tener que asistir. Con sus hijos, padres y abuelos, leoneses se subieron a un cerrito cerca del Parque Metropolitano y vieron en espectáculos.
En el cerrito nadie les dijo que no podían entrar con comida. Se llevaron tortas, sándwiches, termos llenos de café y té caliente, galletitas y más. Envueltos en abrigos y gorros, se sentaron todos en el suelo teniendo el sol de frente que les calentaba un poquito la cara y calmaba el frío cortante en la piel.
Ahí esperaron en compañía de seres queridos y vieron desde lejos, pero no mucho, un espectáculo por el que no pagaron ni un peso. De gastar 2000 por papá, mamá e hijos, solo invirtieron en la gasolina de traslado para disfrutar de un momento que, aunque vivieron en la compañía de otros leoneses, se convirtió en un recuerdo familiar íntimo.