Main logo

Las cifras y la realidad

Las cifras son frías y si se quita el show matutino y se observan los puros resultados se pueden ver con claridad los absurdos del gobierno. | Julio Castillo López

Por
Escrito en OPINIÓN el

El gobierno de López Obrador ha sido un maestro en montar todos los días su show mediático para señalar culpables, contradecir a su propio equipo y satisfacer las necesidades comunicativas, pero más allá del espectáculo las cosas no van nada bien.

La evidencia más clara fue la semana pasada cuando el periodista Jorge Ramos enfrentó a López Obrador con las cifras de homicidios. El PAN ha sido bastante reiterativo con las cifras que Ramos mostró, pero sin duda que venga un periodista internacional a evidenciarlo es mucho más llamativo porque el PAN es la oposición al régimen actual, pero Ramos es un agente externo.

Pero no sólo se trata del PAN y de los no simpatizantes del gobierno, también los propios integrantes del gabinete han dicho cosas en las que han sido contradichos por su jefe en las conferencias mañaneras y es que no sólo son las cifras de homicidios, en realidad el presidente no está siendo muy coherente en muchos temas.

·         Durante las conferencias la palabra que más ha utilizado es “corrupción”. Hasta el 15 de abril la utilizó más de 800 veces y no han atrapado a ningún corrupto que valga la pena mencionar, no han encontrado corrupción en el aeropuerto que cancelaron y además, más del 70% de las obras de este gobierno se saltaron la licitación y han sido adjudicaciones directas… o sea este es el gobierno más corrupto de la historia. Los integrantes del gobierno obradorista, en su mayoría, ni siquiera han presentado su 3 de 3 y compras que se hicieron públicas, como la de las pipas en Estados Unidos están plagadas de irregularidades.

·         Ha hecho referencia más de 200 veces al conservadurismo de una manera peyorativa. Sin embargo, López Obrador es el presidente más conservador que ha tenido México desde que existe la democracia. Conservador no quiere decir ir a misa (aunque posiblemente también gana en eso), se refiere a una forma de organización política nacionalista, centralista y con reservas a las libertades y derechos individuales… características que bien podrían describir a López Obrador, sin embargo, él y muchas personas que no entienden bien el término lo consideran un sinónimo de “mocho” y en esa confusión también resulta mucho mejor descrito el presidente. En fin, de cualquier manera, no debería ser una forma de insultar sino de describir, pero conservador y neoliberal son los dos insultos preferidos del presidente y los repite con mucha frecuencia.

·         En cuanto a la realidad es curioso. A ningún presidente anterior, al menos desde la alternancia se le hubiera permitido sacrificar un resultado por cuestiones ideológicas. Sin embargo, López Obrador ha justificado cuanta tontería ha hecho con temas ideológicos o incluso de prejuicios y a la par ataca a las ideologías… ¿por qué se canceló el aeropuerto? Por el prejuicio de la corrupción (porque no la han encontrado) o por la necedad del tirano porque en términos reales las pérdidas han sido superiores a lo que supuestamente evitó su construcción. Por qué se está dejando atrás la reforma educativa que evalúa al magisterio y hasta se ordenó en plena semana santa la restitución de las plazas de los maestros que fueron dados de baja por reprobar… eso no debe caber duda que le hace un mal a México y se justifica en pura ideología. Lo mismo pasa con la inseguridad y la violencia, con las que el periodista Jorge Ramos dejó muy mal parado al presidente en su conferencia de prensa… cuando se quitan las justificaciones culpando a otros y los razonamientos ideológicos, frente a la realidad no hay palabras que debieran servir.

Las cifras son frías y si se quita el show matutino diario y se observan los puros resultados se pueden ver con claridad los absurdos en los que ha caído el gobierno y que las justificaciones son puramente emocionales.

El clientelismo

@JulioCastilloL  | @OpinionLSR | @lasillarota