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Los beneficios que no llegan

La mejora en educación con la Reforma Educativa y la baja de precios de la gasolina con la Reforma Energética.

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Escrito en OPINIÓN el

En teoría las reformas energética y educativa estaban diseñadas para abrir un nuevo destino económico y de oportunidades al país y sus ciudadanos. La primera, con una explotación adecuada de las reservas del crudo, mientras que la segunda, debería elevar el nivel de educativo de la población escolar.

 

A estas reformas se le sumarían el espíritu de justicia que prevalecería en la fallida Comisión Nacional Anticorrupción, impulsada al inicio del sexenio del Presidente Peña Nieto, como elemento que garantizaría el combate a la impunidad y corrupción en la clase política. Hoy existe un Sistema Nacional Anticorrupción que antes de ser publicada y entrar en funciones tuvo que ser sujeta de un segundo cambio, cuando por presiones de la cúpula empresarial principalmente, se dio marcha atrás a su publicación.

 

A casi cuatro años de administración, el panorama no es muy halagador, cuando esta semana aumentó cincuenta centavos por litro el precio de la gasolina, así como un aumento a las tarifas de energía eléctrica que lo mejor para el control de daños es que el presidente del PRI salga a medios, para comparar este incremento con los aumentos en la administración del expresidente Felipe Calderón.

 

El Gobierno de la República ofreció en la implementación de la reforma energética, beneficios a estas alturas de la administración, lo cual ha generado críticas y señalamientos por la ausencia de sus bondades y más dudas que certidumbres, sobre su implementación. Una vez más, parece que la expectativa que ofreció el Gobierno Federal en su implementación, fue mayor que el cálculo matemático de los precios internacionales que ahora se presenta como el culpable del ajuste, como si no se hubieran realizado cálculos.

 

La crítica ciudadana y de la clase política no se hizo esperar, de tal forma que en redes sociales se hizo patente la molestia por el incremento de la gasolina y de la luz. Esto fue aprovechado por el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, quien pidió elevar el salario mínimo. Lo anterior para rescatar su disminuida y deteriorada posición ante la opinión pública, con motivo del desgaste político por la permanencia de su titular de medio ambiente, y su evidente incapacidad.

 

Sobre la reforma educativa, el Gobierno Federal no ha sabido controlar las protestas de los maestros opositores a su implementación y que más que una reforma educativa, es un modelo administrativo de control y promoción de personal, que carece de los contenidos académicos que fueron retirados en la administración del expresidente Calderón para enriquecer los planes de estudios que, por ministerio de Ley, la Secretaría de Educación Pública debe de hacerse cargo.

 

Además de las cuestiones educativas, la falta de talento político ha generado escenarios de crisis y de confrontación con el gobierno de Oaxaca y Federal, que por el momento no se vislumbran escenarios para su pronta solución, abriendo la posibilidad de que nuevos actores políticos se incorporen con un beneficio ajeno. De tal forma, que la SEP ha sometido a los gobernadores de los estados, consultas sobre el contenido de una nueva reforma educativa.

 

Mientras tanto y en el terreno de la anticorrupción, el Congreso de Jalisco aprueba la eliminación del fuero para sus servidores públicos, pero en tanto no sea modificado el artículo 61 constitucional, las intenciones del Legislativo de Jalisco poco podrán abonar a sancionar conductas de corrupción, más que un mediano impacto mediático.

 

Así que por ahora los beneficios de las reformas implementadas han sido muy pocos, para unos; pero abundantes, para otros.

 

@racevesj

@OpinionLSR