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Voto diferenciado, ¿igual a voto razonado?

En la elección local registrada en 2006 para la elección de Jefe Delegacional en Iztapalapa, el triunfo lo obtuvo la Alianza conformada por el PRD, el PT y Convergencia con más del 60% de los votos registrados.

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Escrito en OPINIÓN el

 

Está en curso el proceso electoral 2014-2015 en el que habrá elecciones federales para la renovación de la Cámara de Diputados, así como comicios locales en 17 entidades federativas y el Distrito Federal. Proceso electoral basado en nuevas reglas que buscan en gran medida unificar criterios en la organización de las elecciones en nuestro país. 

 

Pero lo anterior no será posible sin la concurrencia de la población en las urnas, ya que su presencia determina confiabilidad en nuestras instituciones y en los actores políticos (partidos políticos y ahora también candidatos independientes) que participen en la contienda electiva. Por ello, el desarrollo de las campañas electorales próximas a iniciar, deben estar dirigidas no a la población en general de un estado, municipio, delegación o distrito ya sea federal o local, sino deberá estar segmentado respecto a diversos indicadores tales como identidad geográfica, necesidades manifiestas en común por la población, entre otras. 

 

En una palabra será necesario identificar y conocer por regiones al interior de cierta demarcación electoral, a los ciudadanos y sus principales demandas. Con ello, los partidos políticos percibirán la forma en que los electores definen su voto, que dicho sea de paso, no se piense que el voto de los electores se da como un efecto dominó, es decir, si hay dos o tres cargos a elegir en un espacio electoral la gente que votó por un cargo votará así en el otro cargo u otros cargos a elegir. La realidad, afortunadamente ha estado cambiando, pero los factores de ello son muchos y muy variados.

 

Pongamos un ejemplo, que en alguna otra ocasión, ya referimos en torno a un complejo proceso dado en la Delegación Iztapalapa. Hoy utilizaremos el mismo referente pero para, al menos en teoría, preguntarnos si un voto diferenciado significa un voto razonado.

 

Analizaremos, de manera muy ajustada, lo acontecido en dicha demarcación en los últimos tres procesos electorales, es decir, la registrada en los años 2006, 2009 y 2012 y, al final, nos concentraremos sólo en el proceso de 2009.

 

En la elección local registrada en 2006 para la elección de Jefe Delegacional en Iztapalapa, el triunfo lo obtuvo la Alianza conformada por el PRD, el PT y Convergencia (hoy Movimiento Ciudadano MC) con más del 60% de los votos registrados que alcanzó casi el 65% de participación ciudadana; el segundo lugar fue para el PAN.

 

Para el año 2009 para el mismo cargo, el triunfo lo obtuvo el PT con un 31.2% de las preferencias electorales, dejando al PRD en segundo lugar con un 22.1%, con una participación apenas superior al 41 por ciento. En este proceso, como bien recordaremos fue fundamental el impulso de Andrés Manuel López Obrador hacia el candidato del PT.

 

Para el año 2012, las cosas aparentemente retomaron el cause visto en la elección de 2006; la Alianza PRD, PT y MC se alzó con el triunfo con un 64.1% seguido ahora del PRI con un 20.2% y con una buena participación del 63.1 por ciento.

 

Lo descrito anteriormente sólo nos permite observar la tendencia electoral que ha seguido la delegación Iztapalapa que nos sirve de ejemplo. Pero para acercarnos a la forma diferenciada en que la población emite su voto por diversas circunstancias, analicemos el proceso electoral en dicha delegación política en el año 2009, pero para la elección de Diputados por el principio de mayoría relativa.

 

Como ya mencionamos, en la elección de Jefe Delegacional en 2009, el triunfo fue para el PT con el 31.2% de los votos, seguido del PRD con un 22.1% y del PRI con un 20.1 por ciento. El PAN obtuvo un 11.3% por ciento. La delegación Iztapalapa, se conformaba por 8 Distritos Electorales Locales y los resultados señalados anteriormente guardan proporción respecto a los resultados emitidos en cada uno de los Distritos Electorales para la misma elección de Jefe Delegacional. 

 

Así, el PT obtiene el triunfo en los 8 Distritos Locales, dándose un apretado triunfo con el PRD en los Distritos XIX, el XXII, el XXIII y en el XXIV. En este último caso, vale la pena mencionar que una Alianza entre el PRI que obtuvo un 16.2% de la votación con el PAN que obtuvo un 17.9% de los votos pudieron haber obtenido el triunfo electoral (estadísticamente hablando), el PT hubiera ocupado el segundo lugar y el PRD el tercero, tal y como se muestra en la gráfica 10 que se presenta a continuación.

 

 

 

Pero para la elección de diputados locales, los datos son simplemente distintos.  En la Gráfica 22 se muestra, para el mismo proceso electoral registrado en 2009, una diferencia respecto a la intención del voto respecto a la registrada para Jefe Delegacional. De los ocho Distritos Electorales, el PRD obtuvo el triunfo en siete, perdiendo sólo en el Distrito XXVIII con el PT por un margen de 1.6 por ciento. En el Distrito XXXII el PRD apenas obtuvo 0.2% de diferencia por arriba del PT. 

 

De los datos registrados en la Gráfica 22, hay que resaltar la competencia electoral registrada en el Distrito Electoral XXIV.  El PRD obtuvo el triunfo con un 19.1% de la votación registrada, seguido del PAN con un 18.8% (es decir, sólo 0.3% abajo del PRD); el PRI obtuvo un 18% y el PT un 17.8 por ciento. 

 

Como podemos observar, los datos registrados en el proceso electoral 2009 en la Delegación Iztapalapa para la elección de Jefe Delegacional y la registrada para Diputados Locales muestra una diferencia muy interesante, lo que, en mi opinión resalta diversos factores de aquel momento, entre los que pueden estar los siguientes:

  • Un liderazgo importante de Andrés Manuel López Obrador.
  • Posibles pugnas al interior del PRD.
  • Un crecimiento gradual, aunque pareciera imperceptible que no lo es, del PRI.
  • Un crecimiento segmentado del PT.
  • Una pérdida de votos, en comparación con otros procesos electorales para el PAN.
  • Una sociedad politizada (al menos en esa demarcación).
  • Un voto diferenciado de la ciudadanía dependiendo el tipo de elección.

 

 

 

 

Las reflexiones formuladas anteriormente, constituyen sólo una aproximación de un estudio mucho más amplio, pero que de alguna manera permiten ver el registro de la tendencia electoral y los quiebres que la sociedad impone en diversas circunstancias políticas.

 

No obstante, queda en el aire, ante la proximidad de las campañas políticas, si un escenario como el registrado en dicha delegación en 2009 no pudiera repetirse.  Claro, los actores serían otros en donde seguramente la fuerza que obtuvo el PT en su momento ahora la podría capitalizar MORENA de López Obrador. Habrá que ver las Encuestas que se registren y los datos que arrojen en torno al posicionamiento del PRD y del PRI principalmente o bien, las Alianzas que pudieran llegar a manifestarse.

 

Esto nos da la pauta para asegurar que, aún con datos estadísticos de cómo han sido los procesos electorales en dicha Delegación, aún falta mucho por decir, pero sobre todo insistir en que un voto diferenciado de la ciudadanía dependiendo el tipo de elección, pudiera no ser necesariamente un voto razonado de la población, sino más bien, el impulso momentáneo y de seguimiento a liderazgos políticos. 

 

Pero si el voto diferenciado es razonado por tipo de elección, nos encontramos entonces ante un panorama en que el elector se está convirtiendo en un auténtico juez de la gestión de gobierno en turno. ¿Usted que cree amable lector?

 

 

@fdodiaznaranjo