Las posibilidades de conseguir un acuerdo en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TCLAN) en este año merman cada vez más.
En una entrevista televisiva, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, señaló una probabilidad del 40 por ciento de alcanzar un acuerdo antes de las elecciones presidenciales en México si el gobierno estadounidense entendía “que esto requiere de equilibrios y flexibilidades”.
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Ese porcentaje bajó a la mitad para este mes, pues en abril Guajardo habló de un 80 por ciento de posibilidades de cerrar el pacto comercial en mayo.
Mientras, el presidente de la Cámara de Representantes estadounidense, Paul Ryan, indicó que el TLCAN podría ser ratificado por el Congreso 2018, de no ser así sería validado por el nuevo legislativo a principios de 2019.
De acuerdo con El Financiero, Francisco de Rosenzweig, asesor de comercio exterior del Consejo Nacional Agropecuario y socio de White & Case, coincidió con Guajardo al destacar que en la medida en que Estados Unidos sea más flexible en los temas que controversiales, se avanzará con mucha mayor fluidez.
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En ese sentido, se debe alcanzar un consenso en los temas que no son viables como estacionalidad, el sunset clause; así como una regla de origen en el sector automotriz que tenga sentido.
A su vez, Juan Rodrigo Moreno, consejero delegado de asuntos internacionales de la Coparmex y consideró que la baja de expectativas para cerrar el acuerdo antes de los comicios del 1 de julio se debe a la inflexibilidad estadounidense, por ejemplo, en las propuestas de México sobre el sector automotriz.
A las bajas expectativas sobre un posible cierre en el TLCAN se suma la cuenta regresiva para el vencimiento a la condonación de aranceles a la importación de acero y aluminio que Estados Unidos otorgó a México y Canadá. La medida entrará en vigor el 1 de junio.
Luz María de la Mora, negociadora del TLCAN original, expuso que puede haber una justificación de las tres partes para continuar con las negociaciones y no aplicar los aranceles hasta que concluyan las negociaciones, según señala el rotativo.
En tanto, Guajardo dijo que la investigación estadounidense al sector automotriz, que pudiera traducirse en tarifas de hasta 25 por ciento a las importaciones de autos, va llevar tiempo y que eso no debe ser una distracción a la estrategia de México.
cbl