El pasado 30 de diciembre, Estefanía Jiménez Ávila se convirtió en madre, después de un parto complicado y doloroso, comentó su madre la señora Noemí Ávila.
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La joven de 18 años padeció un desgarre tras el parto, por lo que tuvieron que suturarla en dos ocasiones y sufrió una hemorragia.
A 47 días del parto, Estefanía tuvo que ser operada, esto porque le dejaron gasas dentro del cuerpo, luego de dar a luz en el Hospital General de Cananea, Sonora.
De acuerdo con Proyecto Puente, el pasado 18 de enero, la joven fue llevada al hospital tras no soportar los intensos dolores y temperaturas que sufría por las gasas que tenía dentro de su cuerpo y que le estaban ocasionado una severa infección.
Ya en el Hospital General, un médico de guardia escuchó la situación de Estefanía y la revisó.
El doctor ve que la joven trae unas bolas de gasas, pero envueltas en otras gasas, explicó Noemí, “parecían unos calcetines, de tan grandes, así como cuando enrollas los calcetines, y le saca uno y le saca otros… los tapones que le pusieron para evitar la hemorragia producida después del parto”.
Por este hecho, la familia decidió interponer una denuncia por negligencia médica en contra del hospital y de quien resulte responsable.
El médico que atendió a Estefanía dijo: “no sé cómo estás viva, mija, porque en dos semanas te da una infección tan grande que se pasa a la sangre, a los órganos y cualquiera se muere con esto que te pasó a ti”.
Una vez pasada la emergencia el pasado lunes, la señora Noemí decidió hacer pública la denuncia que casi le cuesta la vida a su hija.
La tarde del martes 19 de febrero, Félix Higuera Romero, subsecretario de Salud y otros funcionarios de la dependencia, visitaron a Estefanía en el hospital y a Noemí para ofrecerles una disculpa.
Sobre este caso, la Secretaría de Salud en Sonora, respondió a través de un boletín la noche del pasado 19 de febrero que “tras confirmar lo ocurrido, se estableció separar temporalmente de sus funciones a los servidores públicos relacionados con este caso, para emprender una investigación de los hechos y deslindar responsabilidades”.
Este es el segundo caso de negligencia médica, luego que el lunes se informara del caso de una bebé que nació en el automóvil de su familia después de que presuntamente le negaran la atención médica a su madre en el Centro de Salud de Magdalena de Kino.
Después de dar a luz, regresó al hospital para nuevamente pedir ayuda, por lo que ingresaron a la recién nacida a una incubadora armada con un garrafón de agua.
Con información de Proyecto Puente
kach