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El mexicano que libró sentencia a muerte y murió meses después

En 1997 fue perdonado por una corte estadunidense y al poco tiempo tuvo un final trágico en su país

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Ricardo Aldape Guerra fue un mexicano que había migrado ilegalmente a Estados Unidos y en 1982 fue sentenciado a muerte tras ser acusado de asesinar a un policía en Houston, Texas. Sin embargo, a diferencia del reciente caso de Rubén Ramírez Cárdenas, la suerte y la justicia le sonrieron y tras casi 15 años de estar preso, fue perdonado y meses después, murió.

Según narró Ricardo Aldape, en 1982 cuando sucedió aquel incidente que provocó que estuviera preso durante 15 años, estaba con sus amigos en Houston cuando se encontraron con un policía, con quien discutieron puesto que quería detenerlos y momentos después, fue asesinado por uno de los amigos. Sin embargo, el detenido fue Aldape.

El 16 de abril de 1997 fue un día de alegría para los mexicanos y para su ciudad natal en Monterrey, puesto que gracias a la lucha de su abogado y las autoridades mexicanas logró comprobarse que era inocente y suspendieron la sentencia a muerte.

La vida de Aldape cambió totalmente cuando regresó a su país, pues inspiró corridos, libros, documentales y consiguió un contrato con la cadena de televisión TV Azteca para que actuara en una telenovela llamada “Al norte del corazón” para interpretar a un indocumentado mexicano que vivía en Estados Unidos.

Todo parecía ir viento en popa, sin embargo, un fatídico 23 de agosto del mismo año, este tuvo un accidente automovilístico en el que perdió la vida.

Su automóvil deportivo recién adquirido gracias a su participación en la telenovela se impactó contra un camión de carga en San Luis Potosí. 

De acuerdo a los peritajes de la Policía de Caminos, Aldape conducía a alta velocidad desde la capital mexicana hasta Monterrey y al interior de su vehículo se encontraba un sobre con marihuana. 

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Su hermana, Elvira Aldape, en medio de una casa abarrotada de gente en la que ahora se realizaba un velorio se lamentaba por el triste destino de su hermano, que tenía planes de comprar una casa en Monterrey y casarse en diciembre gracias a sus ingresos como actor.

“Nos duró muy poco el gusto de tenerlo con nosotros. Parece que este era su destino”, se lamentó.

Con información El Tiempo y El País

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