Main logo

Gobierno de AMLO, con acciones de derecha, reiterativo y economía estancada

Especialistas hacen un balance sobre los primeros meses de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador

Por
Escrito en NACIÓN el

En sus primeros seis meses de gobierno, la administración de Andrés Manuel López Obrador pese a ser de izquierda, ha actuado en ocasiones como de derecha, tal como acusó en su carta de renuncia a la dirección del IMSS Germán Martínez, que afirmó que los recortes de Hacienda a los gastos de salud eran de corte neoliberal, recordó el analista político José Fernández Santillán.

Otro aspecto es que pese a tener como bandera la lucha contra la pobreza, bajo el slogan de ‘primero los pobres”, no ha hecho nada para modificar el esquema fiscal para que paguen más impuestos quien más gane, añadió. No es lo único.

Aunque su discurso sea de izquierda sus acciones son de derecha, el respeto al Estado laico ha quedado pisoteado. Las mañaneras se han vuelto sermones moralistas y esto que paso en Bellas Artes con el concierto lo de la Luz del mundo es para que hubiera tomado cartas en el asunto e intervenido, pero dijo que somos laicos y tolerantes, es una actitud muy tibia, precisamente porque es un hombre muy religioso y lo ha demostrado claramente, ¿dónde está su juarismo?”, se preguntó el autor de Política, Gobierno y sociedad civil.

Para el politólogo Víctor Alarcón, el gobierno de López Obrador ha cumplido algunas de sus promesas, como la de echar atrás el nuevo aeropuerto de Texcoco o cancelar la reforma educativa, pero como ha ocurrido con otras administraciones, en lo micro se ve poco su mano.

Generó un cambio en el manejo del presupuesto público y la cuestión es que como siempre se le criticaba a anteriores gobiernos, es que en lo macro hay resultados pero en lo micro no, en cómo deberían presentarse los resultados e impacto a la población, ahí hay deficiencias. La efectividad no está logrando presentar una satisfacción plena y el hecho es que eso es lo que curiosamente mantiene al gobierno a la defensiva, constantemente teniendo que modificar y justificar que esos cambios están por venir”, dijo.

En materia económica los números son de los más bajos desde 1995, según un documento del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).

El crecimiento promedio para los primeros cuatro meses de la actual administración sea de 0.4 por ciento (diciembre-marzo, medido por el IGAE), el más bajo desde lo observado durante el arranque del sexenio de Ernesto Zedillo”, de acuerdo con el reporte del IDIC.

El director del instituto, José Luis de la Cruz Gallegos, agregó que es paradójico que el sector industrial, al que están dirigidas las mayores apuestas del presidente, por los proyectos de Dos Bocas y el Tren Maya, esté en una recesión y prácticamente en estancamiento. El analista urgió a hacer un programa emergente económico, porque en caso de no hacerlo la economía será más vulnerable, pues además de factores internos está expuesto a la desaceleración de Estados Unidos, nuestro poderoso vecino del norte.

Así son los primeros seis meses de López Obrador.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: Aprobación a AMLO de 85% fue el pico en su sexenio: Enkoll

GOBIERNO DE IZQUIERDA, ACCIONES DE DERECHA

El académico y columnista José Fernández Santillán consideró que los primeros seis meses del presidente muestran que está lejos de lo que prometió en campaña.

Hay una gran distancia entre lo que prometió y lo que ha hecho. Lo más inmediato son las cuestiones de salud, la renuncia de Germán Martínez al IMSS deja al descubierto el descuido de la 4T de la salud pública. Fue uno de los temas en los que más hizo énfasis”.

Algo similar aplicar en el combate a la corrupción, donde poco se ha hecho para investigar el caso Odebrecht y los desfalcos en Pemex.

El analista consideró que lo que consiguió Hugo Chávez en 5 años, López Obrador lo está haciendo en meses, ya que en su opinión ha comenzado a desinstitucionalizar al país, al concentrar el poder en su persona.

Tiene temperamento de caudillo, entonces para poder centralizar su poder, él cree que primero debe demoler las instituciones y después concentrar decisiones en su persona. Los superdelegados son un mecanismo de concentración y lo denunció Germán Martínez. Hacer recortes en salud para llenar las arcas de donde saldrá el dinero para jóvenes ninis y personas de la tercera edad, que es otra forma de clientelismo. Es neoliberalismo clientelar y está desmontando el sistema de partidos, quiere hacer un partido mayoritario y hegemónico, quiere reestablecer el sistema que acabó en 1997, Morena es un partido hegemónico que ya está en funcionamiento. Es un retroceso de grandes proporciones”, explicó.

Le ha quitado recursos a las estancias infantiles y a organizaciones de la sociedad civil, ha golpeado a la sociedad civil, donde están los líderes de la sociedad civil de a deveras, y desmantelarlos es parte del manual de populista, añadió.

El académico del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores Monterrey (ITESM) no duda en calificar el estilo de López Obrador de populista.

Es lo opuesto a la democracia, en populismo el objeto de decisión es el pueblo, en democracia el ciudadano. En populismo es la identificación entre el líder y la masa y se vive de política de conflicto y no de conciliación y crear enemigos es una de las razones de ser del populismo, crea enemigos internos y externos. Como López Obrador es demasiado pueblerino son los fifís, la mafia del poder, los periodistas. Lo que hace es crear encono, porque el populismo se basa en la animosidad de las masas”.

-¿Un aspecto positivo?

-El populismo de AMLO ha sacado las carencias del país a relucir; ha puesto en evidencia la desgracia en que dejó el país el neoliberalismo; ha puesto en claro que esa no es la vía para resolver los problemas del país. Estamos en una falsa disyuntiva entre liberalismo o no. Debemos mirar hacia afuera. Ha dicho maliciosamente que se inspira en la Doctrina Estrada de neutralidad, pero hay una identificación con las naciones bolivarianas, lo que debe buscar México es una alternativa. En pocos meses sabemos que López Obrador y su populismo no van a resolver los problemas, los van a agravar y hay que buscar alternativas diferentes al neoliberalismo y populismo.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: ¿De qué hablaron AMLO y Urzúa con la directora del FMI?

CASI UN AÑO AL MANDO: ALARCÓN

El presidente Andrés Manuel López Obrador lleva prácticamente desde septiembre al frente del gobierno, ya que después de que se reunió con el entonces presidente Enrique Peña Nieto y con el gabinete saliente y el entrante, asumió el mando, luego de decirle en su propia cara al priísta que la reforma educativa sería cancelada, recordó el analista Víctor Alarcón.

Desde entonces se puede decir que ha cumplido sus promesas generales, como la cancelación del aeropuerto en Texcoco, o la propia cancelación de la reforma educativa, agregó el académico de la Universidad Autónoma Metropolitana.  

Generó un cambio en el manejo del presupuesto público y la cuestión, como siempre que se le criticaba a los anteriores gobiernos, es que en lo macro hay resultados pero en lo micro, en cómo deberían presentarse los resultados e impacto a la población, ahí hay deficiencias. La efectividad no está logrando presentar una satisfacción plena y el hecho es que eso es lo que curiosamente mantiene al gobierno a la defensiva, constantemente teniendo que modificar, justificar que esos cambios están por venir”, dijo.

Algunas cuestiones son rescatables, pero también otras partes complicadas, como su manejo del tema fiscal, la administración ambiental, el combate a la corrupción, o la relación con los empresarios.

Es como construye sus consensos, más ilusorios que efectivos o incluso impositivos, como los decretos (como cuando de facto ordenó cancelar la reforma educativa, aunque no había sido aprobada por el Congreso la nueva reforma), sus determinaciones al no lograr un consenso a través de la forma de actores políticos, esto es lo que hace que haya contrastes significativos”.

Un aspecto a destacar es que mantiene su popularidad y contar con el respaldo de la población marginada, a la que le convence el discurso de combate a la corrupción y de austeridad e incluso le genera simpatías en dicho sector.

Los claroscuros aparecen en temas como el migratorio, donde aún no hay certeza si Estados Unidos apoyará para un eventual apoyo a Centroamérica que reduzca los niveles de migración. Eso se refleja en una política contradictoria en la materia.

Los recortes en salud, en tecnología o medio ambiente para usar los recursos que ahí se destinaban a dar apoyos directos a la población, dista de ser una política de dinero multiplicador y es solo dinero que se usa una vez sin crear empleos de mayor calidad. “Ante las críticas ha optado por la confrontación que lo muestran intolerante o lo llevan a repetir la frase de ‘tengo otros datos’”.

En opinión de Alarcón, eso ha causado un desgaste acelerado, que rápido diluye lo novedoso del nuevo gobierno.

Con esta situación de altibajos, de mucho contraste, el gobierno mostró todo lo que tenía que dar, ya se está agotando y se está volviendo repetitivo, reiterativo. Por ejemplo encontrar culpables como en el caso del huachicol, o contra el crimen organizado donde se promete mucho y se termina solo agarrando a uno o dos individuos de cierto nivel y lo que se agarra es por pactos. Hay un nivel muy alto de impunidad, Peña Nieto no fue procesado por nada, para otras administraciones que él culpa no hay procesamiento de sus integrantes, entonces vemos que este combate que debía ser más integral y pleno y daría mayor credibilidad a la propuesta de la 4T es algo que ya se está agotando, su espacio de credibilidad. A casi 10 meses, sí veo que estamos llegando a ese límite de exposición de lo que realmente es su propuesta de gobierno”.

Incluso mencionó que el gobierno fue desafiado por el Cártel Jalisco Nueva Generación, y es algo que deben afrontar, sin esperar a que esté lista la Guardia Nacional.

Ya vimos lo que su gente es capaz de hacer y ciertamente hay desniveles o impericia con que se manejan sus gobernadores, de Morena, y los resultados de la próxima jornada (del 2 de junio) seguro aún habrá resultado positivo por parte de esta inercia y expectativas”.

DESACELERACIÓN

Durante los primeros seis meses del gobierno de Andrés Manuel López Obrador los indicadores económicos entraron en desaceleración, estancamiento o tienen modestos crecimientos. Incluso, recuerdan a los de los primeros meses del gobierno de Ernesto Zedillo, aunque sin una deuda pública y privada como la de entonces que ocasionó una crisis económica demoledora en la década de los noventa, dijo a La Silla Rota el director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), José Luis de la Cruz Gallegos.

Aunque es cierto que el crecimiento que la nueva administración recibió de la anterior ya venía a la baja, aún falta un mensaje de confianza para los inversionistas, y es precisamente el sector industrial -al que el presidente López Obrador le ha apostado más con proyectos como la refinería de Dos Bocas o el Tren Maya- el que enfrenta la desaceleración. Ello, pese a que representa el 29 por ciento de la economía del país.

Cuatro elementos fundamentales permiten entender esta situación. La primera es el entorno externo, la desaceleración industrial de Estados Unidos. Es un hecho que venía ocurriendo pero que se exacerbó en el primer semestre de este año, nos va a seguir afectando y lo va a hacer con más fuerza. Es un elemento exógeno”, mencionó.

El segundo es la tendencia que ya se tenía desde el segundo trimestre del año pasado en la economía mexicana, de desaceleración y que iba a afectar a quien sea que ganara la elección presidencial del 2018, aseguró el experto.

Sobre estas dos cosas las decisiones internas, de ajuste restrictivo al gasto público también han afectado. Cerrar la llave en inversión en construcción, en los programas de ajuste de austeridad, todo lo que ha implicado una nueva arquitectura para las finanzas públicas, afectan, así como los elementos que señalaba del aeropuerto (cancelado), lo que en su momento ocurrió con la posibilidad de dejar de cobrar comisiones de los bancos, los proyectos energéticos de Pemex que han causado controversias con grupos financieros y calificadoras. Eso se ha conjuntado para inhibir la inversión y ésta se ha contraído entre agosto y febrero con una caída de 2 por ciento en promedio durante los últimos meses, eso es negativo”, continuó.

El cuarto elemento es que esto se monta sobre una economía que en el último sexenio creció poco más de 2 por ciento, entonces estructuralmente la economía tenía debilidades y esos elementos externos y las decisiones del actual gobierno exacerbaron esa debilidad, añadió.

En caso de que la economía continúe como durante los primeros meses, la meta de crecimiento de 6 por ciento planteada en el Plan Nacional de Desarrollo no se alcanzará, pronosticó.

El analista reconoció que la nueva administración ha buscado hacer cambios importantes con otra perspectiva y consideró que la lucha contra la corrupción y plantear la reactivación del sector energético se enmarcan en ambos sentidos y han sido banderas positivas.

Sin embargo ahora lo que sigue es el crecimiento económico, si la economía no crece no hay oportunidades y el gasto social no va alcanzar para generar oportunidades que no generen la economía. Los primeros seis meses en términos de crecimiento económico están por debajo de lo estimado, pero evidentemente el siguiente semestre la prueba que viene es si se puede dar vuelta a la página y si el presidente trae la capacidad de este nuevo gobierno de echar a andar la economía”.

LO QUE ATAÑE AL GOBIERNO ACTUAL

De la Cruz Gallegos explicó que durante el primer trimestre el sector industrial, que representa el 29 por ciento de la economía del país, entró en desaceleración y está al borde del estancamiento. El sector servicios que abarca comercio, transporte y corporativos, creció 1 por ciento. Además, alojamientos, turismo y  actividades de gobierno tienen también ya una caída.

La inversión ha caído y se nota en que la compra de maquinaria al extranjero, la cual cayó 9.2 por ciento, lo que implica que las empresas dejaron de invertir en la compra de maquinaria y de equipo.

Lo que sabemos es que sin inversión no hay crecimiento, antecede a crecimiento, y eso ya no lo tenemos para abril”, explicó a La Silla Rota el director de IDIC.

En cuanto al empleo, las cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reportadas hasta abril, así como las del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) difundidas hasta marzo, señalan que la ocupación que se está generando no solo viene con menor ritmo de fuerza, sino que la tendencia se repite también en rangos de salario.

Eso ya está afectando al consumo de lo más básico. Ese componente es la segunda etapa de lo que implicaría una desaceleración más fuerte y que evidentemente nos va a tocar observarlo en el segundo semestre del año”, añadió.

Un tercer elemento es la desaceleración que también padece el sector industrial de Estados Unidos.

Lo que las cifras hasta el mes de abril permiten observar, de acuerdo con la reserva Federal de Estados Unidos es que la industria se sigue debilitando, el crecimiento anual durante abril apenas llegó a 0.9 por ciento y la tendencia sigue a la baja. En este sentido, durante el segundo trimestre del año México empezará a acusar recibo de esta debilidad de la actividad industrial de Estados Unidos que se va a acabar reflejando en las exportaciones mexicanas”.

Para De la Cruz Gallegos es hora de que el gobierno active un programa económico emergente  para evitar que la desaceleración sea mayor.

No hay nación económica exitosa que tenga un desempeño exitoso que no tenga como objetivo crecer, entonces ese es el paso que debe darse una vez que se implementaron las medidas de lucha contra la corrupción”.

El segundo aspecto que debe plantearse para que esto ocurra es estimular la inversión, fundamental para cualquier perspectiva de crecimiento, y que se traduce en compra de maquinaria, equipo y construcción y comenzar a crecer, lograr lo que se plantea el PND y revertir la tendencia de la coyuntura.

“Nosotros prevemos que la economía crecerá en el mejor de los casos alrededor de 0.9 por ciento porque durante el primer trimestre fue de 0.1 por ciento, las tendencias del segundo trimestre apuntan a tendencias menores a 1 por ciento. Desde nuestro punto de vista el segundo semestre debería crecer más de 3 por ciento para compensar estos crecimientos nulos prácticamente, esto va a ser muy complicado, sobre todo por la desaceleración estadounidense y lo que viene asociado de los efectos de la guerra económica China y Estados Unidos.

Lo que observamos es que las condicionantes que Donald Trump va a imponer sobre sus socios comerciales como México es cerrar las puertas a varias importaciones chinas. Lo vimos en la última negociación del TMec y en temas como el aluminio y el acero y esta guerra va a acabar afectando a México. Va a ser muy complejo si no se generan programas internos que fomenten inversión”.

Descartó que pese a que los números de crecimiento en algunos aspectos se parecen a los de 1995, la situación sea igual, e incluso consideró que hay espacio para revertir la situación con un programa de fomento a la inversión.

Aún es manejable generar crecimiento en este entorno, pero por eso enfatizamos, ya se debe de poner al crecimiento económico como objetivo fundamental porque si no la desaceleración se va a profundizar y si bien no llegaríamos a una crisis de 95 sí podríamos hablar de que la desaceleración podría conducir al estancamiento económico mayor en el sistema productivo”, concluyó.

SEIS MESES. CORTE DE CAJA

De acuerdo con el documento “Corte de caja primer semestre”, elaborado por Integralia, los aspectos buenos de López Obrador en dicho periodo son:

-Compromiso de Finanzas públicas sanas

-Gobierno contempla poner objetivos de mediano plazo para las finanzas públicas

-La apuesta de un mayor crecimiento reside en la infraestructura

-Énfasis en lo social. Se pone acento en las distintas brechas sociales económicas, género y geográficas que tiene el país

-Congreso bajo control, se frenaron iniciativas antimercado.

Lo no bueno de AMLO es lo siguiente:

-Voluntarismo; falta de claridad en los planes y proyectos

-Promesas sin considerar restricciones presupuestales

-No hay una agenda de reformas estructurales. No es claro cuál es el plan para crecer más. Indefinición del plan de infraestructura.

-Retórica de polarización, adjetivos y búsqueda de culpables.

-No hay un plan para combatir el crimen

-Debilitamiento del sector público será contraproducente

cmo