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Todos los mexicanos involucrados en la secta sexual NXIVM

Al menos 11 mexicanos formaban parte del círculo cercano de Keith Raniere, líder de NXIVM, secta sexual oculta detrás de un grupo de autoayuda

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Keith Raniere es enjuiciado en Estados Unidos por utilizar a su organización NXIVM como una secta sexual, donde las mujeres eran marcadas como ganado, obligadas ser esclavas sexuales y extorsionadas para que no contaran lo que sucedía dentro de la agrupación.

Dentro de NXIVM había otro grupo secreto identificado como DOS (Dominante Sobre Sumiso, en español), donde el círculo cercano de Raniere, a través de una organización piramidal, orquestaba dicha secta sexual.

En el círculo cercano de Keith existen 25 personas, según autoridades estadunidenses, de las cuales 11 –casi la mitad– son mexicanos.


Cabe mencionar que de los países a los que llegó esta secta sexual tapada detrás de un grupo de autoayuda fue México donde cimentó su principal sucursal.

Empresarios, hijos de expresidentes y dueños de comunicación, así como las “esclavas favoritas” de Raniere, destacan los mexicanos en NXIVM.

Emilio Salinas, hijo del expresidente Carlos Salinas de Gortari, es el mexicano más importante en la estructura criminal de Keith y una de las personas de más confianza para Raniere. Él fundó y dirigió la organización de NXIVM en México.

Incluso, Emilio Salinas es señalado de recaudar 9.5 millones de pesos para financiar la filmación y promoción de la película “Encender el Corazón”, sobre el propio Keith Raniere, según informó Aristegui Noticias, citando datos del Sistema de Administración Tributaria (SAT).

Salinas no orquestaba NXIVM en México por sí solo, según autoridades estadunidenses, Alex Betancourt, socio del hijo del expresidente, también encabezaba la organización.

Betancourt ha sido señalado de recibir fotografías comprometedoras –principalmente desnudos– de las esclavas sexuales llamadas “Colateral”, mismas que servían como presión o chantaje para que las involucradas no rompieran su contrato de confidencialidad y se comprometieran aún más con la secta, según lo señalado por Mark Vicente, fotógrafo oficial de los eventos corporativos de NXIVM.

Jack Levy, empresario inmobiliario de Jalisco, también es vinculado al círculo cercano de Keith, así como muy allegado tanto a Salinas como a Betancourt.

Rosa Laura Junco, hija del dueño del periódico Reforma, es una de las mexicanas más involucradas de forma directa en el caso de la secta sexual de Keith Raniere.

Junco era quien invitaba a las mujeres a formar parte de grupo DOS, en el cual terminaban como esclavas sexuales y/o marcadas como ganado con las iniciales “KR”, en referencia al líder de NXIVM.

De acuerdo con Noticieros Televisa, en sólo una de las audiencias del caso Raniere, donde una de las víctimas relata lo sucedido en la secta, el apellido “Junco” se repitió en siete ocasiones, mientras que el nombre de “Rosa Laura” sale a relucir en 45 veces.  

Su involucramiento es tal, que Junco es considerada la quinta en la línea jerárquica de DOS, encargada además de guardar los “Colateral” y ser dueña de un inmueble que servía como sede de la secta.

El nombre de siete mujeres mexicanas más destacan en el cirulo cercano de Raniere, sin embargo, no se ha detallado sus implicaciones. Aunque podría tratarse de esclavas sexuales o parejas del propio Ketih: Daniela Padilla Bergeron, Loreta Garza, Ivy Nevares, Mónica Duran, Camila, Mariana y Daniela.

Sin embargo, de estas siete, cuatro aparecen en un grupo reducido de ocho mujeres que presuntamente formaban parte del DOS, donde o eran dominantes o sumisas, se trata de: Daniela Padilla Bergeron, Loreta Garza, Mónica Duran y Camila, más la propia Rosa Laura Junco.

Hasta el momento, ninguno de los mexicanos señalados por las autoridades estadunidenses han sido llamados a testificar o se les conoce alguna carpeta de investigación abierta sobre el caso.