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La ineptitud de los asesores genera caos y otros datos

Hay una gran falta de disciplina y orden entre todos los funcionarios que hoy integran el gobierno. | César Gutiérrez

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Escrito en OPINIÓN el

Hoy México requiere de soluciones que instituyan de una vez por todas la transformación del país. El problema de raíz que está sucediendo en estos momentos, es la gran falta de disciplina y orden entre todos los funcionarios que hoy integran el gobierno. Todos, sin excepción, deben responder al proyecto de Nación. No se pueden dar el lujo de seguir sembrando discordia, dando zancadillas y patadas debajo de la mesa; o asestar traiciones como ocurrió en las recientes elecciones de Guerrero, y la trifulca que se desató en Huauchinango, Puebla, donde la investidura del ejecutivo fue puesta en riesgo.

La secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana Rosa Isela solo se limitó a ser espectadora. La ayudantía del gobernador Barbosa falló y todo el esquema de seguridad quedó vulnerado; afortunadamente el general secretario Luis Crescencio Sandoval pudo utilizar a su personal para evacuar al presidente, tal como hacia el extinto Estado Mayor Presidencial ante la visible falla de gran magnitud en materia de seguridad. 

Cabe señalar que después de analizar las diversas videograbaciones, se observa la falta de un plan de contingencia y por ende de evacuación. Si alguien hubiera planeado un ataque en contra del presidente, hoy estaríamos contando otra historia.

Todo este escenario se debe a las diversas filtraciones de fuego amigo, con información de primera mano –reitero– “…La traición nunca viene de fuera…”. Esta situación está generando polémica y propaganda negra. Muchos de los seudo asesores del ejecutivo están demostrando su gran incapacidad ante cada una de las problemáticas que se presentan. Sólo han desencadenado críticas duras y destructivas, exponiendo la imagen del ejecutivo sin necesidad. 

Hasta el momento se observa desde las trincheras que cada uno sólo se preocupa por llevar agua para su molino, y van de descalabro en descalabro. El ejecutivo debe comprender que, ante tal situación, no se pueden postergar los cambios necesarios. Estamos a menos de tres años para que se produzcan los resultados esperados. Mucha gente se pregunta ¿dónde está la reactivación de la economía? ¿Por qué no están en la cárcel los exfuncionarios que integraron la estafa maestra? ¿Por qué sigue en aumento el número de homicidios en todo México? ¿Por qué el sistema de justicia sigue tan lento y con las mismas malas prácticas atendiendo solo uno de los procesos? ¿Por qué continúa la falta de medicamentos en el sistema de salud? ¿Por qué no podemos avanzar con la educación? ¿Por qué el sector laboral no puede repuntar? ¿Por qué el secretario de Hacienda no ha propuesto un proyecto que tabule los impuestos para los ciudadanos, que no tenemos empresas exorbitantes?

México exige un equilibrio, los ciudadanos que votaron por este cambio están ávidos de justicia, la cual ven muy lejos. No es necesario que se paguen encuestas fabricadas, denle voz a todo aquel mexicano de a pie que quiera opinar y ahí se obtendrán respuestas reales. Por los errores de quienes son los responsables de atender todas estas problemáticas, es que el ejecutivo se queda en el limbo. Maquillan con otros datos la información para conservar su puesto y mantener su hegemonía. Por eso, la gente comienza a reclamar, porque NO SE ESTÁN CUMPLIENDO LAS ÓRDENES DEL PRESIDENTE PARA EL PROYECTO DE NACIÓN.

Es evidente que sólo los proyectos de SEDENA y SEMAR son los que están dando el ejemplo al resto del gabinete. Ya vimos que los datos maquillados no van a rendir frutos. Como ejemplo, hoy tenemos una división del mapa político en la CDMX. El fracaso se debió al nombramiento de candidatos que ni en su casa los conocían, carecían de bases políticas e ideología, pero eso sí tenían ansia de poder que llenó de soberbia las mentes.

Es cierto que no es una tarea fácil, sin embargo, sí se puede llevar a cabo, pero para hacerlo se debe actuar con energía y carácter. La supervisión no es por minutos, esta requiere revisar cada uno de los procesos; no se debe soslayar el disimulo, de lo contrario será una factura muy costosa para el 2024. Todos, absolutamente todos, deben ponerse a trabajar en implementar los famosos indicadores de gestión y desempeño, para que funcione por fin el proyecto de nación.  

Por otro lado, el caso del incendio de la discoteca Baby’O, ubicada en el municipio de Acapulco, Guerrero, nuevamente es foco de atención, debido a que se querían ocultar las verdaderas razones del accidente. Fue un hecho que la delincuencia organizada es la responsable, ya que estaba realizando este tipo de ataques. Lo quisieron manejar como accidente y debido a esa situación se filtraron videos donde se ve a un grupo de personas entrar a la propiedad; llevando unos garrafones de combustible y en menos de tres minutos se puede apreciar que el lugar se convierte en un infierno. De nuevo, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana Rosa Isela brilla por su ausencia, ya que este tipo de delitos de alto impacto no lo hace cualquier persona, sólo la DELINCUENCIA ORGANIZADA. 

Para rematar, después, en los mismos parajes donde fueron asesinados cobardemente los 43 estudiantes de Ayotzinapa, se filtra un video donde se observa que tienen retenidos a un grupo de personas y sus captores portan armas de grueso calibre como fusiles y pistolas; éstos actúan impunemente sin que la Secretaría de Seguridad y protección ciudadana intervenga, mucho menos la Fiscalía General de la República. 

Es importante que los secretarios de estado y actores políticos contraten buenos asesores. Es cierto que la misión es complicada pero no imposible. Lo que falta es capacidad y compromiso. Si se siguen colocando a los amigos, compadres y comadres para ocupar puestos en la administración pública federal sin tener conocimiento e interés por el servicio público, así como el compromiso por cambiar las cosas, estaremos acabando con la esperanza de cumplir con un proyecto de nación que tanto hemos esperado.

Por último, no podemos dejar pasar la celebración por los doscientos años de la creación y continuidad de la Armada de México, la cual ha demostrado ser una de las instituciones más reconocidas y queridas del país. Con esfuerzo, trabajo, tenacidad, honor y lealtad, sus elementos han evidenciado el amor y cariño por la patria. Aprovecho para felicitar a todos y cada uno de sus elementos por tan arduo trabajo y dedicación en la edificación de nuestra patria, son un orgullo para nosotros como mexicanos.