AMLO
y el Washington Post tendrán un desencuentro este miércoles. Resulta que el diario de mayor influencia en Estados Unidos publicó un editorial donde le pide a Joe Biden, presidente de Estados Unidos, no perder de vista riesgos de retrocesos en democracia en México por la reforma electoral que va contra el INE. El mensaje de la considerada gran prensa estadounidense es claro: es la lectura de las élites.
IGNACIO MIER
no sólo se puso intenso, como les dijimos aquí, al lanzar una especie de amenaza a la oposición por negarse a aprobar la reforma electoral de AMLO. Todo se le complicó porque hay visos de fractura con sus aliados, del PVEM y hasta del PT por este tema. Por más que digan que todo es amor y paz entre ellos, la verdad es que el nuevo frenazo al ritmo que traían sólo deja ver que falla la operación en San Lázaro y cada vez se les complica todo a la autodenominada 4T.
ROSARIO PIEDRA
se empeña en demoler a la CNDH. Un organismo que sin ser perfecto logró alcanzar momentos de dignidad en la defensa de los derechos humanos, hoy es víctima de un corrimiento total hacia el poder en turno. Ahora toca el turno de Gloria Ramírez Hernández, feminista congruente, quien deja el Consejo Consultivo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Y si usted voltea a ver a Rosario Piedra muy seguramente encontrará la respuesta a esta medida.
MARGARITA RÍOS FARJAT,
durante la discusión en el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la que se declaró válido el Acuerdo que dispone de las Fuerzas Armadas para llevar a cabo tareas de seguridad pública, emitido por el Presidente de la República, esgrimió que al considerar válido el acuerdo, no significa que la Corte esté autorizando la militarización de la seguridad pública. ¿La razón? Ya lo dispone la reforma constitucional de 2019 en su artículo quinto transitorio: el presidente de la República podrá disponer de la Fuerza Armada permanente en tareas de seguridad pública de manera extraordinaria, regulada, fiscalizada, subordinada y complementaria.