Main logo

Otra vez, la división en el PAN

El duro intercambio de acusaciones, que se ha intensificado con el regreso de Gustavo Madero abona mucho en su intento por reposicionarse.

Por
Escrito en OPINIÓN el

Hace apenas algunos meses el panorama para el Partido Acción Nacional de cara a las elecciones de este año era bastante sombrío. La división interna que se hacía evidente particularmente en el Senado, los moches, la fiesta de los diputados y algunos otros señalamientos y escándalos protagonizados por miembros de este partido, habían dañado seriamente su imagen y por tanto sus expectativas de recuperación tras la derrota de 2012.

 

Sin embargo, todo cambió en cuestión de semanas. Los terribles acontecimientos de Tlatlaya e Iguala, el precario crecimiento económico y los conflictos de interés por la compra de la “Casa blanca” de la esposa de Peña Nieto, así como por la de Malinalco del secretario de Hacienda, ocuparon la atención –y la inconformidad de la opinión pública- representando un respiro para Acción Nacional.

 

Aunque el reclamo ciudadano fue extensivo a toda la clase política, lo cierto es que mientras el PRI-Gobierno y el PRD hacían malabares para tratar de deslindarse y eludir su responsabilidad, el PAN salió bastante bien librado como lo muestran las encuestas.

 

Aunado a que no estuvo relacionado con ninguno de estos hechos y a que, cuando menos en parte, se reivindicó la decisión de la pasada administración panista de combatir a la delincuencia organizada, desde un principio quedó muy clara su posición respecto a la reforma fiscal que tal y como advirtió, fue únicamente recaudatoria (el presupuesto para 2015 es de 4 billones 684 mil millones de pesos) y trajo como consecuencia un impacto negativo en la economía.

 

Hay que decir que la llegada de Ricardo Anaya a la dirigencia interina de Acción Nacional contribuyó a mejorar la imagen del partido, tanto por su desempeño en la Presidencia de la Cámara de Diputados reconocido por todos, como por la campaña que con acierto emprendió para impulsar la creación del Sistema Nacional Anticorrupción y a la que seguramente dará continuidad ahora en su papel de Coordinador del Grupo Parlamentario.

 

Parecía que se había entendido el mensaje de la ciudadanía e iban en el sentido correcto asumiéndose como una verdadera oposición, pero una vez más la dinámica interna se impuso en la designación de quienes ocuparían los tres primeros lugares de cada circunscripción para las diputaciones federales de representación proporcional, generando una nueva confrontación entre el grupo afín a Gustavo Madero y el “calderonismo”.

 

Independientemente de los motivos, no se puede negar que Margarita Zavala es de sus mejores cuadros y una de las pocas figuras bien vistas por la sociedad, lo que hace difícil explicar su ausencia de esta lista y que en cambio aparezcan personajes que no gozan de una buena reputación.

 

De hecho, la percepción de mucha gente es que en esta decisión no se tomaron en cuenta los méritos y capacidades para representar adecuadamente los intereses del partido y de la comunidad, prevaleciendo la disputa por el control del PAN, los proyectos personales, el ánimo de revancha y el reparto de cuotas.

 

Tampoco, el duro intercambio de acusaciones, que se ha intensificado con el regreso de Madero, abona mucho en su intento por reposicionarse. Por el contrario, es probable que le signifique un costo importante pues además de que se refuerza la idea de que “todos los partidos son iguales”, está demostrado que cuando el PAN se divide, pierde.

 

@agus_castilla