Ya son más de dos semanas y las dudas se han asentado antes de disiparse. El Estado de México deja un saldo de una elección operada por el Estado mismo. Según cifras de encuestadoras (mencionadas por Leo Zukermann), el 14% de los ciudadanos que acudieron a votar tenían una tarjeta de apoyo del PRI… más de un millón y medio de tarjetas y con un cálculo conservador de 500 pesos por tarjeta 750 millones de pesos. Cada Secretaría de Estado tuvo su función en el Estado de México y a pesar de todo el PRI sacó la mitad de los votos que tuvo con Eruviel… ¿fue fraude? Claro que sí; toda la elección lo fue. No puedo asegurar que el conteo fue fraudulento y tampoco pondría en duda la actuación del Instituto Electoral, pero hay material de sobra para anular la elección.
El caso de Coahuila es un poco peor. La misma intervención que en el Estado de México, pero por la cantidad de población no fue tan notorio; la diferencia es que aquí el problema sí recae en la autoridad electoral.
En este espacio he documentado el caso y la trascendencia radica en que hacía muchos años que no se veía un posible fraude desde un instituto electoral".
Los dos casos están abiertos y aunque ya se entregaron las constancias de mayoría todavía hay caminos y se podrían acabar repitiendo las elecciones, pero aquí ya están pasando cosas que aumentan el “sospechosismo” (como diría Santiago Creel) y francamente le restan autoridad a las instancias encargadas de realizar y calificar las elecciones:
· En ambos casos (Coahuila y Edo Mex) se le solicitó al INE (a la autoridad electoral federal) que atrajera la elección por la cantidad de irregularidades documentadas y el INE fue omiso.
· Lorenzo Córdoba, presidente del INE, ha tenido varias participaciones en medios desde la elección y destacan los titulares: “Hubo piso parejo”, “los PREP tuvieron comportamiento atípico”, “Estoy satisfecho con las elecciones” y “es posible que hayan existido errores en el conteo rápido de Coahuila”.
· Ciro Murayama, Consejero del INE, también ha declarado sobre la jornada electoral: “Acusaciones de Elección de Estado son una irresponsabilidad”, “Acusaciones de fraude en las pasadas elecciones son falsas” y “Aunque PREP haya fallado en Coahuila, lo que importa es que votos estén bien resguardados”.
· ¿Qué hacen las autoridades electorales hablando de la elección que se negaron a juzgar? ¿No es absurdo que hablen de “PREP atípico” y de “errores en conteo rápido” y sigan confiando en la imparcialidad de la elección?
· Si son tres elementos: PREP, Conteo Rápido y Conteo Final, y reconocen que fallaron dos ¿no suena lógico que también falló el tercero?
· Las declaraciones suenan a justificación por no haber atraído la elección, en especial en Coahuila, donde las dudas sobre el Instituto Electoral de Coahuila son cada vez más fuertes.
· ¿Cómo puede hablar Lorenzo Córdoba de que hubo piso parejo? Si sólo en el Estado de México estuvieron de gira más de 100 veces los secretarios de Estado en la etapa previa a la elección. ¿Cómo puede usar la expresión “piso parejo” sabiendo que se derrocharon recursos exorbitantes en las elecciones?
· Cuando dicen que lo que importa es que “los votos estén bien resguardados” supongo que no se enteraron de los votos que llegaron en cajas a los consejos distritales en Coahuila, o que un consejo distrital cambió súbitamente de sede (con todo y votos) o que hubo policías estatales dentro de los recintos donde se contaron los votos (o talvez a esto se refería con “votos bien resguardados”.
· Como corolario; las mismas líneas discursivas con las que Ciro Murayama y Lorenzo Córdoba están defendiendo las elecciones en Coahuila y el Estado de México, son las que está usando Enrique Ochoa, presidente del PRI… si comparten redactores de discursos deberían buscar uno mejor.
Para terminar creo que es justo decir que toda declaración de consejeros sobre las elecciones que rechazaron juzgar es intentar justificar un error que no sólo le está costando muy caro a la confianza institucional de los mexicanos, también está dejando claro que los consejeros que salen a defender los procesos que están plagados de anomalías no son los que necesita México para organizar el 2018… si no pueden asumir la responsabilidad de dos Estados, y la responsabilidad de no haber atraído los comicios en tiempo y forma cuando fue solicitado, menos van a poder mediar una mesa en donde el PAN, Morena y el PRI estarán buscando, con posibilidades reales, la Presidencia de la República.