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Ríos vivos

El 70% de los ríos en México están contaminados y, entre ellos, el 31% se encuentran extremadamente contaminados | Martha Delgado

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Escrito en OPINIÓN el

Cada seis años es posible reeditar nuestras preocupaciones, si es que continúan vigentes. Muchas de nuestras aspiraciones son exhibidas a manera de esperanza de escuchar soluciones y compromisos concretos durante las campañas políticas. En una sociedad que se reinventa cada sexenio, en donde comúnmente las preocupaciones no solo se mantienen vigentes, sino que se recrudecen, volvemos a pensar: ¿qué tenemos que hacer para mejorar?

Un ejercicio de desempolvamiento de las propuestas de campaña del 2012 es suficiente para darnos cuenta de nuestro estancamiento. Pero hay temas que no pueden mantenerse mal, y tienden a empeorar. El manejo de los ríos de México es uno de ellos.

Contaminación de los ríos


De acuerdo con datos de Conagua, el 70% de los ríos en México están contaminados y, entre ellos, el 31% se encuentran extremadamente contaminados. Pero ese es un dato que ha permanecido estático desde que tengo memoria.

La contaminación de los ríos se da principalmente por descargas del drenaje municipal y descargas industriales (en la misma proporción). El tratamiento de estas descargas está perfectamente regulado en las leyes y en cuatro normas oficiales mexicanas. Sin embargo, de las aguas residuales municipales se trata un 50% antes de su descarga en los ríos y lagos, y las descargas industriales apenas alcanzan el 30% de tratamiento. Aunque estos indicadores reportan un avance del 7% en los últimos 5 años.

Durante la actual administración federal, se puso en marcha una herramienta muy importante para el acceso a la información pública sobre el manejo del agua en México: el Sistema Nacional de Información del Agua (SINA http://sina.conagua.gob.mx/sina/index.php ). Esta plataforma es de gran utilidad para entender la evolución del manejo del agua en nuestro país. Aunque las inversiones en el tratamiento del agua han sido cuantiosas, el avance es lento y México no cuenta con una política clara para limpiar sus ríos.

Los ríos urbanos de México


Si los ríos en México se encuentran en un estado crítico, la situación de los ríos urbanos es todavía más preocupante. Nuestra cultura urbana les ha dado la espalda. En las ciudades, las generaciones vivas nunca los han visto sanos y creemos que siempre han sido drenajes de aguas negras. Hemos sido incapaces de imaginarnos que alguna vez estuvieron limpios, fueron el hábitat de una importante variedad de flora y fauna, y otorgaron a sus habitantes espacios de convivencia y contacto con la naturaleza.

Hoy, a nivel global, existen movimientos sociales locales muy activos por el rescate de los ríos urbanos. Por más de un siglo, las grandes ciudades se han esforzado por entubar los ríos y pasarlos por debajo de las urbes, pero ahora comienzan a revalorar los servicios ecosistémicos, culturales y sociales que aportan los cuerpos de agua superficiales, y hay numerosos casos de éxito en la regeneración de ríos urbanos.

El Bachkonzept


Ciudades europeas cuyos ríos se encontraban en estado crítico, han logrado su restauración ecológica y los han convertido en proyectos espectaculares de recuperación urbana. El río Támesis de Londres, el Sena en París, el río Madrid, el Rhin en Alemania, son algunos ejemplos; pero la ciudad de Zurich es el modelo más completo: desde hace 30 años los suizos comenzaron a desarrollar el “Bachkonzept” o su programa para regresar a la superficie sus ríos urbanos hasta llegar, en la actualidad, a tener dentro de la ciudad ríos vivos donde los habitantes pueden nadar. El tema ha cobrado tal importancia en el viejo continente, que la Comunidad Europea cuenta con un Centro Europeo para la Restauración de Ríos que otorga apoyo financiero y asesoría a las ciudades para la regeneración de sus cauces.

Otros casos exitosos se encuentran en varias ciudades asiáticas, con proyectos emblemáticos como la recuperación del Río Cheonggyecheon, en Seúl; el río de Hiroshima, en Japón, o el río Yongding en Beijing. Australia, Estados Unidos y Canadá también han emprendido proyectos relevantes de restauración de ríos urbanos. Desafortunadamente en Latinoamérica los casos son pocos.

En Monterrey, Nuevo León, en el año 2007 se creó un río artificial navegable dentro de la ciudad, el Paseo Santa Lucía, que hoy constituye uno de los espacios públicos más recurridos y valiosos de la Ciudad. En el Distrito Federal, en el año 2007 se presentó el Plan Verde de la Ciudad de México, incorporando en una de sus metas la inaplazable necesidad de rescatar el último río vivo de la ciudad: el Río Magdalena. La UNAM elaboró el Plan Maestro de Rescate del Río Magdalena, y la UAM el Plan para recuperar el Río Eslava, que, como afluente del Magdalena, se incorporó también al proyecto.

Río Magdalena: Contrastes

El Río Magdalena recorre 28 kilómetros, de los cuales más de la mitad transcurren por el área natural, y lo demás se interna en la zona urbana. Amenazado en la parte alta por el turismo y la ganadería, y en la parte baja por las descargas directas de aguas residuales, requirió tres años de obra (2010 a 2012) para la instalación de 19 kilómetros de colectores de aguas negras para recuperar la calidad del caudal.

Río Magdalena: Recuperación u olvido

El proyecto incluyó los estudios base, el diseño de la estrategia de comunicación y una propuesta para el monitoreo ciudadano de la calidad del agua. Se proyectó la recuperación de espacios públicos en la zona de Chimalistac a los Viveros de Coyoacán, donde se planeó una planta de tratamiento de agua y sacar el río vivo al espacio público. Sin embargo, esa propuesta no se pudo realizar por la oposición vecinal. En su lugar, las inversiones se redirigieron a la construcción del Parque Lineal La Cañada-Foro Cultural, dotando de infraestructura deportiva, de recreación y esparcimiento nueve espacios públicos en la ribera del río en Magdalena Contreras.

Río Magdalena: La cuenca

Urgente recuperación


La recuperación de los ríos urbanos implica proyectos complejos y costosos. Sin embargo, los esfuerzos para regenerarlos son urgentes por el importante impacto que tienen en la salud y la calidad de vida de la población, en la recuperación de la resiliencia urbana y en el retorno al equilibrio ecológico que se ha perdido en las ciudades.

Esta semana se celebra el Día Mundial del Agua y en Puebla se realiza el Foro-Festival Ríos Vivos, para lo cual se ha convocado a distintas expresiones científicas, artísticas, políticas y culturales a reflexionar en torno a la necesidad de rescatar los ríos de México, y en particular el Río Atoyac en el estado de Puebla. Junto con la recuperación del Río Hondo en Naucalpan, el Río Colima y el Canal Nacional en la Ciudad de México, el rescate del Río Atoyac es una de las iniciativas más interesantes de recuperación de ríos urbanos del país, y ofrecerá un ejemplo a seguir para otras ciudades mexicanas.

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@marthadelgado | @OpinionLSR | @lasillarota