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La foto del momento

Con una postura de derrota y con el rostro desencajado, así es como vive en nuestra memoria el hombre que dirige el país más poderoso del mundo. | Guillermo Sesma

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Escrito en OPINIÓN el

Como lo reza el viejo el adagio “una imagen dice más que mil palabras”, así es como pasa a la posteridad en este mes de agosto Joe Biden, presidente de Estados Unidos. Con una postura de derrota y con el rostro desencajado, casi suplicante; así es como vive en nuestra memoria el hombre que dirige el país más poderoso del mundo.

Los más de 20 años de intervención oficial y extraoficial que mantuvieron Estados Unidos en Afganistán se desmoronan en las manos de su actual presidente, si bien es cierto no es su completa y absoluta responsabilidad, si es a él a quien le toca dar la cara y asumir responsabilidades. 

Su imagen de desesperanza en la sala de prensa de la Casa Blanca acompañada de los videos y fotografías que circulan tanto del atentado en el aeropuerto de Kabul como de ciudadanos afganos cayendo de aviones estadounidenses en pleno despegue, no es un recuerdo del que Joe Biden vaya a poder deshacerse fácilmente. 

Su popularidad pasó del 55% al 41% en solo una semana, el pueblo americano se siente por ahora decepcionado del actuar de su presidente, lo está juzgando con mano dura y esa imagen difundida hoy le pesa mucho más de lo que imagina.

No es la primera vez que un líder pasa por un momento así y mucho menos en Estados Unidos, diversas imágenes y crisis vienen a la memoria, desde el fracaso de Bahía de Cochinos en los inicios de la administración de John F. Kennedy, las metidas de pata de Lyndon B. Johnson y Richard Nixon en Laos y Vietnam, los más de 200 fallecidos en el atentado de Beirut que diera la reelección a Ronald Reagan y el rostro de George W. Bush tras los atentados del 11-S.

Si bien las crisis siempre significan una oportunidad para demostrar de qué se está hecho, estás también generan imágenes que son difíciles de borrar de la memoria, esas fotografías significan y resignifican en el tiempo, dan a sus protagonistas determinados valores, atributos o defectos. 

Nuestro país no es la excepción, también estamos llenos de fotografías para el recuerdo, son imágenes que para otras generaciones eran parte de la galería de la revista LIFE o del archivo Casasola. 

Hoy estas imágenes circulan rápidamente por las redes y van adquiriendo un nuevo sentido. Muchos podemos recordar aquella icónica fotografía en la que un vigoroso Enrique Peña Nieto acompañado por los gobernadores priistas, se convertía en una “nueva generación de políticos”; hoy muchos de ellos están en la cárcel, prófugos o en un vergonzoso retiro.  

¿Cuántas de estas icónicas imágenes tienen como protagonista al actual presidente de la República? ¿Su significado irá cambiando con el paso de los años? ¿Cuántas fotos que hacen recuerdo e historia se han perdido nuestros líderes por su carácter obtuso? ¿Qué otras imágenes se convertirán en fotoescándalos del futuro?.  

Para estas y otras incógnitas aún no tenemos respuesta… o tal vez sí, pero aún no estamos listos para hablar de ello. A la 4T y al presidente todavía le quedan dos años para significar y resignificar muchas de esas fotografías, sin embargo, habrá otras que las buenas intenciones no podrán cambiar.