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"Me aceptaron de intercambio, pero sin beca Conacyt 'ya valió'"

Gustavo Barrales fue aceptado para hacer un doctorado en el extranjero, una semana después fue cuando le dijeron que no se abriría la convocatoria de becas

Escrito en NACIÓN el

"Ya valió", fue lo primero que pensó Gustavo Barrales, maestro en ciencias, al enterarse que este año el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) no otorgará becas para el extranjero que no sean del área de la salud o de bellas artes.

Él acaba de terminar la maestría en Ciencia y a finales de febrero fue aceptado para hacer un doctorado en biotecnología en la Universidad Católica de Lovania (KU Leuven), en Bélgica. Una semana después fue cuando le dijeron que no se abriría la convocatoria de becas para el extranjero, recurso con el que contaba para cumplir este sueño.

“Sí es como un balde de agua fría, porque dices chin", expresó Gustavo, quien durante seis meses estuvo tocando varias puertas para que lo aceptaran, ya que tiene que cumplir con muchos requisitos y asegurar el financiamiento.

Explicó que en la universidad le dijeron que tienen el espacio y el dinero para desarrollar el proyecto, pero no los recursos para financiarle a él la estadía, por eso pensó en aplicar para una de las becas del Conacyt.

Las matrículas en universidades de Europa cuestan entre 500 y mil euros, que son de 9 mil a 15 mil pesos semestralmente. En el caso de Gustavo, la matrícula cuesta 450 euros, pero para poder emigrar debe tener una visa y para obtenerla le piden un respaldo económico, ya sea una beca o una cuenta bancaria de alrededor de 230 mil pesos para que le den el permiso de estudiar en el país.

La Silla Rota publicó este jueves que estudiantes y académicos lanzaron una petición para recabar firmas en la plataforma Change.org, con el objetivo de exigir al Conacyt, que encabeza María Elena Álvarez-Buylla, que otorgue las becas para estudiar en el extranjero.

“PENSABA REGRESAR A MÉXICO, PERO YA NO”

Tras enterarse que no se abriría la convocatoria de Conacyt, Gustavo buscó alternativas y encontró que en México sólo un banco ofrece un préstamo universitario, pero con una tasa de interés del 18%.

Explicó que la beca al extranjero del Conacyt era de mil 100 euros año, lo que implica que en cuatro años que dura un estudio de posgrado, el Consejo invirtió un millón 300 mil pesos en una persona, la diferencia es que los estudiantes no terminan con una deuda, sino que  tienen que regresar al país para aplicar sus conocimientos.

"Pareciera que invierten muchísimo dinero en una sola persona, pero ahora lo estamos viendo con las vacunas, los desarrolladores fueron dos, tres equipos de investigación con una o dos personas que generaron esa idea y esa idea se tradujo en un beneficio no para uno, ni para un millón, para 50 millones, mil millones. Al final en conocimiento que tú generes no se queda enclaustrado en cuatro paredes, sino que se traduce en beneficio para muchas personas”, destacó.

Criticó que Conacyt sólo ofreciera becas para dos áreas del conocimiento, ya que si bien hace falta formar especialistas en salud, principalmente por la pandemia, el próximo año habrá una menor producción científica en general.

“Muchas investigaciones que podrían servir a México se va a congelar, al menos este año y quién dice que el próximo año vuelvan, porque la doctora Elena Álvarez-Buylla no ve con buenos ojos este tipo de gastos”, dijo.

“Mi idea siempre fue regresar, pero ahora ya con esto, pienso sí tomar el crédito, una vez que finalice mis estudios, buscar trabajo allá que va a ser muchísimo mejor pagado, voy a poder pagar mi crédito, que está en pesos, de manera más rápida, pero no regresar por lo menos no en el mediano plazo, 10 o 15 años trabajar por allá”, destacó Gustavo.