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Sismo seca balnearios de Morelos

El sismo registrado el pasado 19 de septiembre provocó la muerte de casi 80 personas y ocasionó que varias familias estén a punto de perder sus empleos

Escrito en ESTADOS el

Por el temblor varios túneles naturales subterráneos que forman los manantiales que existen en Morelos se afectaron al limitar o impedir la salida del agua en diferentes balnearios naturales del estado, como Agua Hedionda, en Cuautla; Palo Bolero y San Ramón, en Xochitepec, y Apotla, en Puente de Ixtla. 

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Esta situación provocó el cierre temporal de estos sitios de esparcimiento a los que asistían turistas de diferentes estados de la República e incluso de otros países, lo que afectó a las familias cuyo ingreso dependía de las ventas y el trabajo en esos lugares.

Juan Carlos Valencia Vargas, Secretario Ejecutivo de la Comisión Estatal del Agua (Ceagua) en Morelos, confirmó afectaciones en cinco manantiales de la entidad, las más graves en Cuautla y Xochitepec.

“En Morelos se reportaron afectaciones en cinco manantiales, dos de ellos con afectaciones severas, el manantial Agua Hedionda, en Cuautla, y el manantial San Ramón, en Xochitepec, en ambos casos el manantial dejó de fluir básicamente, todo el caudal que salía de esos manantiales dejó de fluir en este momento”, expresó Valencia Vargas en entrevista.

Sin embargo, también hubo afectaciones menores en los manantiales de Palo Bolero, en Xochitepec; Apotla, en Puente de Ixtla, y Las Huertas, en Tlaquiltenango.

En el balneario de San Ramón, ubicado en la comunidad de Chiconcuac, el agua dejó de fluir cinco días después del sismo, por lo que el sitio permanece cerrado desde entonces.

“A raíz del 19, del día del sismo, ahí pues nos dio mucho gusto de que brotó muchísima agua, se vino casi al doble, pero en el transcurso de cinco días fue como se empezó a aclarar el agua, porque salió muy turbia primero, en el temblor, a los cinco días se empezó a aclarar y vimos que empezó a disminuir el nivel y hasta que se perdió fue cuando ya fuimos a reportarlo a las autoridades que les corresponde”, expresó Vicente Ayala Sánchez, administrador del lugar.

Aquí por lo menos 42 familias perderán su sustento si el problema no se soluciona pronto.

“Son 42 familias, que son los socios los que están siendo afectados, y algunas personas que son quienes venían a exponer sus productos, como eran salvavidas, trajes, su comida también, ahorita ya no vienen porque no hay ni a quien venderles”, agregó Ayala.

En Agua Hedionda, en Cuautla, son cerca de 50 familias las que dependían de los ingresos que generaba la venta de productos al turismo y que ahora, al no obtener ingresos, han pensado en cerrar sus negocios.

“Totalmente, todo es una pérdida total, nos duele también, pero, pues lo importante es aquí de que bajan nuestras ventas, mientras esté el balneario cerrado no hay turismo, no hay entrada de dinero”, dijo Miriam Talavera, quien vende trajes de baño afuera del balneario.

Óscar Alexis Benavides Barrera, empleado de una pizzería, dijo que incluso los comerciantes tienen que regalar sus productos ante la falta de cliente

“Sí, nos afectado un poco porque se bajaron mucho las ventas, la doña Chagüita, que es la de los tacos, casi no vende, luego anda regalando sus tacos por la misma ocasión y los de los trajes de baño igual, ya no se han presentado todos y ya la señora abre, aunque no haya ventas”, expresó.

José Carlos, empleado de un supermercado, dijo que en su caso las ventas del sitio en el que trabaja cayeron prácticamente a la mitad.

“Ha habido mucha pérdida en la venta, demasiada, lo que antes se vendía… estamos a la mitad de lo que vendíamos antes, estamos en una situación crítica en la que se está pensando que a lo mejor puede llegar hasta el cierre la tienda”, dijo.

Alfonso Beltrán Flores, encargado del mantenimiento del Balneario Palo Bolero, en Xochitepec, aseguró que ahí solo permanecen a la espera de que las autoridades les informen si se podrá o no recuperar el agua.

“El manantial definitivamente ya está seco, aún estamos con la esperanza de alguna dependencia ya sea de Gobierno o a ver quién nos echa la mano para ver cómo podemos sacar el agua o que nos diga que ya no es viable tener un balneario”, dijo

Pero para la Comisión Estatal del Agua estas afectaciones no necesariamente son definitivas, pues incluso tras el sismo de 1985 la llegada de agua a algunos balnearios de la entidad también fue suspendida.

Con el paso del tiempo la mayoría de los manantiales recuperó su afluente, dijo el Secretario Ejecutivo de la Comisión Estatal del Agua.

“En el 85 tuvimos un fenómeno similar y la mayoría de los manantiales se recuperaron, solo hubo uno que no recuperó su caudal, Palo Bolero en Xochitepec, pero San Ramón, que en este sismo perdió su caudal, en el 85 también lo perdió”, dijo.

Además, un grupo de especialistas de los institutos de Geología, de Geofísica y de Geografía de la UNAM, así como técnicos de la Comisión Nacional del Agua, de la Comisión Estatal del Agua y del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, analizando el fenómeno para tratar de revertir esta situación.