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Martín Duque, el mexicano de 14 años que murió en el tiroteo

Ayer los padres del joven vivieron momentos de angustia porque no daban con el paradero de su hijo; luego supieron que perdió la vida

Escrito en MUNDO el

Miles de personas se reunieron la noche del jueves en una vigila en recuerdo de las 17 víctimas mortales de la matanza perpetrada el miércoles por Nikolas Cruz en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas, en Parkland (Florida, Estados Unidos).

Un joven mexicano, originario del estado de Guerrero, fue una las víctimas mortales del tiroteo en una secundaria de  Parkland, Florida.

Los padres del adolescente de 14 años, Martín Duque, informaron que no se podían comunicar con él porque no contaba con teléfono.

Describieron el acontecimiento como una pesadilla y, aunque uno de sus hijos se salvó, Martín no pudo lograrlo. Tuvieron que esperar horas para conocer lo que había pasado con su hijo.

 

Agentes del FBI se encargaron de hablar con la familia para notificar la muerte poco después de la medianoche.


Por su parte, estudiantes dieron sus testimonios, uno de ellos contó que al salir de su aula encontró a dos niñas y un niño muertos y llenos de sangre. Su madre explicó cómo fue que le avisaron del tiroteo y que además le informaron que había 17 muertos.

La estudiante Alexandra de 16 años dio su testimonio, dijo que escucharon la alarma de fuego y  mientras salían escucharon los tiros, por lo que todos comenzaron a correr; los estudiantes estaban tirados en el suelo y los demás los pisaban. Explicó que lo que veía parecía una película y no se lo desea a nadie. Ella y su hermana se encontraron al correr. Las dos niñas y su familia ya estuvieron con una psicóloga explicando lo vivido.

Y miles no pudieron evitar emocionarse en la vigilia. Tanto jóvenes como adultos lloraron a lágrima viva al escuchar el testimonio del padre de otra joven de 14 años, Jamie Guttenberg, una de las víctimas mortales del ataque, quien consiguió hablar gracias a los ánimos y frases de apoyo que recibió.

El padre, Fred Guttenberg, explicó emocionado que el año pasado perdió a un hermano víctima de un cáncer, enfermedad derivada de los atentados del 11 de septiembre de 2001. Pensó entonces que el dolor era insoportable, pero indicó que lo que ha vivido desde la tarde de este miércoles es infinitamente peor.

"Jamie era la luz de la fiesta", dijo el progenitor, que lamentó no recordar si se despidió de su hija antes de que ésta saliera hacia la escuela y no la volviera a ver.

mlmt / ams