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Integridad

El informe presentado por la empresa noruega DNV sobre la tragedia en la Línea 12 del Metro. | Lourdes Mendoza*

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Escrito en OPINIÓN el

El 27 de octubre de 2021, en este mismo espacio, escribí: La tragedia en la L-12 pudo haberse evitado.

Tras leer cuidadosa y detalladamente el informe presentado por la empresa noruega DNV, el 7 de septiembre, les cuento que se incluye, como parte de la evidencia, material captado en video por drones que muestra una significativa separación entre las vigas norte y sur en el tramo que colapsó. Ojo, la inspección con drones se realizó en diciembre de 2019, para verificar el estado de la estructura tras el terremoto de 2017.

Evidencia

Aquí las pruebas visuales donde, dos años más tarde, se produciría el accidente que causaría la muerte de 26 personas. Pero esto no sólo es lo que encontré, pues mientras que el informe de la consultora, en inglés, incluye cinco posibles causas para el colapso, la versión en español descarta aquéllas ligadas al sismo o a deficiencias en el mantenimiento. ¡Quihúboles! ¿Cómo les quedó el ojo?

¿Y la vergüenza, apá?

Sin embargo, en su manejo de crisis por el derrumbe de la Línea 12, Claudia Sheinbaum siempre quiso convencernos de que no podría haberse evitado la tragedia con un buen mantenimiento preventivo y que todo el problema proviene de los pernos instalados en 2009.

Sin embargo, oh sorpresa, esta última semana, aniversario de la tragedia, la regenta hizo algo inédito: desconoció a la “prestigiosa” empresa noruega que contrató para determinar la causa-raíz de la tragedia, la amenazó con un talante autoritario y, además, envió a su vocero Andrés Lajous a informarnos que el famoso reporte de DNV, el definitivo, no será del conocimiento de la opinión pública.

Con estos acontecimientos se ha esfumado cualquier simpatía de género o de afinidad que pudiese mantener por la jefa de Gobierno.

Porque estamos, en primer lugar, ante un caso de falta de integridad. Nos está mintiendo.

Argumenta que el reporte final está mal hecho. Pero, ¿pues cómo creerle si nos repitieron hasta el cansancio que es una excelente y prestigiada empresa noruega de carácter global e independiente?

¿Cómo creerle si toda su explicación pública y el caso de la Fiscalía General de la CDMX se basan en los reportes 1 y 2 de la misma DNV?

¿Cómo creerle si se niega a dar a conocer el reporte final de DNV? Podríamos juzgar por nosotros mismos si está o no mal hecho.

¿Qué esconden?

Lo único entendible es que quieren ocultar la conclusión de que pudo evitarse la tragedia si hubiesen realizado mantenimiento, así de sencillo y así de grave. El reporte enlatado y desconocido comprometería seriamente a su administración y, ahora, a ella misma, por la falsedad deliberada de la información a la opinión pública.

Claudia y su equipo mienten

Lajous, secretario de Movilidad, dijo en entrevista a Ciro Gómez Leyva, el jueves 5, que alguien sembró el tema del mantenimiento como causa-raíz del derrumbe en el que perdieron la vida 26 personas, olvidando el secretario que, desde el primer reporte, DNV señaló que lo analizaría. Así, Lajous nos ha confirmado que el grave diferendo con DNV es el papel que jugó la falta de mantenimiento a cargo del STC Metro en el trágico desplome.

Para decirlo más sencillo, DNV sostendría que el actual gobierno de la ciudad pudo haber evitado la tragedia si hubiese realizado el mantenimiento debido a la línea. Lo que ha tratado de evitar el gobierno de la CDMX desde mayo de 2021.

Negarlo, ocultarlo, es un grave error político, de dimensión estratégica para Sheinbaum, porque pierde el atributo de la honestidad que casi nadie le cuestionaba antes de estos hechos. Si nos miente en Línea 12, ¿cómo creerle en lo sucesivo?

Aunado a ello, su airada reacción al comunicado de la empresa noruega deja entrever su propensión al autoritarismo. Amenazó a DNV de un proceso penal, es decir, someterlos a proceso y sentenciarlos si no modifican sus conclusiones. Amenaza creíble porque controla por completo a la fiscalía de la ciudad y a gran parte del Tribunal Superior de Justicia.

Quien se atraviese en su camino, diría un clásico, correrá la misma suerte. Así de autoritaria la regenta.

La prepotencia: no sólo no dará a conocer el reporte ya entregado al gobierno, según nos confirmó ayer DNV, sino que además designó a Florencia Serranía, exdirectora del Metro, a un organismo del Conacyt.

Impresionante

Es indispensable exigir que se dé a conocer ese reporte. De confirmarse lo señalado por el secretario Lajous respecto a la negativa de su jefa de aceptar la contribución de la falta de mantenimiento en la tragedia, estaríamos, como lo señalara Churchill en su momento, en el principio del fin de una candidatura de Morena que se nos ha presentado como incorruptible e inevitable.

No todo está perdido, pues

María Elena Pérez-Jaén, excomisionada del IFAI y hoy diputada por el PAN, en su cuenta de Twitter, puso:


Pero ahí no paró y en otro puso que ya realizaron 18 solicitudes de información en transparencia para obtenerlo.

Mentir en una tragedia es inaceptable

Aun para el presidente López Obrador, que tanto la estima, será imposible seguir apoyando a la corcholata de sus ojos. No mentir al pueblo es su promesa. Veremos qué sucede estos próximos días.

La columna de Lourdes Mendoza Peñaloza se publicó originalmente en El Financiero, reproducida aquí con autorización de la autora.

* Lourdes Mendoza Peñaloza es una periodista mexicana especializada en finanzas, política y sociales, con más de 20 años de experiencia en medios electrónicos, impresos, radio y televisión.