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OPINIÓN
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le dio un regalazo al presidente. Logró sin problemas la reforma al artículo 4 de la Constitución que hace obligatorios los programas sociales. Ahora pasa a los congresos estatales donde, con toda seguridad, habrán de aprobarlo. Y en medio de la contingencia por el coronavirus. Lo que sí tuvo escollos que la frenaron es la relativa al outsourcing.