El precio de la gasolina desde hace años ha ido subiendo y tenía una explicación lógica: El petróleo estaba subiendo en todo el mundo.
Prácticamente todos los países han ido ajustando sus precios por los cambios que ha tenido el mercado y mientras todo eso ha pasado, en México, todavía en enero, tuvimos un injusto encarecimiento al que llaman “gasolinazo” y hoy, que el gobierno anuncia que ya no subirá más sólo es intentar engañar una vez más a los mexicanos porque para que no subiera en época electoral fusionaron todas las subidas del año y todo esto sin importar nada más que las elecciones.
Para el tema algunas observaciones básicas:
- El gobierno hoy importa gasolina a 8 pesos y la vende en casi 14.
- En la Ley de Ingresos de la Federación para el 2015 se presupuestaron 30,321.3 millones de pesos por concepto de IEPS recaudado por gasolinas y diesel. Y tan sólo para enero, ya se recaudaron 24,137.1 millones de pesos (en tan sólo un mes se recaudó el 80% de la meta anual).
- Cabe recordar que cuando el actual gobierno llegó recibió el precio de la gasolina en 10.81 pesos.
- De 2012 a la fecha, el precio de la gasolina se ha incrementado en más de un 25% mientras que la inflación acumulada en el mismo periodo de tiempo ha sido del 14.7 por ciento.
- México es el décimo productor de petróleo en el mundo, pero de acuerdo a un listado de Global Petrol Price, de 161 países considerados, México se encuentra en el lugar 64. El abuso se ha trasladado a los consumidores.
- Los países a los que México exporta petróleo han bajado los precios de sus combustibles, como es el caso de las naciones centroamericanas como Guatemala o Nicaragua.
- El petróleo está en sus precios más bajos históricos. En la época de Fox alcanzó casi tres veces el precio que hoy tiene y si el petróleo baja la gasolina debe de bajar con él.
- Es un negocio que le ha salido bien al gobierno y pagamos todos: produce la mitad de las gasolinas que vende, con costos de producción baratos por el menor precio del petróleo en el mundo, pero las vende como si el precio estuviera en 120 dólares por barril y no entre los menos de cuarenta que llegó a estar y lo no más de 52 que están actualmente.
- Bajar los precios de las gasolinas y el diesel promovería una mejor situación económica de las familias, incentiva el consumo y eso redunda en un mayor crecimiento del producto interno bruto y un incremento visible en la recaudación tributaria.
Como conclusión simple el gobierno está haciendo recortes y negocio al mismo tiempo. Compra barato y vende caro. Lo justo es que baje el precio y esperemos que lo haga porque mientras sigan apareciendo “casas blancas” no creo que ningún mexicano crea en una necesidad legítima del gobierno.
Agradezco a la Fundación Miguel Estrada Iturbide por los datos duros.