El Congreso tiene en sus manos una de las mayores responsabilidades para lo que resta de la actual LXII Legislatura: La Ley General de Transparencia y el Sistema Nacional Anticorrupción. La Ley y el Sistema implican librar una de las batallas más grandes para poder transitar a un sistema político con mayor transparencia, rendición de cuentas y combate a la corrupción. Lo exige un escenario de escándalos por enriquecimiento, de desvío de recursos públicos y de violencia que han generado un panorama de descontento y hartazgo ciudadano para los próximos comicios electorales y hacia la política en general.
Es claro que, por su relevancia, los legisladores no se pueden permitir postergar estos temas, más aún cuando según la reciente encuesta del Pew Research Center, el 59% de los mexicanos está insatisfecho con el sistema político debido a los casos de corrupción y conflicto de interés, la desigualdad económica, entre otras causas.
Sin embargo, es trabajo y responsabilidad de los ciudadanos, académicos y organizaciones sociales preservar e impulsar que tanto el modelo de transparencia como el de anticorrupción no se vean debilitados por las fuerzas políticas en la discusión que se llevará a cabo en el Congreso.
Ningún país que se asuma como democrático, se puede permitir permanecer en lugares de precariedad en términos de corrupción. Un ejemplo: En el Índice de Percepción de Corrupción 2014 realizado por Transparencia Internacional, México se encuentra en el lugar 103 de 175, siendo el peor evaluado de los 34 países integrantes de la OCDE.
La corrupción no es un asunto cultural de los mexicanos como sostiene el presidente Enrique Peña Nieto, pensar así sólo evade responsabilidades y fomenta la impunidad. Con esa tesis de poco servirían las reformas estructurales realizadas, pues en la esencia del mexicano se encontraría el ser corrupto y tendrían que pasar muchas generaciones para que podamos cambiar. Tal como mencionó Carlos Elizondo Mayer-Serra: “Si aceptamos que la corrupción es cultural, habría que aceptar que la modernización del país no es posible en el corto plazo. Estamos como estamos porque así somos. No hay para qué hacer reformas”.
El combate a la corrupción y la transparencia deben ser los pilares que contribuyan al desarrollo democrático nacional. Es un esfuerzo que debe ser permanente, no se puede limitar a la coyuntura electoral del próximo 7 de junio.
Por su parte la Red por la Rendición de Cuentas ha sido persistente en las tres premisas esenciales para combatir la corrupción desde la experiencia internacional: Trascender lo punitivo y atender las causas; crear inteligencia institucional contra la corrupción y construir el entramado institucional de pesos y contrapesos para evitar la corrupción. Se trata entonces de construir un arreglo institucional lo suficientemente sólido en los tres órdenes de gobierno que permita la coordinación entre el Estado y organismos autónomos.
Finalmente, está claro que el Congreso necesita legitimidad, misma que se ha visto perjudicada en el transcurso de la LXII Legislatura y tiene en estos meses que le restan la oportunidad histórica de realizar un esfuerzo que vaya de acuerdo a las principales exigencias de la ciudadanía: La transparencia y el combate a la corrupción. Sin embargo, es necesario recordar que para que estos procesos sean funcionales deben regirse por los principios del parlamento abierto, donde la participación ciudadana sea un eje para la construcción de proyectos legislativos. Apelamos por legisladores comprometidos, con una visión clara del reto que tienen enfrente pero sobre todo, con legisladores con voluntad política de cambio ante una ciudadanía molesta.
Los autores son:
Mariana Niembro @MarianaNiembro_
Estudió Ciencia Política y Administración Pública en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México. Cuenta con diplomados en análisis político y teoría crítica. Su experiencia profesional se enfoca en el análisis legislativo y cabildeo tanto en la iniciativa privada como en el sector público. Actualmente es Directora General de Borde Político A.C. mariana@bordepolitico.com
Rodrigo Ramírez @rodrigo_rq
Egresado de la carrera de Ciencia Política y Administración Pública de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México. Su interés académico y profesional se centra en temas del Poder Legislativo, sistema electoral, competencia y desarrollo rural. Es Coordinador de investigadores en el área de Análisis Político y Legislativo de Borde Político A.C. rodrigo@bordepolitico.com