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Pandemia fuera de control

A pesar de que superamos las 106 mil 765 defunciones y un millón 122 mil contagios, el presidente insiste en que todo está bien. | Agustín Castilla

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Escrito en OPINIÓN el

Han pasado poco más de ocho meses desde que el 23 de marzo el gobierno federal declaró la denominada jornada de sana distancia y, como en muchos otros temas, hay dos visiones muy distintas de la situación a la que nos enfrentamos. En reiteradas ocasiones, el presidente ha afirmado que la pandemia no nos rebasó, que está controlada gracias a las acciones implementadas en nuestro país y al excelente trabajo del subsecretario López-Gatell a quien ha calificado como una eminencia, e incluso ha sostenido que somos ejemplo para el mundo por lo que no considera necesario modificar la estrategia.  

Sin embargo, diversos estudios realizados tanto por instituciones y especialistas nacionales como internacionales reflejan una realidad muy distinta. A las investigaciones del portal Animal Político, del Centro de Ciencias de la Complejidad de la UNAM, de la Universidad de Miami o de Amnistía Internacional, así como al documento elaborado por cinco ex secretarios de salud -en los que por ejemplo se reveló el enorme sub registro de defunciones existente o que vergonzosamente ocupamos el primer lugar mundial en defunciones de personal médico-, se suma la reciente publicación del ranking de Bloomberg sobre los mejores países para vivir la pandemia a partir de 10 indicadores para medir el impacto tanto en materia de salud como económico, en el que México ocupó el último lugar. 

Por su parte, el director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom, declaró este lunes que nuestro país se encuentra en una mala situación de cara a la pandemia de covid-19 al duplicarse el número de contagios y fallecidos durante la segunda quincena de noviembre, por lo que pidió que nos tomemos muy en serio esta situación, y aprovechó para hacer un llamado a todos los líderes del mundo para que sean muy claros en el uso de cubrebocas, pues si lo que se recomienda en un cartel no lo cumplen las autoridades, se genera confusión. No es difícil inferir que se trató de una franca alusión a las autoridades mexicanas. 

Se debe reconocer que este gobierno no es responsable de la pandemia, de los padecimientos previos de la población que la hacen más vulnerable y efectivamente recibió un sistema de salud con muchas deficiencias, así como de la falta de responsabilidad de muchas personas que siguen organizando eventos sociales, reuniéndose en sus casas, aglomerándose en espacios públicos o saliendo a la calle sin atender los cuidados necesarios. Sin embargo sí es responsable de la estrategia que en términos objetivos y conforme a los resultados ha sido fallida, de la insuficiencia y mala calidad en el equipo de protección médica que adquirió en ocasiones a precios muy elevados por encima del mercado, de la laxitud en la supervisión del cumplimiento de horarios y restricciones en establecimientos -son frecuentes las denuncias vecinales de lugares que funcionan hasta la madrugada rebasando el cupo permitido-, de la decisión de no realizar pruebas masivas y promover sin titubeos el uso del cubrebocas en vez de generar confusión como lo advirtió la OMS. 

También implica una responsabilidad minimizar las consecuencias de la pandemia, negarse a reconocer la gravedad de la situación, cerrarse a escuchar y discutir otras opiniones, relegar al Consejo General de Salubridad que por ley es la máxima instancia para la toma de decisiones, e incluso descalificar los análisis que se realizan a partir de la información oficial y molestarse por la difusión de datos ciertamente muy preocupantes, y que debían provocar de inmediato una revisión integral del manejo de la pandemia para rectificar en lo que sea necesario, pues lo que está en juego es la salud y la vida de la gente. 

No obstante, a pesar de que superamos las 106 mil 765 defunciones y un millón 122 mil contagios -sin considerar el subregistro que debe arrojar cifras escalofriantes-, que ocupamos el lugar 11 a nivel mundial y 5º en América respecto al número de muertes por cada 100 mil habitantes con 79.9, así como el segundo lugar a nivel mundial en el índice de letalidad (porcentaje de fallecimientos por casos confirmados) con 9.8%, que se siguen rompiendo records en el registro de defunciones con 813 el martes 24 de noviembre y de contagios con 12 mil 081 el pasado viernes 27, y que ya se agotaron las tonalidades de naranja, el presidente insiste en que todo está bien y nada debe cambiar.