Donald Trump, mantendrá encuentros bilaterales durante su visita esta semana a Davos (Suiza) con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y los presidentes de Ruanda, Paul Kagame, y Suiza, Alain Berset, informó hoy la Casa Blanca.
Esas reuniones se sumarán a la que Trump ya tenía programada con la primera ministra británica, Theresa May, según adelantó el asesor de seguridad nacional de Trump, H.R. McMaster, en una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
Trump llegará este jueves por la mañana a Davos para participar en el Foro Económico Mundial, y ese mismo día se reunirá con May, con la que hablará sobre "el conflicto en Siria" y "formas de hacer frente a los fallos del acuerdo nuclear con Irán", explicó McMaster.
El presidente estadounidense advirtió este mes que en mayo reimpoindrá las sanciones nucleares a Irán que Estados Unidos suspendió en base al acuerdo multilateral de 2015, a no ser que sus aliados europeos negocien con él un pacto suplementario que imponga nuevos límites a las actividades atómicas de los iraníes.
También el jueves, Trump se reunirá con Netanyahu, con el que hablará sobre "el rotundo compromiso de EE.UU. con Israel, los esfuerzos para contrarrestar la influencia iraní en Oriente Medio y formas de alcanzar una paz duradera", indicó McMaster.
El viernes se entrevistará con Kagame, que este mes se convertirá en el presidente de turno de la Unión Africana (UA), para "reafirmar la relación entre Estados Unidos y África y discutir sobre prioridades compartidas, incluidos el comercio y la seguridad", apuntó el asesor.
Ruanda fue uno de los países africanos que lamentó los comentarios que este mes hizo Trump en una reunión con legisladores, en la que supuestamente llamó "agujeros de mierda" a países no identificados de ese continente, además de a El Salvador y Haití.
A continuación, Trump se reunirá con el presidente de turno de Suiza, la nación anfitriona del foro, para hablar sobre "inversiones bilaterales, crecimiento económico e innovación", según McMaster.
Después, Trump dará un discurso ante los asistentes al foro, con el mensaje de que "Estados Unidos está abierto para los negocios" y es un país "competitivo" gracias a sus políticas económicas, según indicó el principal asesor económico de la Casa Blanca, Gary Cohn.
Trump defenderá que "un Estados Unidos próspero beneficia al mundo", y que su Gobierno está comprometido con "el crecimiento económico internacional", pero mediante un comercio "justo y recíproco", en el que "los países rindan cuentas" si no cumplen las reglas, explicó Cohn.
A Trump le acompañará una nutrida delegación de asesores y miembros de su gabinete, aunque no su esposa Melania, que tenía previsto unirse al viaje pero ha decidido no ir "por asuntos de agenda y logísticos", según su portavoz, Stephanie Grisham.