Ventas por los suelos y pocos proyectos en puerta, así se encuentra el sector de la construcción en México.
Durante los primeros cuatro meses de este año, se contabilizó un 27% menos que en el mismo periodo de 2018 de viviendas en proceso de registro para su arranque de obra, al posicionarse en 58 mil 683.
Al comparar con los primeros cuatro meses del sexenio de Enrique Peña Nieto, esta caída es de 41.3 por ciento y 72 por ciento menos que en el arranque de Felipe Calderón, cuando se registró un auge inmobiliario, de acuerdo con el Registro Único de Vivienda (RUV).
Esta situación afecta principalmente a la construcción de vivienda social, al ser reflejada por las desarrolladoras que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores.
Homex vendió en el primer trimestre 701 unidades, cuando en igual periodo de 2013 escrituró 5 mil casas.
En tanto, Consorcio Ara vendió 2 mil 200 unidades, que comparadas con sus 3 mil 105 unidades del primer trimestre de 2013, representan una baja de 29 por ciento.
El caso más alarmante fue el de Urbi, que en los primeros cuatro meses del año colocó 46 unidades, contra 911 del mismo periodo en 2013.
A esto se suma la desaparición de subsidios a la vivienda en la Administración, lo que podría tener efecto en los precios, afirmó para el diario Reforma Eduardo Torres, director de la consultora ai360.
El director de Ara, Germán Ahumada, dijo que si las condiciones para construir vivienda nueva no mejoran, los desarrolladores se enfocarán en sectores más rentables.
cmo