En Baja California Sur la presencia del PRI es casi nula. No hay un solo alcalde tricolor y en las elecciones intermedias del 2015 fue borrado por el PAN y Morena al no ganar ni en un solo distrito. En medio de esta crisis política en el priismo local José Antonio Meade, precandidato presidencial de la coalición Todos por México, visita la entidad.
El PRI dejó de gobernar la entidad hace casi 20 años, en 1999. Su último gobernador fue Guillermo Mercado Romero. Después BCS fue gobernada dos sexenios por el PRD y las dos últimas administraciones han sido del PAN.
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La última división del tricolor ocurrió en agosto pasado, durante su proceso para renovar el Comité Directivo Estatal. El 19 de ese mes, el líder nacional de la CROC, Isaías González Cuevas, impuso a Gabriela Cisneros Ruiz, como candidata de “unidad” a la dirigencia estatal priista, con el visto bueno del senador del PRI, Ricardo Barroso Agramont.
Tras recibir presiones, golpes bajos y traiciones políticas, en el camino quedaron Joel Vargas Aguiar, diputado del XIV Distrito Local, Jesús Flores Romero, regidor del XII Ayuntamiento de Los Cabos, y Máximo Montes Ibarra, ex coordinador de la campaña de Ricardo Barroso Agramont a la gubernatura en Comondú.
Un síntoma de la grave crisis priista se evidenció en la toma de protesta de la nueva dirigencia estatal, al no asistir Enrique Ochoa Reza, presidente nacional del tricolor, quien canceló de última hora. En su lugar estuvo la secretaria general, Claudia Ruiz Massieu.
A la toma de protesta de Gabriela Cisneros tampoco acudió el delegado del CEN, el senador Aarón Irizar López, ni la diputada federal Esthela Ponce Beltrán.
El exgobernador Guillermo Mercado Romero, el último que gobernara BCS por el PRI, reconoció en semanas pasadas que “ya el sistema corporativo, ya el de las cuotas de poder o simple y sencillamente el voto duro, no es realmente tener asegurada una elección”, por lo que estos resultados de las últimas elecciones “son una señal, un llamado a la reflexión profunda de que las formas y sistema de gobernar deben de cambiar”.
En este marco de crisis priista, Meade llegará a BCS. En la mañana sostuvo un encuentro con empresarios, por la tarde tendrá una comida con la clase política priista y concluirá su visita con militantes tricolores en punto de las 18:00 horas.
La crisis interminable
El 7 de junio de 2015, el PAN se llevó el carro completo en Baja California Sur. Su candidato a la gubernatura Carlos Mendoza Davis ganó con el 45% de los votos, dejando en el camino al candidato de la coalición PRI-PVEM-PNAL, Ricardo Barroso (35.6% de los sufragios), quien sufrió su segundo descalabro consecutivo., toda vez que en 2011 perdió con el también panista Marcos Alberto Covarrubias Villaseñor.
En la elección de ese año, la coalición formada por los Partidos Acción Nacional y Renovación Sudcaliforniana (de registro local) ganó la gubernatura, las cinco presidencias municipales, 15 de los 16 distritos electorales y las dos diputaciones federales de mayoría.
Así, las coaliciones encabezadas por el PRI y el PRD no fueron rivales para Acción Nacional, que además de repetir en la gubernatura le quitó al PRI las presidencias municipales de La Paz y Loreto, y al PRD la de Los Cabos.
Crecimiento de Morena
El desdibujamiento del PRI en Baja California Sur, no es causado únicamente por su derrota ante el PAN sino que se debe también al acelerado posicionamiento que ha tenido Andres Manuel López Obrador desde 2006 y ahora el partido que creó: Morena.
En las elecciones presidenciales del 2006, el tabasqueño ganó de manera contundente en Baja California Sur. En aquel año, el PAN de Felipe Calderón ganó en 16 entidades, casi todas al norte y al centro de la República Mexicana, mientras que Andrés Manuel López Obrador de la Coalición por el Bien de Todos habría obtenido mayoría en otras 16, todas al sur, salvo Zacatecas y Baja California Sur, la única entidad del norte que se inclinó par la izquierda.
Desde entonces, Morena sigue creciendo a lo largo y ancho de la entidad. Al cierre del primer semestre de 2017, este instituto político ya contaba con una estructura de representación en cada una de las 487 secciones electorales.
Andrés Manuel López Obrador, anunció en mayo de ese año que ya que se había logrado el 80% de la estructura encargada de promover y defender el voto para las próximas elecciones, en las que el PRI busca redoblar esfuerzos para reaparecer pues según su dirigente estatal : “Ya estamos cansados de perder”.