Durante años los “próceres” de la llamada izquierda mexicana cuestionaron –con toda razón-, que los gobiernos del PRI eran el reino de la impunidad.
A lo largo de casi todo el siglo pasado, no hubo un político que terminara en prisión como resultado de las raterías cometidas. Los hubo perseguidos políticos, pero nada más.
Más aún, la mayor fortaleza de los políticos, dirigentes, y gobernantes de las izquierdas mexicanas se localizaba, precisamente en su ejemplo de honestidad y en la insistencia de denunciar la corrupción en el PRI.
A la vuelta de los años, cuando todos los partidos de las llamadas izquierdas han tenido porciones de poder, a todos se les olvidó la honestidad y todos han participado en groseros escándalos de corrupción.
El más reciente, como saben, es el de Eva Cadena, hoy ex candidata de Morena al municipio de Las Choapas, Veracruz, quien protagonizó un grotesco video en el que le regalan medio millón de pesos con la condición de que se lo entregue a López Obrador.
Como también saben la divulgación de las imágenes provocaron un nuevo circo mediático, reacciones de tirios y troyanos, la defensa a ultranza de las pillerías de AMLO y… nada más.
Nadie va a pagar por la ratería que vincula a la ex candidata a un puesto de elección popular, al dueño de Morena y al candidato presidencial.
¿Por qué no va a pasar nada?
1. Porque todo lo que se relaciona con López Obrador se resuelve con la fórmula mágica de la impunidad.
2. Porque las instituciones del Estado no se hicieron para castigar a un “semi dios” de la política mexicana.
3. Porque la sociedad mexicana no quiere justicia, quiere venganza.
4. Porque a pesar de las corruptelas de AMLO y de toda la claque de delincuentes que se han refugiado en Morena, buena parte de la sociedad mexicana, quiere cobrar venganza contra toda la clase política mexicana a través del empoderamiento de AMLO.
5. Porque por ridículo que resulte, Eva Cadena, parece no haber cometido ningún delito ya que ni López Obrador es candidato formal ni la entrega del dinero es un acto electoral.
6. Porque castigar de manera ejemplar a López Obrador y a los pillos que lo acompañan sería lo mismo que comprarle un pasaporte de impunidad y de triunfo para 2018.
Lo cierto es que la revelación del video en el que una mujer le entrega medio millón de pesos a Eva Cadena –para que a su vez se lo entregue a AMLO-, es una corruptela mayor que, sin embargo, quedará registrada como parte de la picaresca política mexicana.
Igual que ocurrió con las corruptelas de Bejarano, Ponce, Imaz, Costa Bonino, Ricardo Monreal, Claudia Sheinbaum, y muchos otros.
No pasará nada porque las leyes no se hicieron para castigar a un dios de la política como López Obrador.
Al tiempo.