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Lozoya y el falso combate a la corrupción en la 4T

¿Irma Eréndira Sandoval de verdad está combatiendo la corrupción? | Jorge Ramos Pérez

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Escrito en OPINIÓN el

Nadie sabe a ciencia cierta por qué Irma Eréndira Sandoval retiró los retratos de todos los que han sido secretarios de la Función Pública o de su antecedente, la Secretaría de la Contraloría General de la Federación, en lo que es el edificio sede de la dependencia responsable de combatir la corrupción en el país.

El hecho no pasaría de lo anecdótico si no fuera porque es notorio que la pesca no es precisamente el hobby de Irma Eréndira Sandoval.

La sanción monetaria y la cancelación de contratos a León Manuel Bartlett se dio tras una denuncia periodística. El freno a un compadre del presidente López Obrador que iba a hacerse de jugosos contratos para libros de niños fue por el mismo motivo: revelación de periodistas. La acotación a un poderoso empresario y súper delegado en Jalisco se dio también por investigaciones periodísticas.

Ahora que llega Emilio Lozoya Austin a México como pieza clave para desentrañar la corrupción en Pemex y vinculada a Odebrecht, Irma Eréndira presurosa se quiso colgar del caso y tuiteó que “es un honor haber contribuido a materializar la captura de Emilio Lozoya. Desde los primeros días de nuestra llegada a la SFP concretamos su inhabilitación por 10 años. Meses después el Tribunal Federal de Justicia Administrativa nos volvió a dar la razón”.

¿En serio?

En 1982, como presidente de México, Miguel de la Madrid lanzó una campaña denominada “Renovación moral” contra la corrupción. Era una forma de hacer frente al desastre heredado de José López Portillo. Creó la Secretaria General de la Contraloría General de la Federación, hoy SFP. Pero no hubo ni renovación ni fue moral ni se redujo la tranza. Y ahí está la historia.

Con la primera alternancia en el 2000, Vicente Fox encandiló y esperanzó a millones. Propuso crear la figura de “zar anticorrupción” y para ello designó a un “bárbaro del norte”, Francisco Barrio Terrazas, quien prometió que iría por “peces gordos”. Pero no llegó ni a charales.

En México, eso sí, cada sexenio se detenía a un personaje importante para simbolizar la ruptura con el pasado. Así cayó Carlos Jonguitud, líder del SNTE; Rogelio Montemayor, ex director de Pemex; a Raúl Salinas, el hermano incómodo de Carlos; a Raúl Muñoz Leos, ex director de Pemex; Elba Esther Gordillo, ex lideresa del SNTE. Puro juego de espejos.

Por eso es dable preguntarse si Irma Eréndira Sandoval de verdad está combatiendo la corrupción. Porque retirar cuadros de sus antecesores, sólo que sea para que no le hagan sombra… de lo que nadie hizo.

Lo que es exigible es que la Fiscalía General de la República sí pruebe y haga devolver el quebranto causado al erario y que exhiba a sus cómplices, incluido, si se prueba, el expresidente Enrique Peña Nieto, de quien se especula que hay hasta videos de órdenes que dio en ese espinoso asunto.

Punto y aparte. Guerra en el Senado. Ahora por la presidencia de la Mesa Directiva. Los dejan retozar antes que Ricardo Monreal llegue a apagar el incendio.

Punto final. La alianza opositora va. Falta por ver si en el PAN y el PRD logran convencer a los puristas de unirse al PRI y que eso no es inmoral. Voces en ambos partidos se resisten. Por cierto, en las filas morenistas empieza a ventilarse que buscarán que sean mujeres candidatas en aquellos puestos donde esté garantizado el triunfo del partido.

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