Ciudad de México (La Silla Rota).- La información corrió en las últimas horas a la velocidad de un rayo y todos los titulares de los sitios europeos dicen lo mismo: " Murió Inés Zorreguieta, hermana menor de la reina Máxima de Holanda. Según la prensa argentina, se habría tratado de un suicidio".
Ante este escenario, periódicos europeos señalan la similitud entre la tragedia que vive hoy Máxima de Holanda con el dramático episodio que vivió la reina Letizia de España, cuya hermana, Erika Ortiz, también se suicidó hace 11 años, cuando la entonces princesa consorte estaba embarazada de seis meses de su segunda hija.
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Paradójicamente, Érika e Inés no solo tenían la misma edad, una personalidad introvertida y una carrera similar, además, compartían pasiones. Mientras que la hermana de doña Letizia era una gran amante del baile, la menor del clan Zorreguieta lo era de la música. Inés estudió canto y dio de clases de guitarra y era en la música donde encontraba el refugio para sus momentos de desasosiego. Esta vez, sin embargo, la presión fue demasiada.
El suicidio de Inés Zorreguieta
Inés fue dama de honor en la boda real de Máxima
En un escueto comunicado emitido esta mañana por la Casa Real holandesa, según el cual "devastada y conmocionada por la muerte, Máxima de Holanda suspendió todas sus actividades oficiales de esta semana y la próxima", sin confirmar un eventual desplazamiento de la soberana a Buenos Aires.
El portavoz de la familia real evocó "la posibilidad" de un suicidio, pero agregó que los análisis forenses continuaban.
Las primeras informaciones sobre la muerte de la menor de los cuatro hijos que tuvo el político Jorge Zorreguieta con María del Carmen Cerruti llegaron a Europa esta madrugada. Sin otra información, los periodistas europeos retomaron artículos parecidos, que adelantan que "el cuerpo de la joven (Inés Zorreguieta, de 33 años) fue encontrado en su apartamento de la calle Río de Janeiro".
Problemas psicológicos de la menor de los Zorreguieta
El periódico popular británico The Mirror va un poco más lejos que sus prudentes homólogos y anota que "Inés Zorreguieta fue hallada en su departamento de Buenos Aires después de haberse ahorcado".
"De acuerdo con diversos medios, la hermana de la Reina sufría graves problemas psiquiátricos, una "grave depresión"- y apunta que hace unos años estuvo ingresada en una clínica debido a un trastorno alimenticio", escribe, por su parte, la revista Hola de España.
La prensa holandesa evoca hoy los problemas psicológicos de la joven hermana de la reina. "Inés siempre fue una joven problemática", afirmó el portavoz Sander Paulus, del servicio de Prensa de la Casa Real (Koninklijk Huis). Paulus recordó sus internaciones en 2012 y 2016 debido a su anorexia, "aunque parecía estar mejor últimamente", precisó. "Inés estudió canto y guitarra y venía con mucha frecuencia a Ámsterdam", concluyó.
Los medios europeos destacan la cantidad de duelos a repetición que han golpeado estos últimos años a la Casa Real de Holanda: "Hace menos de cinco años se produjo la muerte trágica del príncipe Friso d''Orange-Nassau. A los 44 años, el hermano menor del rey Guillermo-Alejandro fue víctima de una avalancha mientras esquiaba en los Alpes, que lo sumió en un prolongado coma de 18 meses del que nunca despertó. Hace menos de un año, la reina Máxima, que hoy llora a su hermana preferida de 33 años, había perdido a su padre", anota la revista francesa Paris Match en su sitio de Internet.
El suicidio de la hermana de la reina Letizia
Igual que en 2007, apenas tres años después de que doña Letizia se convirtiera en princesa de Asturias, su hermana Érika aparecía muerta en el piso en el que ella misma había vivido en Madrid.
La imagen de una Letizia completamente rota de dolor en el funeral de su hermana se ha quedado grabada en la memoria de los españoles y todo el mundo. Llorando y aferrada a un pañuelo con el que secaba sus lágrimas, la entonces princesa de Asturias se detenía ante los periodistas que cubrían el dramático suceso para agradecerles su atención. Mientras, un Felipe con la mirada apenada, sostenía el paraguas en ese día tan gris.
Según relató años después David Rocasolano, primo de la actual reina, Érika no había podido con la presión que implicaba convertirse en la hermana de la princesa de Asturias. En su libro ‘Adiós Princesa’ ahondó en este fallecimiento y en cómo su familia se incorporó a esa nueva vida.
“Esta es la historia del choque de un gran tren expreso, los Borbones, contra una modesta caravana de gitanos, los Ortiz-Rocasolano”, comenzaba diciendo su obra.
Érika Ortiz
Por su parte, como en su día lo sufrió doña Letizia, para Máxima de Holanda, cuyo camino hasta el trono recuerda también al de la reina española, esta muerte supone uno de los peores momentos de su vida.
Vidas paralelas
Las vidas de doña Letizia y Máxima de Holanda han transcurrido de manera casi paralela. Ambas mujeres tenían una carrera profesional prometedora cuando conocieron a los que serían sus maridos. Las dos han sido protagonistas del ‘cuento de sus vidas’, un cuento de hadas moderno, que, sin embargo, ha tenido sus momentos de dolor, paradójicamente marcados por la pérdida de sus hermanas menores.
Cuando Máxima conoció a Guillermo, en una Feria de Abril en el año 1999, la argentina trabajaba en Nueva York como ‘broker’ de HSBC. El flechazo fue instantáneo por parte del hijo de la reina Beatriz, pero Máxima se tomó su tiempo. Tres años después, la pareja se casaba en una romántica ceremonia en La Haya.
Boda de Máxima y Guillermo de Holanda
La de doña Letizia y el Rey ha sido una historia igual de rápida y no menos de cuento que la de sus homólogos holandeses. Don Felipe quedó prendado de la periodista cuando presentaba el telediario y el flechazo se produjo en una cena en casa del desaparecido Pedro Erquicia. El resto, queda ya para la Historia.
ktf