El acuerdo alcanzado entre México y Estados Unidos en materia comercial contiene algunas mejoras, pero es notablemente peor en muchos sentidos y su paso por el Congreso norteamericano es incierto, se señaló en un editorial publicado por The Wall Street Journal.
En el texto denominado “Half a Nafta” o Medio TLCAN, el rotativo norteamericano contrasta con las palabras del presidente de EU, Donald Trump, quien aseguró ayer lunes que este acuerdo es “mucho mejor” que el antiguo Tratado.
Se destacó que este anuncio ha traído un “modesto rally de alivio” a los mercados financieros, pues suspende de momento las amenazas de Trump de salirse del Tratado, cosa que le hubiera resultado en una suerte de “disparo en el pie”, sin embargo, se resaltó que “con el Sr. Trump, el auto daño no siempre es una restricción efectiva”.
Entre los avances de la renegociación, el WSJ subrayó logros como la extensión en la protección de datos para drogas biológicas a 10 años, la no discriminación de cultivos genéticamente modificados, protección para productores agrícolas, como son los de queso que padecían un abuso regulatorio.
Sobre la cláusula “sunset”, que buscaba una terminación del TLCAN cada cinco años, el diario consideró que haber quitado esta parte aumenta la incertidumbre para los inversores, aunque eso puede ser tolerable.
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Uno de los problemas más importantes que remarca el texto tiene que ver con la exclusión de Canadá, esto aunque tanto el presidente de México, Enrique Peña Nieto, como el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, presionaron para arrancar con las negociaciones con Canadá, mientras Trump amenazaba con aranceles a los automóviles fabricados en dicho país.
La respuesta de Canadá fue moderada y se limitó a elogiar el “progreso” en las negociaciones de EU y México, al tiempo que ofreció reincorporarse al proceso esta semana.
Otro de los problemas que destaca el editorial es que el acuerdo bilateral elimina las protecciones actuales de la mayoría de los inversionistas estadounidenses en México. Ejemplificó que los inversores en petróleo y gas, telecomunicaciones y generación de energía conservarán lo que ahora tienen, mientras que otros sólo quedarán protegidos contra la expropiación física.
Los jefes negociadores de EU y México, Robert Lighthizer e Ildefonso Guajardo (Tomada del WSJ)
El texto detalló que esta medida de dejar desprotegidas a las empresas estadounidenses tiene que ver con una idea de Trump-Lighthizer, la cual considera que así los CEO de dichas firmas mantendrán su dinero en casa. Lo anterior fue calificado como una “tontería económica”, pues los trabajadores estadounidenses prosperan cuando sus empresas prosperan: en el extranjero y en casa.
Otra medida parecida es imponer nueva burocracia y costos en la industria automotriz para castigar las importaciones.
Se remarcó que “este es un comercio manejado políticamente, y su lógica económica es lo opuesto a la agenda de desregulación doméstica del Sr. Trump”.
Algunas de estas medidas proteccionistas han sido utilizadas por Lighthizer para cortejar en silencio al demócrata de Ohio Sherrod Brown y a la proteccionista Lori Wallach de Public Citizen durante las negociaciones, con lo que pretende que el nuevo TLCAN sea avalado por los demócratas.
En lo anterior, el WSJ deseó suerte con eso, pues recordó que ningún acuerdo comercial ha pasado en las últimas décadas sin una preponderancia de votos republicanos.
Sin embargo, se detalló, al esperar tanto tiempo para llegar a un nuevo acuerdo, el Sr. Lighthizer puede haberse convertido en rehén de los demócratas. Bajo la ley de promoción comercial, no hay tiempo suficiente para votar sobre el acuerdo revisado durante el Congreso actual. El acuerdo iría al próximo Congreso, que podría ser dirigido por Nancy Pelosi y Chuck Schumer. ¿Realmente van a apoyar un trato comercial de Donald Trump? El presidente necesitará sus votos porque es probable que los republicanos de libre comercio y las empresas estadounidenses sean difíciles de vender.
El acuerdo anunciado el lunes tiene partes móviles y todavía hay tiempo para hacer mejoras antes de que se firme y envíe al Congreso. Estamos contentos de ver al Sr. Trump alejarse del suicidio de la retirada del TLCAN, pero según la evidencia pública, se destacó, hasta ahora su nuevo acuerdo es peor.
lrc