Hermosillo. SONORA.- Víctima de una muerte llena de inconsistencias, en la que las declaraciones de los policías y el juez que dio fe del fallecimiento, no cuadraban con la versión de sus amigos y familiares, un suicidio no era la forma en la que hubiera muerto un joven alegre y con sueños por cumplir en su vida.
Genaro Ruiz Arce, murió el pasado 2 de mayo encerrado en una de las celdas de la Comandancia Municipal de Navojoa, municipio ubicado al sur de Sonora, luego de ser detenido, junto con su amigo Héctor, por oficiales de la policía por conducir bajo los influjos del alcohol.
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El joven de 29 años que supuestamente se suicidó en la celda, no conducía el vehículo, y aun así por orden de los policías, permaneció encarcelado, mientras que, a su acompañante y conductor del auto, lo dejaron salir minutos después de la detención.
Horas más tarde, Genaro había muerto. La versión oficial fue que se ahorcó con las agujetas de sus zapatos, sin embargo, los rastros de golpes en su espalda y heridas en sus muñecas, dejaban ver los signos de tortura de la cual aparentemente había sido víctima, pero que nadie había atestiguado.
Las cámaras de las celdas no funcionaban, oleres fétidos, sin baños ni agua potable, eran las condiciones inhumanas en las que se encontraban las instalaciones de la comandancia municipal, de acuerdo a lo decretado por la Comisión Estatal de Derechos Humanos, en una inspección realizada al lugar a petición de la familia de Genaro.
Decretado, hubo violación a derechos humanos de Genaro
El pasado lunes 27 de agosto, la Comisión Estatal de Derechos Humanos, notificó al ayuntamiento de Navojoa que de acuerdo a la investigación realizada, se comprobó que si hubo violación a los derechos humanos en la muerte de Genaro Ruíz Arce, al interior de las celdas de la Comandancia Municipal el 2 de Mayo.
El Presidente de la CEDH Pedro González Avilés, dijo que se envió el informe a la presidencia de Navojoa y a la mamá de Genaro, además se pidió que dicha determinación se integre a la investigación penal que realiza la Fiscalía de Justicia del Estado, contra los presuntos responsables del deceso.
“Se determinó que hubo violación a los derechos humanos, por muchas circunstancias se pidió al ayuntamiento que se siguieran procedimientos administrativos además de los penales, en contra de los policías y de las personas que intervinieron, se ordenó la clausura de las celdas y se hicieron las modificaciones que pedimos”.
Otra de las recomendaciones, detalló, fue que se inscribiera a la madre de Genaro en el registro Nacional de Víctimas, lo que conlleva una reparación integral del daño y finalmente dijo, será el un juez de Navojoa, el que emita las sentencias penales contra los tres policías detenidos y un juez calificador.
También está pendiente una orden de aprehensión más, agregó.
La familia de Genaro Ruiz exigió a las autoridades que se investigara su muerte y se realizará una segunda autopsia, ya que no creyeron en el presunto suicidio dentro de las celdas, pues el cuerpo del joven de 29 años presentaba signos de tortura.
Los policías que detuvieron a Genaro están vinculados a proceso
Por los delitos de Abuso de Autoridad, Tortura y Homicidio a dos personas que participaron en los hechos, agentes de la Fiscalía General de Justicia ejecutaron orden de aprehensión, quienes previamente habían sido cesados de sus cargos.
Los dos policías son identificados como Héctor Manuel de 51 años edad y Adrián de 45 años edad.
Ambos elementos de seguridad pública municipal, el primero como agente que participó en la detención de Genaro y el segundo quien fungió comisionado como llavero a las celdas preventivas del Ayuntamiento de Navojoa el día del lamentable evento.
Los dos detenidos se encuentran ya recluidos en el penal de Tetanchopo a disposición de la autoridad judicial.
La Fiscalía General de Justicia continúa con las indagatorias correspondientes para hacer efectivas en los próximos días dos órdenes de aprehensión más pendientes de ejecutar.
Familiares de Genaro participaron en la audiencia privada ante un juez de control, celebrada en Navojoa, donde se les vinculó a proceso.
Amigos de Genaro se resisten a creer el supuesto suicidio
La noche del 2 de mayo Genaro Ruíz Arce había salido al festejo por el día del trabajo y dadas las 3 de la madrugada, una patrulla detuvo el vehículo en el que viajaba del lado del copiloto con su amigo Héctor, porque no traía placas y al detectarles aliento a alcohólico, los dos policías a bordo les pidieron dinero pero al negarse porque no contaban con efectivo, los detuvieron y trasladaron a las celdas preventivas.
“Era él una persona alegre, noble, que se divertía como cualquier otro joven como nosotros, era muy trabajador Genaro, no tenía motivos para quitarse la vida, era también una persona que se preocupaba por otros”, expresó dolido Carlos Gaspar Cinco amigo cercano del joven.
Contó que el compañero que lo acompañaba la noche de su muerte, vio cómo los dos policías de nombres Héctor Hermosillo y Miguel Ángel López Sol, lo esposaron al llegar a las oficinas de seguridad pública, porque Genaro comenzó a grabar con su celular, pues le pareció una actitud arbitraria la que tomaron los oficiales.
A pesar de que el joven quien trabajaba en una empresa procesadora de alimentos en Navojoa desde hace 10 años, no había cometido infracción alguna, ya que no era él quien conducía el auto, los policías decidieron encerrarlo a él y dejar libre a su amigo, dueño del vehículo y cuando lo trasladaban al interior de las celdas, alcanzó a ver las manos con sangre, brazos raspados y rostro ensangrentado.
“Todo está más que claro en el vídeo que alcanzó a compartir y las pruebas que llevaba él en su cuerpo, tenía golpes en todo su cuerpo, eso no fue un suicidio, era una persona muy optimista que además amaba a los animales”.
Carlos compartió que, parte de la bondad que había en Genaro, estaba la adopción de gatos y cuidado de los animales.
mvf