Más de 50 días tardó el gobierno mexicano en reaccionar a un informe de la ONU, donde el organismo concluyó que 34 detenidos relacionados al caso Ayotzinapa sufrieron tortura durante la etapa de la investigación.
Pese a que en el reporte la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos contempló expedientes judiciales, fichas médicas que revelan numerosas lesiones y entrevistas con autoridades, detenidos y testigos, las autoridades mexicanas lo tacharon de contener conclusiones prematuras, que carecen de “rigor metodológico y sustento jurídico”.
La tortura está presente en distintas fases de detención, afirma la ONU
Es más, para México el informe "Doble Injusticia. Informe sobre violaciones de derechos humanos en la investigación del caso Ayotzinapa" podría afectar al curso de la indagatoria sobre la desaparición de los 43 normalistas, y que no respeta los acuerdos conjuntos para investigar aunado a que el organismo internacional desatendió el llamado para colaborar.
¿Qué dice el reporte de la ONU?
El informe que dio a conocer el pasado 14 de marzo responsabiliza a la PGR, la Policía Federal y la Marina, desde el momento que la Procuraduría atrajo el caso el 5 de octubre de 2014 y culminó la labor directa de la Fiscalía del Estado de Guerrero.
En él sentencia que hay 129 personas imputadas en el caso, pero sólo se enfocó en 63. De ahí ubicó 34 patrones uniformes sobre detenciones arbitrarias, información y confesiones bajo tortura, así como tardanza en presentarlos ante un Ministerio Público que los dejó fuera de la protección de la ley.
También detalla que explicaron las lesiones en los detenidos de manera contradictoria, que justificaron como “autogolpes, lesiones anteriores a la detención, caídas y hasta estados de ebriedad o caídas”.
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A su vez captó la atención de la ONU que en el caso existieran declaraciones auto-inculpatorias “libres y espontáneas”, que coincidieron con personas que presentaban múltiples lesiones, las cuales respaldaron partes médicos.
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos fue incisiva en que aún no se ha sancionado a ningún funcionario sobre las violaciones, por lo que concluyeron existe un patrón de comisión, tolerancia y encubrimiento de actos de tortura en la investigación del caso de Ayotzinapa.
Autoridades mexicanas confrontan el reporte
Sobre el punto en que la ONU contabiliza 34 actos de tortura para los detenidos, pormenorizó que 26 no arrojaron evidencia de tortura y sólo dos sí dieron resultados de evidencia de tortura física, pero no psicológica.
Además, refiere que cuatro no aceptaron la realización del Protocolo de Estambul (incluso uno de ellos enfatizó que no había sido objeto de tortura), otro es el procesado "X"12; y uno más está pendiente de emisión.
También refuta que los dictámenes fueron eficaces y que no sólo los practicó la PGR, también una instancia independiente como la Coordinación General de Servicios Periciales, que cuenta con personal técnico y científico apto y calificado, plenamente capacitado y con experiencia probada.
Para el gobierno mexicano una grave omisión de la ONU fue que no contrastó dichos datos antes de emitir conclusiones definitivas que fueran públicas, pero que continuará trabajando con el mecanismo de seguimiento de la CIDH.
ams