Debido a la crisis financiera que atraviesa el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), su director general, Luis Antonio Ramírez Pineda, solicitará a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público que le libere parte de sus reservas financieras, las cuales ascienden 97 mil millones de pesos.
En su primera sesión extraordinaria de 2019, la Junta Directiva del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado aprobó solicitar a la dependencia que encabeza Carlos Urzúa que les permita utilizar la reserva para mejorar la infraestructura médica y resolver problemáticas de la dependencia.
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Ramírez Pineda, instruyó a llevar a cabo el trámite correspondiente ante Hacienda, que será la encargada de determinar el monto a utilizar de las reservas, con las cuales dijo que se podrá reforzar y mejorar el otorgamiento de los 21 seguros, servicios y prestaciones.
Indicó que mantienen una coordinación permanente con la SHCP y que ésta tiene la disposición de autorizar que se libere parte de las reservas para impulsar el funcionamiento del Instituto, en beneficio de 13.3 millones de derechohabientes.
El director general del ISSSTE dijo que los recursos se utilizarán para equipar, reparar y mejorar la infraestructura médica, ya que el principal objetivo de la actual administración es brindar a los derechohabientes atención médica de calidad.
De acuerdo con el Reglamento Financiero y de Reservas del ISSSTE, “las reservas financieras y actuariales tienen como propósito estabilizar el flujo de efectivo en el corto, mediano y largo plazos para financiar apropiadamente el pago de los beneficios de los seguros y coberturas”.
En su primera comparecencia ante el Senado de la República, Ramírez Pineda alertó que tienen un pasivo de 20 mil millones de pesos, en el que se incluyen deudas relacionadas con medicamentos, servicios subrogados, servicios de laboratorio y de tratamiento para diálisis y hemodiálisis.
Esta crisis financiera ha llevado a hacer una reestructuración interna, en la que se ha despedido al menos a 300 trabajadores de confianza que formaban parte del TURISSSTE, aunque el Sindicato Independiente del ISSSTE advirtió que son 10 mil los empleados que están en riesgo de recorte.
djh