El presidente del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), ministro Luis María Aguilar Morales, recibió la renuncia del director del Instituto de la Judicatura Federal, Salvador Reyes Mondragón.
El CJF informó que la renuncia fue presentada con la finalidad de facilitar las investigaciones administrativas que derivaron de la anulación, por parte del Pleno de este cuerpo colegiado, del Vigésimo Octavo Concurso Interno de Oposición para la Designación de Jueces de Distrito.
Como es de recordarse, el mismo director del Instituto hizo del conocimiento del consejo un informe que revelaba la posibilidad de la sustracción ilegal de reactivos.
El Pleno del CJF resolverá sobre su reincorporación a partir del 1 de abril, al Tribunal Colegiado de Circuito en el que se venía desempeñando con profesionalismo y dedicación como magistrado.
El CJF subrayó que mantiene invariable su compromiso con la transparencia, y por ello lo hace del conocimiento de la sociedad, así como lo hará con cualquier otro acto relacionado con esta investigación, cuando el sigilo lo permita.
El Consejo informó que el director del Instituto de la Judicatura Federal, Salvador Mondragón Reyes, renunció para facilitar la investigación sobre la presunta venta de exámenes para la selección de jueces.
La Judicatura dijo que el ministro Luis María Aguilar Morales recibió la renuncia del director y que el pleno resolverá su reincorporación a partir del 1 de abril, al Tribunal Colegiado de Circuito en el que se venía desempeñando como magistrado.
Cabe recordar que ante la presunta venta de los reactivos, el CJF determinó anular el vigésimo octavo Concurso Interno de Oposición para la Designación de Jueces de Distrito en el que participaron 2 mil 628 aspirantes.
Tras una evaluación automatizada, el 8 de enero pasado se seleccionó a 91 aspirantes como finalistas del concurso. Dichas personas fueron sometidos a una segunda prueba de evaluación.
El examen se realizó el 8 de febrero pasado, en las instalaciones del Instituto de la Judicatura Federal, ubicado en el Palacio de Justicia de San Lázaro.
Fue en esta etapa cuando se descubrió, a través de denuncias anónimas, del robo y venta de los reactivos. Se presume que fueron sustraídos previó a la aplicación del primer examen y ofertadas entre los aspirantes.
AJ