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Prisas y pendientes legislativos

Destaca el gran número de dictámenes aprobados por la Cámara de Diputados quien le hereda una gran carga de temas a su colegisladora.

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Escrito en OPINIÓN el

Se ha vuelto costumbre en el Congreso de la Unión que al cierre de los periodos ordinarios se aprueban gran cantidad de dictámenes. Buscan aprobar en las últimas sesiones y de manera acelerada los proyectos de ley que estuvieron pendientes durante todo el periodo de sesiones.

 

Hemos sido testigos de que dicha premura, en algunas ocasiones impide que el proceso legislativo se desarrolle de manera correcta. Lo que debería de esperarse es que dentro de las comisiones dictaminadoras y en el mismo pleno de las Cámaras se abran espacios de discusión, debate y modificación en aras de construir de manera plural los mejores instrumentos de ley para nuestro país sin que el reloj dicte el tiempo para terminar el espacio de consenso.

 

Al final del periodo ordinario se manifiesta con mayor claridad la negociación política entre los grupos parlamentarios. Los proyectos de dictamen se convierten en monedas de cambio de acuerdo a los intereses de cada partido político, y depende de esto que avancen los temas o se queden rezagados para el próximo periodo. No obstante, el trabajo legislativo no debe subordinarse a la premura y no debe provocar la violación al reglamento interno.

 

Está claro que hay reformas prioritarias, por lo tanto, es necesario que la Junta de Coordinación Política cumpla su trabajo de convergencia entre los grupos parlamentarios para evitar que se legisle al vapor y se dejen pendientes importantes. El Congreso de la Unión debe trabajar para transparentar sus procesos, abrir espacios de participación ciudadana permanentes y difundir de forma efectiva su labor para cambiar la percepción y elevar el nivel de confianza del Poder Legislativo en la ciudadanía.

 

En la siguiente tabla se muestran la cantidad de dictámenes aprobados por ambas cámaras durante el periodo ordinario que inició el 1º de septiembre y concluyó el 15 de diciembre de 2014. Destaca que el mes con mayor de aprobaciones en la Cámara de Diputados fue diciembre con 34 dictámenes en 8 sesiones, mientras que el Senado aprobó 62 dictámenes en 7 sesiones.

 

 

Cámara de Diputados

 

Mes

Septiembre

Octubre

Noviembre

Diciembre

Dictámenes aprobados

18

26

20

34

Sesiones ordinarias

10

10

8

8

Fuente: http://gaceta.diputados.gob.mx/Gaceta/Votaciones/62/vot_a3primero.html

 

Cámara de Senadores

 

Mes

Septiembre

Octubre

Noviembre

Diciembre

Dictámenes aprobados

8

15

10

62

Sesiones ordinarias

10

10

7

7

Fuente: http://www.senado.gob.mx/?ver=sen&mn=8&sm=1&ano=3&tp=O&np=1&lg=62

 

 

Insistimos en que éste no es un fenómeno nuevo, pero deja las siguientes preguntas a la reflexión: ¿De qué manera los legisladores pueden aprobar 96 dictámenes en tan sólo 15 días? ¿Tienen la capacidad de hacer una revisión exhaustiva de los dictámenes en esos lapsos cortos de tiempo? Se podrá argumentar que en muchos de los casos hubo tanto trabajo en comisiones como negociación entre los partidos políticos. Sin embargo, las prisas y los espacios reducidos de participación ciudadana no abonan para la transparencia, la rendición de cuentas y las prácticas de Parlamento Abierto que fortalecerían no sólo a la institución legislativa sino a nuestra democracia.

 

Destaca el gran número de dictámenes aprobados por la Cámara de Diputados quien le hereda una gran carga de temas a su colegisladora. Suponemos que la premura se debe a que los diputados federales buscan candidaturas para las próximas elecciones y por ley, están obligados a abandonar su curul antes del próximo 9 de marzo de 2014. Lo que implica que tendremos una cámara con gran cantidad de diputados suplentes hasta que termine la legislatura el 31 de agosto.

 

Por su parte, el Senado se queda con una importante cantidad de minutas que desahogar, para lo cual hasta llegó a contemplarse la posibilidad de convocar a un periodo extraordinario en el mes de enero. Dentro de esas minutas se encuentran: Ley de la Fiscalía General de la República; Reforma a la Ley de Obras Públicas; Ley para impulsar la Competitividad; Ley de Transición Energética; y Desindexación del Salario Mínimo entre las más importantes.

 

Los pendientes que el Senado no logró aprobar en diciembre pasado en su calidad de cámara de origen son los siguientes: Reforma Política del Distrito Federal; nombramiento del titular de la Fiscalía Especializada en materia de Delitos Electorales; nombramiento del titular de la Fiscalía en materia de Delitos Relacionados con Hechos de Corrupción; Ley General de Transparencia; y Mando Único Estatal Policial entre las más importantes.

 

Cabe señalar que aún con la premura legislativa, encontramos grandes pendientes que por su importancia, nos debe preocupar que no hayan sido tomados en cuenta dentro de las prioridades de nuestros partidos políticos en cada una de las cámaras como lo son la creación del Sistema Nacional Anticorrupción, la Reforma Política del D.F., la desindexación del salario mínimo y las reformas en materia de disciplina financiera de estados y municipios.

 

Es cierto que la cantidad de modificaciones o creación de ordenamientos no es determinante en la construcción de mejores marcos jurídicos para que México avance. Si lo que debemos de garantizar es la calidad de las leyes aprobadas se debe, sin duda, trabajar en mejorar el diseño institucional y los procesos legislativos vigentes para caminar hacia un Congreso de la Unión abierto, incluyente, efectivo y ciudadano. De cara a un país con una ciudadanía informada y activa, la premura y los pendientes legislativos lejos de fortalecer  la imagen y mejorar la precepción en el Congreso, la deteriora.

 

@BordePolitico

 

Los autores son:

 

Mariana Niembro @MarianaNiembro_

Estudió Ciencia Política y Administración Pública en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México. Cuenta con diplomados en análisis político y teoría crítica. Su experiencia profesional se enfoca en el análisis legislativo y cabildeo tanto en la iniciativa privada como en el sector público. Actualmente es Directora General de Borde Político A.C. mariana@bordepolitico.com

 

Rodrigo Ramírez @rodrigo_rq

Egresado de la carrera de Ciencia Política y Administración Pública de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México. Su interés académico y profesional se centra en temas del Poder Legislativo, sistema electoral, competencia y desarrollo rural. Es Coordinador de investigadores en el área de Análisis Político y Legislativo de Borde Político A.C. rodrigo@bordepolitico.com