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La imaginación al poder

Por: Humberto Fuentes Pananá.

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Escrito en OPINIÓN el

México está desencantado con la democracia. De acuerdo al Latinobarómetro 2015, solamente el 19% de los mexicanos está satisfecho con el funcionamiento de la democracia en el país, mucho menos que el promedio latinoamericano (37%), e incluso menos del 41% que estaba satisfecho en 2006.

 

Más allá de la discusión sobre los resultados del gobierno, el contraste entre la administración pública lenta y el dinamismo de la vida urbana es evidente. Por un lado aumenta la importancia de las metodologías simples aplicadas por los emprendedores y surgen iniciativas viables de economía colaborativa; por el otro lado, gran parte del sector público tiene una burocracia grande, creciente y desaprovechada.

 

La tensión entre la dificultad de gobernar y las posibles vías para hacerlo alcanza un punto límite en las megalópolis. El gobierno, diseñado para moverse lentamente, tiene que trabajar a marchas forzadas para adaptarse al ritmo de una ciudad emergente. Su rigidez le impide aprovechar el principal activo de las ciudades: la diversidad de ideas y personas que la habitan.

 

El gobierno abierto representa una alternativa para dinamizar a las administraciones públicas locales. A través de la generación de conversaciones entre ciudadanía y gobierno, se impulsan comunidades capaces de  proponer nuevas respuestas a los problemas de siempre. Al atraer a los particulares a los asuntos públicos, el gobierno abierto le devuelve a la administración pública la única herramienta con la que puede mejorar resultados: la imaginación colectiva.

 

La imaginación tiene una misión trascendental en el contexto de la administración pública: demostrar que lo imposible es posible. Solo a partir de las ideas radicales se pueden manufacturar soluciones que las ciudades necesitan y la gente exige. Solamente pensando, planificando, decidiendo e iterando colectivamente podremos formar gobiernos que tengan satisfechos a sus ciudadanos.

 

La Ciudad de México cuenta desde hace poco con una ley que promueve una nueva relación entre ciudadanía y gobierno a través de la gobernanza colaborativa. La Ley para Hacer de la Ciudad de México una Ciudad más Abierta es un instrumento jurídico que reconoce el derecho de los particulares a colaborar con el gobierno y obliga a las dependencias a generar mecanismos para atender esta colaboración.

 

Esta ley contempla la creación de un Consejo de Gobierno Abierto integrado por representantes del gobierno, la sociedad civil y los órganos garantes de la transparencia y los derechos humanos en la ciudad. Este órgano colegiado certificará el cumplimiento y avance en materia de apertura de las distintas dependencias gubernamentales y publicará anualmente un repositorio de buenas prácticas.

 

Las evaluaciones del Consejo de Gobierno Abierto se regirán por un Modelo de Madurez, el cual será la ruta crítica que seguirá el gobierno de la ciudad para ser más abierto, responsivo y para tomar mejores decisiones a través del aprovechamiento de la inteligencia colectiva. A través del Modelo de Madurez, la apertura gubernamental en la Ciudad de México tendrá líneas de acción que pondrán objetivos concretos de corto, mediano y largo plazo; evaluables con el fin de orientar los esfuerzos de apertura gubernamental.

 

La ley no solo se trata de decretar la apertura, sino de generar un entorno institucional, social y de capacidades que permitan que dicha apertura forme parte del ADN de la Ciudad de México. Como está definido en la disposición, la apertura es una actitud al interior de un gobierno, la cual se refleja en la forma en la que se toman las decisiones sobre asuntos públicos.

 

Si queremos que los ciudadanos se sientan satisfechos con el funcionamiento de la democracia, hay que asegurarnos que la democracia funcione a su favor. Y no hay mejor forma de hacerlo que permitiéndoles formar parte de las decisiones que transformen su entorno, idear proyectos y soluciones, hacer equipo. Otro mundo es posible si es que así lo imaginamos.

 

***Director del área de Gobierno Abierto.