En tal virtud, y analizando sólo el caso del Distrito Federal que es donde residimos, nos encontramos con aspectos que seguramente serán difíciles de integrar; ya sea por su complejidad operativa en un proceso electoral o bien, por aspectos políticos que ilustraremos a continuación.
De entre los rubros que consideramos serán motivo de controversia está justamente el de la Fiscalización, sobre todo en el sentido de que puede ser una función que sea delegada por el Instituto Nacional Electoral (INE), por lo que sería oportuno establecer de forma clara cómo se llevaría a cabo acorde con los procedimientos previstos en las Leyes Generales y en la normatividad que el propio INE establezca.
Un rubro que causará polémica es buscar la armonización del tan renombrado tema de la reelección. Los diputados de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal podrán ser reelectos hasta por tres periodos consecutivos, pero aquí la diferencia seguramente estará en la forma en que los legisladores determinen este precepto para las candidaturas independientes. Lo mismo habrá que preguntarnos respecto a los Jefes Delegacionales.
Será importante que los legisladores definan los alcances que el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) tendrá en términos de sus atribuciones, entre las que invariablemente deberán estar las de dotar a dicho órgano electoral de mayores atribuciones legales para la implementación de nuevas tecnologías toda vez que ha sido pionero en dichos procesos, así como en lo concerniente al sistema de resultados preliminares que, dicho sea de paso, también ha sido modelo nacional.
Temas de controversia probablemente serán los concernientes a la capacitación electoral, los mecanismos de participación ciudadana, la determinación de la geografía electoral que incluye, por supuesto, la delimitación de la cartografía electoral que, en todo caso, se estaría utilizando para la elección del año que entra. Ni que decir de la organización de la elección de dirigentes de los partidos políticos que bien pudiera el INE delegar dicha atribución al órgano electoral local.
Ante las nuevas atribuciones del INE, resultará interesante ver cómo los legisladores definen las atribuciones del máximo órgano de dirección del IEDF, su Consejo General en concordancia con lo establecido en la Ley General; la integración de Comisiones y la vinculación que deben guardar con el INE. Lo mismo podría ocurrir con las atribuciones del Tribunal Electoral del Distrito Federal.
Otros temas, que en algún artículo anterior ya lo habíamos advertido y que será muy importante, es que los legisladores definan la forma en que en las elecciones concurrentes, es decir que en una misma fecha tenga verificativo la elección federal con la local, se armonizarían diversos aspectos de carácter operativo. Por ejemplo, la integración y la ubicación de las casillas.
Los procedimientos que sean definidos para las organizaciones de ciudadanos que pretendan constituirse como partidos políticos locales resultará por demás interesante observar cómo es definido por los legisladores; desde las fechas que se indiquen para la apertura de los interesados, hasta los mecanismos y criterios para que estas organizaciones comprueben determinada afiliación de militantes con el porcentaje mínimo señalado y la puesta en marcha de las asambleas respectivas. Lo más trascendental resultará en observar cómo sería su participación en el proceso electoral en caso que consigan el registro correspondiente.
Muy importante resultaría que se definieran nuevas reglas en materia de propaganda electoral, nuestra Ciudad Capital lo requiere y los ciudadanos lo exigen principalmente en términos de protección al medio ambiente.
Habrá que observar si los legisladores son sensibles en destinar un porcentaje del financiamiento público que reciben los partidos políticos para el desarrollo de liderazgos juveniles y femeninos.
Los rubros que llamarán poderosamente la atención serán las definiciones que se establezcan para los procesos de selección interna de candidatos, los criterios que deberán establecerse en las precampañas y principalmente en las campañas políticas. Aquí se me antoja un pronóstico reservado al igual que el tema de las coaliciones y la equidad de género, por señalar algunos temas relacionados.
Un aspecto que bien podría analizarse con el detenimiento que requiere el tema, es el fortalecimiento de las llamadas Agrupaciones Políticas Locales; ha sido una demanda constante y son instancias que han abierto un espacio social y político importante. Ojalá y los señores legisladores sean sensibles a este tema.
Rediseñar el sistema de representación proporcional sería muy oportuno en estos momentos por parte de los legisladores locales, sobre todo con nuevas directrices como lo es el establecimiento de un umbral mínimo del 3% de la votación válida para tener derecho a este sistema; a la par de eliminar la llamada “cláusula de gobernabilidad” y vigilando un esquema que no genere una sobrerrepresentación.
El fundamental tema de los debates entre candidatos resultará por demás relevante para que la población conozca, a través de los medios de comunicación que se determinen, de forma directa, las propuestas, el intercambio de ideas y el debate con criterios bien definidos y, ojalá, abiertos y con esquemas novedosos de confrontación respetuosa.
Finalmente, resultará interesante observar si se establece algún criterio, fundado en la Constitución Política para regular de alguna manera un derecho fundamental: el derecho de réplica.
Como vemos, aquí referimos a grandes pinceladas temas que consideramos serán difíciles en la armonización de la legislación electoral local con la Ley General. Hacemos votos para que en los próximos días contemos en el Distrito Federal con las reglas claras con las que operará el proceso electoral local en esta Ciudad Capital para 2015.