Juan Antonio N fue imputado por su presunta responsabilidad en el delito de feminicidio en contra de María Antonia Mendoza Martínez “Toñita”, quien fue asesinada en un domicilio de la colonia Zaragoza, en el puerto de Veracruz, el pasado 20 de julio.
De acuerdo con un comunicado de la Fiscalía General del Estado (FGE), el presunto feminicida permanecerá en prisión preventiva oficiosa durante el tiempo que dure el juicio, dentro del proceso penal 803/2022.
El presunto feminicida de Toñita fue detenido en las inmediaciones del puerto de Veracruz este lunes 19 de septiembre, cuando policías ministeriales de la Fiscalía General del Estado (FGE) le ejecutaron una orden de aprehensión dentro del proceso penal 803/2022.
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Según fuentes ministeriales, Juan Antonio N es un comerciante que guardaba su triciclo en el patio de la vivienda de Toñita, que la mujer rentaba como bodega a vendedores ambulantes de la zona del bulevar Manuel Ávila Camacho.
Toñita, de 71 años, tenía su domicilio en una casa ubicada en la calle Negrete, entre Collado e Ignacio de la Llave, en la colonia Zaragoza, en el puerto de Veracruz, donde era conocida debido a que renta su patio como estacionamiento para automovilistas y bodega de triciclos para vendedores de raspados y esquites.
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Su cuerpo fue encontrado por un vendedor de raspados cerca de las 10:00 de la noche del pasado 20 de julio en el patio de su vivienda. Según el parte médico, la adulta mayor murió a causa de una hemorragia y traumatismo craneoencefálico por las lesiones que sufrió en la cabeza.
De acuerdo con la familia de Toñita, la última persona que la vio con vida fue un médico que estacionaba su automóvil en casa de la víctima, quien se habría quedado viendo televisión. Más tarde, fue atacada a golpes en el rostro y en el cráneo hasta que murió.
Un día después del asesinato, policías ministeriales de la Fiscalía General del Estado (FGE) permitieron que los conductores y vendedores de esquites y raspados sacaran sus unidades y triciclos del patio de la casa de Toñita aun cuando el lugar estaba acordonado.
Sus familiares y vecinos marcharon por las calles del Centro Histórico de Veracruz el pasado 21 de agosto para exigir justicia por su feminicidio con lonas que contenían la frase “un asesino está suelto”.
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