Main logo

“Juntos hacen historia”

¿Qué esperan Claudia Sheinbaum y la autoridad actual de la delegación Tlalpan? | María José Garrido Asperó

Por
Escrito en OPINIÓN el

Leí en Milenio el texto “Política de reconstrucción postsísmica” de la autoría de Ricardo Monreal.

El ex delegado de la Cuauhtémoc afirma, con toda la razón, que entre las lecciones que debimos haber aprendido después del 19 de septiembre de 2017 está el hecho de que:

Los sismos no matan, sino las malas construcciones y la corrupción. La mayor parte de los inmuebles colapsados hace seis meses fueron de tres tipos: construcciones anteriores a la nueva reglamentación sismorresistente, construcciones relativamente nuevas donde no se respetó dicha reglamentación y construcciones donde el suelo de CDMX ya dio de sí, es decir, perdió elasticidad y resistencia para absorber las ondas de transmisión sísmica. ¿Qué tanto de esta situación es producto de la improvisación, la corrupción y la impunidad?”

Como es obvio, la primera y última causa de derrumbe o daño estructural de las construcciones mencionadas por el actual coordinador de campaña de la segunda circunscripción de Morena, exceden los controles que las autoridades y población en general pudieron, o pudimos, ejecutar para asegurar que nuestras viviendas fueran seguras. La segunda no.

¿Listos para los sismos que se avecinan?

Los edificios colapsados y los que al día de hoy tienen afectaciones graves en su estructura a consecuencia de la negligencia de constructores y corrupción de autoridades de gobierno, como sucede en mí condominio, son, como decía mi papá, harina de otro costal. La situación de quienes como yo nos encontramos viviendo fuera de nuestras propiedades por las pillerías cometidas por funcionarios del pasado, se agravan por la negligencia, ineficacia y posible corrupción de las autoridades presentes a quienes correspondía y corresponde atender de manera justa y legal nuestra realidad.

El condominio en el que se ubica mi departamento cuenta con dos edificios. La torre B (doce departamentos) se encuentra en perfecto estado, mientras que la torre A (dos departamentos) tiene desde el 19 de septiembre afectaciones graves en su estructura, por lo que fue dictaminado en octubre por Protección Civil de la delegación Tlalpan como “Riesgo alto (AAA). Requiere Refuerzo Estructural Urgente”. Daños que en la opinión de los Directores Responsables de Obra y otros arquitectos e ingenieros que acudieron a examinarlo se deben –cito uno de esos dictámenes– a que: “incumplió de origen con toda normatividad y reglamentación de la época en que fue construido”. Ese edificio, que está ubicado a unos cuantos metros del otro, es paso obligado para habitantes y empleados de la otra edificación, por lo que pone en riesgo la vida, integridad y patrimonio de todos.

Como muchos mexicanos afectados por el sismo, acudí a mi instancia de gobierno local, la delegación Tlalpan, a solicitar en persona (por escrito y en varias ocasiones) se me proporcionara orientación, asesoría técnica y legal para enfrentar la situación y resolverla a la brevedad posible. En lugar de encontrar una administración eficiente, me topé con una autoridad que no fue capaz de indicar los pasos que se debían seguir ni pudo entregar los planos estructurales, la licencia de construcción y los documentos que avalaran la correcta terminación de obra, lo que es, según entiendo, su obligación y competencia.

Encontré una autoridad que entregó, eso sí, un dictamen firmado por un Director de Obra que nunca inspeccionó en persona el condominio y en el que se asientan datos falsos como asegurar que la construcción se remonta a 1985 cuando data de 2003 ó 2004, por mencionar alguno. Encontré una autoridad que no modificó el dictamen pese a que en audiencia pública expuse en persona a la entonces delegada, la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo sus inconsistencias, siendo las más graves: 1) la que señala como causa del daño la irregularidad en el proceso de construcción y no, como ella pretende, el potencial destructivo del sismo; y 2) la que pese a indicar que tiene daño estructural la califica como “seguridad incierta”.

Así de mal hecho está ese dictamen que entregó personal de Participación Ciudadana informando que ese estudio se había conseguido gracias a la brillante gestión de la Dra. Sheinbaum y a la solidaridad de la Compañía constructora Riobóo, esa que está involucrada en la construcción del segundo piso del periférico.

Y no sólo eso. Como ciudadana considero del todo reprobable lo hecho por la Dra. Sheinbaum, quien pocos días antes de dejar la delegación para contender por la jefatura de gobierno de la Ciudad de México –quizá procurando ganarse algunos votos– ofreció a los dos propietarios de esos departamentos “pagar” los gastos que requiriera el refuerzo estructural. Acción con la que impidió que ellos y los propietarios de los indivisos (estacionamientos) reparáramos el mencionado edificio, como lo estábamos haciendo. Promesa que además no ha cumplido, pues a seis meses del sismo la torre A está evidentemente más dañada, poniendo en riesgo la vida y propiedad no solo de propietarios o inquilinos, también de las colindancias, a quienes por cierto Sheinbaum no informó del peligro real en que se encuentran por, según me informó su equipo de campaña (perdón, quise decir equipo de trabajo) no alarmar a la población.

Termino estas líneas haciéndome de la pregunta lanzada por Monreal: ¿Qué tanto de esta situación es producto de la improvisación, la corrupción y la impunidad? Hago además las siguientes ¿Qué esperan Claudia Sheinbaum y la autoridad actual de la delegación Tlalpan? ¿Que se caiga y mate a alguien?

No cabe duda. Juntos están haciendo historia.

Elementos clave en la estrategia de DP para la CID

Dra. María José Garrido Asperó

Profesora-Investigadora del Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, es autora de diversas publicaciones acerca de la cultura política durante la guerra de independencia de México y el primer imperio mexicano, entre las que se destacan Soborno, fraude, cohecho: los proyectos para evitar la manipulación electoral en las primeras elecciones del México independiente, 1821-1822 y Fiestas cívicas históricas en la ciudad de México: 1765-1823. En 2004 obtuvo el premio Marcos y Celia Mauss que otorga la Facultad de Filosofía y Letras y la medalla Alfonso Caso al Mérito Académico.

@institutomora | @OpinionLSR | @lasillarota