MÉRIDA.- El 25 de febrero pasado, Amanda fue víctima de golpes y de un intento de abuso sexual. Su verdugo fue identificado como Josmar J.C.B. La joven se defendió como pudo, llegaron a su rescate agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), quienes arrestaron al agresor en flagrancia. Sin embargo, tras pasar 24 horas en los separos lo dejaron libre. No fue imputado, ni vinculado a proceso.
La misma noche del ataque sexual, Amanda interpuso la denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) de Yucatán. Se inició la carpeta de investigación S1-G2/172/2023. Sin embargo, a tres semanas de los hechos, Amanda desconoce las razones por la que las autoridades no imputaron a Josmar.
Explicó que cuando fue detenido, Josmar estaba sometiéndola dentro de la casa de una amiga, en el fraccionamiento Los Almendros, Caucel, en Mérida, Yucatán.
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“Cuando me atacó me dijo que me mataría, me repetía que me quedara quieta porque me mataría y violaría. Realmente era la única que escuchaba mientras trataba de zafarme, porque me estaba ahorcando. En una de esas veces ya lo tenía sobre mí y él se untaba mi propia sangre en su cara y brazos”, relató Amanda.
Desde esa noche, Josmar le robó a Amanda toda la paz. Ahora tiene miedo todas las noches. Conoce el nombre y la identidad de su agresor debido a que, durante el forcejeo, al sujeto se le cayó su identificación. A pesar que ya pasó un mes de la denuncia que presentó, no hay un avance, motivo por el que decidió exponerlo en la pasada marcha del 8M, Día Internacional de la Mujer.
LOS HECHOS
La noche del 25 de febrero, Amanda saldría con sus amigas. En lo que llegaba el taxi, las jóvenes fueron a una tienda, pero Amanda se quedó en la casa, a donde se metió Josmar. La mujer se salvó porque el conductor del taxi llegó a la casa y escuchó sus gritos. El chofer notó que las luces de la vivienda se apagaban y encendían, así que fue por la policía.
“El taxista llegó y se fue a un parque que está casi enfrente para esperarnos, es alguien de confianza para nosotras. La policía estaba en el parque y le cuestionaron que hacía a esa hora en el lugar, respondió que esperaba a unas personas y le dijeron que mejor fuera a la casa de las personas”, detalló.
“Llegó a la casa y escuchó ruidos extraños, me llamó por teléfono para ver si estaba bien y alcancé a gritar, entonces él llamó a la policía. Logré escapar de mi agresor, aunque ya me había lastimado, una de las habitaciones estaba llena de sangre”, detalló Amanda.
La mujer pidió que si alguien reconoce a Josmar y también fue víctima de algún delito se sume a su denuncia para obtener justicia y que se castigo a este presunto abusador de mujeres.