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Camila estaba feliz de regresar a clases; murió arrollada en Veracruz

Los familiares señalan que la empresa dueña del tráiler se niega a hacerse responsable de la muerte de Camila y de su padre, arrollados mientras se dirigían a la escuela; su mamá se encuentra grave en el hospital

La familia fue arrollada por un tráiler en la autopista Veracruz-Cardel. Padre e hija fallecieron, mientras la madre de la menor se encuentra en el hospital
Camila quería ser enfermera; murió arrollada camino a la escuela.La familia fue arrollada por un tráiler en la autopista Veracruz-Cardel. Padre e hija fallecieron, mientras la madre de la menor se encuentra en el hospital
Escrito en VERACRUZ el

Camila Cano Domínguez soñaba con ser enfermera y curar a las personas. La niña risueña de seis años estaba feliz porque había entrado a la primaria; con alegría presumía sus calificaciones a su abuela, Felipa Sandoval, que hoy llora la muerte de su nieta y de su yerno.

La fotografía de un casco y una mochila color rosa sobre el pavimento de la autopista Veracruz-La Antigua, consternó a los usuarios de redes sociales. Esta mañana del 2 de septiembre Camila y sus padres, Luis Alberto Cano y María de Jesús Domínguez, fueron arrollados por un tráiler en la zona norte de la ciudad de Veracruz, mientras se dirigían a la escuela. 

La menor y su padre murieron al instante, mientras que la madre se debate entre la vida y la muerte, pues tiene seis costillas fracturadas y daños en los pulmones por los golpes que recibió al ser arrastrada cerca de 200 metros por el tráiler. 

“En el momento que me avisaron del accidente sentí que todo se me venía encima, cuando me dijeron que mi hija estaba muy mal y que murió mi nieta y mi yerno. No te puedes imaginar el dolor que siento ahora”, cuenta Felipa con la voz entrecortada.

La menor estudiaba en la escuela primaria Licenciado Benito Juárez García, en la colonia Adolfo Ruíz Cortines del puerto. Aunque la escuela está a 30 minutos de su casa, sus padres la inscribieron ahí porque está a pocos metros de la vivienda de su abuela.

Camila pasaba las tardes con su abuela, su madre y sus dos medios hermanos. Todos los días, desde que regresaron a clases, María de Jesús y Luis Alberto se despertaban a las cinco de la mañana, a esa hora la familia de cinco integrantes se alistaba para ir a la escuela.

El hijo mayor de 17 años y el de 12 tomaban transporte público, mientras Camila y sus padres se trasladaban en la motocicleta, esto con tal de ahorrar dinero, explica Felipa.

“A las 7 de la mañana ellos estaban aquí. Apenas ayer los vi, mi yerno dejó a la niña después de la escuela, aquí comía, aquí jugaban con sus primos porque les quedaba más cerca la escuela y el trabajo”, agrega.

Felipa describe a su nieta y a su yerno como personas alegres. La menor era muy estudiosa e inteligente y le contaba a su abuela que quería ser enfermera, pues le gustaba la idea de curar a las personas. Estaba emocionada porque hace cinco días regresó a la escuela, sus tareas las realizaba en el patio de sus abuelos.

Luis Alberto Cano, el padre de Camila, se dedicaba a trabajar en el mantenimiento de climas. La casa que tienen en el fraccionamiento Colinas de Santa Fe es rentada, fue la opción más económica que tuvieron para tener un lugar donde vivir, al mes pagaban cerca de 3 mil pesos.

Luis quería comprar un carro para proteger a su familia de accidentes

El día del accidente todos llevaban casco. Luis siempre conducía con todas las precauciones y nunca tuvieron un percance de este tipo, pues sabía que estaba en juego la vida de su familia, expresa Hilario Osorio, tío político de María.

El domingo 28 de agosto fue la última reunión familiar, ahí Luis e Hilario conversaron sobre lo peligroso que era transportarse en una moto y de los accidentes que al diario ocurren en la autopista Veracruz-La Antigua.

De acuerdo con información de la Cruz Roja Veracruz, al día atienden un promedio de ocho accidentes en motocicletas en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, la autopista Veracruz-La Antigua es el lugar donde hay más percances de este tipo.

Por esto, Luis deseaba comprar un carro para trasladar a su familia de forma más segura; no obstante, el sueldo que tenía no le alcanzaba para mucho, por lo que trasladarse en motocicleta era la mejor opción.

Luis no tenía un ingreso fijo, su trabajo era eventual y María no tenía empleo debido a que el cuidado de sus hijos le absorbía mucho tiempo.

Había semanas que Luis podía ganarse mil 500 y otra 2 mil, pero no todos los días eran buenos, afirma Hilario.

“Aquí el mayor lujo que tenemos es comer un plato de frijoles con arroz, como ves somos una familia de bajos recursos”, comenta Hilario mientras señala la casa de los abuelos.

Los muros de la casa de Felipa todavía no están cubiertos, los blocks resaltan a la vista y una parte de las paredes está cubierta de láminas, al igual que el techo. La sala y el cuarto forman un espacio de nomás de seis metros de largo por cuatro de ancho.

Ahí viven ella y su esposo, quién padece de cáncer, este día suspendió sus quimioterapias por la noticia de la muerte de su nieta y yerno y la preocupación de tener a su hija en el hospital.

Debido a que la familia es de bajos recursos solicitan apoyo de los ciudadanos, para esto Felipa dio un el número de cuenta 4169-1604-4846-7457, donde pueden depositar.

Queremos justicia

El conductor del tráiler que arrolló a los tres integrantes de la familia Cano Domínguez huyó al momento del accidente, dejó el vehículo con placas 18- AS- 8S propiedad de la empresa Transportes RELF, la cual tiene su domicilio en la ciudad de Veracruz.

De acuerdo con los familiares, hasta el momento la empresa y la aseguradora no se ha hecho responsable por el accidente.

Por lo que piden a las autoridades se esclarezca el hecho y que les brinden apoyo, pues ellos no pueden pagar los gastos médicos si María llega a empeorar, pues también sufre de diabetes y problemas en los riñones, lo que complica aún más su situación. También no cuentan con los gastos para ambos funerales.

“No queremos que la muerte de Cami y mi yerno sea un caso más de injusticia”, concluye Felipa.