En plena transmisión de noticiero en vivo de la BBC, la conductora Sophie Raworth informaba sobre la victoria de Inglaterra ante Sudáfrica en un duelo de cricket al momento que, sin percatarse, a sus espaladas se pudo ver un video porno en una de las pantallas que adornan el estudio.
Uno de los empleados del canal no se percató de que su computadora aparecía en el tiro de la cámara central y que mientras él veía su película sexual, la imagen apareció justo detrás del hombro de Raworth.
El incidente pudo ser visto por miles de personas, por lo que generó fuertes molestias en los televidentes, así como críticas que se hicieron patentes en redes sociales contra la cadena de televisión.
El vocero de La Asociación de la Libertad (The Freedom Association), Andrew Allison, mostró su incredulidad al afirmar que la BBC no restringe el acceso de sus empleados a estos contenidos.
Estoy sorprendido de que la BBC no tiene filtros de Internet para detener a su personal haciendo este tipo de cosas". Afirmó.
"Estoy sorprendido de que la BBC no tiene filtros de Internet para detener a su personal haciendo este tipo de cosas", afirmó.
jla