Main logo
TERROR

¿Conoces las leyendas urbanas del Puerto de Veracruz?

Entre las historias que de miedo y terror que se cuentan entre las personas de Veracruz en estas fechas cercanas al Halloween y Día de Muertos, destacan las que ocurrieron en el parque Reino Mágico, que en algún momento llegó a formar partes de un cementerio

La Blanca Nieves de Reino Mágico..Es una figura que visitantes del parque afirman que genera incomodidad y miedo.Créditos: La Silla Rota
Escrito en VERACRUZ el

Gracias a la tradición oral y luego de varias décadas, aún es posible escuchar historias fantasmales sobre supuestos entes que se aparecen en lugares donde la sociedad veracruzana camina de manera cotidiana. Ricardo Cañas Montalvo, encargado del Museo de la Ciudad de Veracruz cuenta para La Silla Rota Veracruz las dos principales leyendas urbanas del Parque Reino Mágico, lugar donde en 1913 existió un cementerio municipal.

El panteón general o panteón municipal que abarcaba de Lafragua hasta la calle Miguel Alemán, comenzó a ser retirado en 1959, por lo que casas, calles y el parque Reino Mágico se edificaron ahí. Actualmente el lugar es una zona habitacional en la que se extienden tres colonias con una fuerte presencia comercial y de tráfico vehicular.

En estas fechas que coinciden con celebraciones como Halloween y Día de Muertos, estas historias son revividas por los veracruzanos, que no dejan pasar desapercibidas las fechas para recordar lo que se cuenta alrededor del parque Reino Mágico y que a más de uno deja con la piel helada por el terror.

Muerto de Miedo

Ricardo Cañas contó que en una ocasión, un empleado del área de Parques y Jardines del ayuntamiento de Veracruz, asignado al parque infantil Reino Mágico, quien se dedicaba a limpiar y atender el lugar, se llevó un susto de muerte. En ese tiempo, recuerda, el parque cerraba alrededor de las seis de la tarde por lo que para el jardinero fue necesario recorrer prácticamente las ocho hectáreas que abarca este sitio.

El empleado comenzó a recorrer el parque para cerciorarse que nadie quedara dentro luego de su cierre, una vez que llegó a la zona del “Reino de la Fantasía”, donde se encontraban Blanca Nieves y los siete enanos, escuchó unas voces y decidió acercarse más.

  • ¡Disculpe, ya cerramos el parque! gritó el hombre.
  • “En eso el jardinero mencionó que ve cómo voltea Blanca Nieves diciendo: Somos nosotros, ¿Qué no nos ves?”, contó Ricardo Cañas.

El trabajador del ayuntamiento salió corriendo del lugar; según Ricardo Cañas, fue hospitalizado en el Hospital General de Veracruz con fiebre alta y finalmente falleció con más de 70 años a los tres días del incidente en Reino Mágico, esto en la década de los años 1990.

“El señor no estaba bajo los influjos del alcohol o de ninguna droga, era simplemente un empleado de Parques y Jardines.”

El suéter colgado

La segunda historia ocurrió cuando era el tiempo de los vendavales de otoño, con frentes fríos y vientos de norte que superan los 100 km/h, un domingo una señora decidió llevar a su hija para que jugara en el parque Reino Mágico. La niña comenzó a jugar, pero al cabo de un rato, caminó junto a otra pequeña hasta donde se encontraba su madre sentada y dijo:

  • Mamá, es mi amiga, pero tiene frío
  • La señora preguntó por los padres de la menor, a lo que respondió:
  • Mi mamá me dejó aquí, me dijo que después va a venir, tengo frío.

La madre un poco preocupada se quita el suéter y se lo pone a la niña para que continúe jugando con su hija. Poco a poco comenzó a oscurecer y la señora se retiró del lugar, no sin antes preguntarle a la pequeña dónde vivía. Varios días después, la señora optó por ir a buscar a los padres para ver si efectivamente se trataba de un intento de abandono.

  • Tocó la puerta y salió una señora ya entrada en años a quien preguntó:
  • Disculpe, ¿Aquí vive la niña Claudia?
  • ¿Qué desea?- contestó la señora
  • Fui a Reino Mágico con mi hija el domingo y nos encontramos a una niña que nos dijo que iban a regresar por ella, me dijo que vivía aquí.
  • La señora cierra la puerta y cuando vuelve a salir, saca una fotografía grupal de la escuela primaria (…) ¿Quién es la niña?, pregunta la anciana. Es esta, le contesta la otra mujer señalándole a quien vio en Reino Mágico.”

La anciana comenzó a explicar que se trataba de su hija quien había fallecido muchos años atrás, que no era posible.

“Cuando mi hija se murió, yo no tenía recursos económicos, mi marido me había dejado y yo estaba sola con mi hija, la niña se enfermó, gasté mucho dinero.”

Según el encargado del museo, la señora enterró a su hija en el antiguo cementerio de la ciudad que abarcaba de la calle Lafragua hasta casi Miguel Alemán.

En él no había perpetuidad para los cuerpos de los difuntos, pues al haber sobre población, las tumbas se perdían y enterraban a otros cuerpos encima de los que ya estaban.

La señora recogió los pocos restos que encontró de su hija y los pasó al Panteón Jardín pero parte de la osamenta no fue rescatada.

“El día que la dejé en el panteón municipal yo le prometí que regresaría por ella y eso lo llevo en mi pesar, no pude trasladar y sepultar a mi hija a tiempo dignamente.”

La anciana llevó a la mujer al panteón Jardín donde estaban los restos recuperados de su hija y sobre la cruz encima la lápida, el suéter que le habían prestado.

ygr