Apenas en 2023 se conoció la historia de un hombre a quien se le conoció bajo el apodo de "Gastrojeta". Es un lituano que acostumbraba hacerse pasar por ruso... y por millonario,.. y por sibarita. Con ese aire de turista exrtranjero interesado por el folklore, recorría ciudades de España para comer en cuanto lugar se le atravesaba.
Pedía siempre lo más caro de la carta y cuando estaba en el último platillo, siempre le dolía el pecho, se tiraba al piso y balbuceaba que le estaba dando un infarto... lo cual era falso. Así lograba dos cosas: provocar un susto en el dueño del lugar y que le perdonaran la cuenta. Lo hizo tantas veces que la policía contabilizó 20 arrestos.
El caso fue tomado a broma en redes sociales pero no dejaba de ser un fraude que perjudicaba al menos al dueño que se quedaba sin poder cobrar la cuenta y la mesera, que se quedaba sin propina.
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Los infartos fingidos no son solo cosa de restaurantes para no pagar la cuenta, también suceden en escenarios para ganar rating y aplausos.
¿Qué pasó con el falso infarto de Carlos Bonavides?
El caso de Carlos Bonavides es paradigmático: un actor desempleado, que tuvo su época de mayor gloria en los años 90 del siglo pasado cuando interpretó a Huicho Domínguez en la telenovela El premio mayor, es invitado al programa "SNSerio", de Multimedios.
Bonavides acepta jugar a los toques, una dinámica en la que Adrián Marcelo le hace preguntas de doble sentido y si las responde mal, le dan una descarga eléctrica.
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Bonavides en efecto responde mal a la pregunta "¿Tres cosas para quitarte la calentura?" y en seguida recibe los toques. Segundos después, el actor se toca el pecho, pone cara de mucho dolor y cae al piso. Los conductores se espantan, la producción manda un corte comercial... y horas más tarde Carlos aparece para decir que todo fue una broma.
El comediante asegura que nadie sabía de la broma y que fue él quien improvisó el fingimiento del infarto.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) refiere que 17.9 millones de personas mueren cada año por una enfermedad cardiovascular. En México, el dato más actualizado es que de enero a junio de 2023 ocurrieron con 97 mil 187 defunciones, por enfermedades cardiovasculares, siendo la primera causa de decesos, revelan datos preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
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¿Para qué fingió Pocholo un infarto en el escenario del teatro?
La obra "El diablo tiene otros datos" es una obra en tono de teatro de revista política. Sus personajes son parodias de los políticos actuales que interatúan con personajes de la picaresca mexicana actual.
La obra lleva un par de años con temporadas esporádicas y en este final de 2024 se montó con un agregado: la temática de la pastorela. En esta obra es que Pocholo interpreta a uno de los pastores que van a Belén. Y en la función del sábado, azotó en el proscenio sin razón aparente.
En la escena también estaba el indio Brayan, quien, según se aprecia en un video difundido en redes sociales, lo patea al ver que no se levanta. Pocholo no reacciona y el telón se baja. Minutos después y ante un público que no sabe si fue timado o burlado, Pocholo reaparece feliz y caminando mientras recita la famosa fras del 28 de diciembre: inocentes palomitas que se dejaron engañar.
Desde hace un año, la Secretaría de Salud implementó el Código infarto, que es un protocolo de atención en el que participan el INER y otros institutos y hospitales federales, para realizar diagnóstico y tratamiento oportuno de pacientes con infarto al corazón.
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