Main logo

Gendarmería desconocida

La Gendarmería Nacional de México “contribuirá a contener y desarticular aquellas organizaciones delincuenciales que minan la actividad económica en un territorio determinado.

Por
Escrito en OPINIÓN el

Quiso ser a imagen y semejanza de la Gendarmería francesa y no; quiso ser desmilitarizada y no; quiso ser factor de rescate del predominio militar en actividades de persecución criminal y no... Quiso ser de diez mil y mando civil, pero no... Quiso ser abanderada en 2013 y no... Es la Gendarmería Nacional...

 

No está mal que un gobierno se preocupe por crear agrupaciones de vigilancia y seguridad para los ciudadanos, sobre todo en zonas indemnes. No está mal que se cuiden al detalle aspectos no atendidos por las policías y militares y marinos y elementos de seguridad pública y nacional... Todo bien... Pero ya son siete corporaciones con miles de integrantes para eso mismo.

 

En mayo de 2012, durante su campaña para ser presidente de México, Enrique Peña Nieto dijo que ‘en caso de ganar las elecciones’ durante su gestión se crearía la Gendarmería Nacional, integrada –dijo- por más de 40 mil efectivos militares que ya tenían experiencia en labores contra el narcotráfico, pero que estaría bajo mando civil.’ Promesa de campaña, pues.

 

De inmediato se comenzó a trabajar en su creación. Se acudió al gobierno francés para conocer el funcionamiento de su Gendarmería Nacional que es una fuerza de Ejército, responsable de las misiones de policía, vinculada con el Ministerio del Interior –nuestra Secretaría de Gobernación-.

 

Las fuerzas que atienden la seguridad pública en Francia son: la Gendarmería Nacional y la Policía Nacional. La primera mantiene el orden en las zonas rurales, urbanas o periurbanas, en tanto que la segunda es responsable de las zonas urbanas. Sólo dos. Y ahí, los gendarmes mantienen su situación militar, que es inseparable de su organización y el alcance de su jurisdicción...

 

La Gendarmería Nacional de México “contribuirá a contener y desarticular aquellas organizaciones delincuenciales que minan la actividad económica en un territorio determinado a través de ilícitos como robos, la extorsión y el secuestro”, dijo el presidente Peña Nieto cuando abanderó y tomó protesta a los 5 mil integrantes de la 7ª., nueva Corporación dependiente de la Policía Federal.

 

La Gendarmería, se dice luego, se enfocará a proteger los ‘ciclos productivos ante las amenazas de la delincuencia organizada; debe garantizar la seguridad de la población y sus bienes en rutas de tránsito de insumos y mercancías, de paso de migrantes, de producción agrícola, pesquera y forestal y otras que pudieran encontrase vulneradas por la delincuencia en zonas rurales o marginadas, y coadyuvar con autoridades locales en la prevención de la comisión de delitos... Será preventiva pero también reactiva...’. 

 

El Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García dice que la ciudadanía exige mejores condiciones de seguridad; el Comisionado General de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos, afirma que esta corporación ‘responderá a las necesidades de los mexicanos’. 

 

Una muestra de incapacidad de gobierno para solucionar el problema de la seguridad pública en México, la de los ciudadanos, su vida y sus bienes patrimoniales es el gigantismo de sus cuerpos de seguridad. Todos meten la cuchara: militares, marinos, federación, gobiernos estatales, municipales, comisionados...

 

Lo que se lee en esto es que el crimen organizado es de tal fortaleza que el Estado tiene que incrementar sus preventivos y reactivos hasta niveles insospechados. Un fracaso institucional y muy costoso, para todos. Se dice que ha disminuido la criminalidad. Y se incrementan los cuerpos de seguridad... Como aquel hijo que se desaparece de la casa, de pronto envía mensaje a su padre para decirle que está en Las Vegas: “vamos ganando, manda más dinero”.  

 

El tema es: Sí, el cumplimiento de promesas de campaña tiene que ser: son promesas. Muchas de ellas notariadas, según se sabe. Pero no se trata de llenar expedientes. Sobre todo si entre siete corporaciones se van a estorbar o a generar pugnas por espacios de autoridad. Con lo costoso que esto tiene en materia de recursos, pero también de violación a los Derechos Humanos.

 

¿Qué han hecho en la materia de seguridad rural las corporaciones federales, estatales o municipales? ¿No atendían los procesos productivos? ¿En dónde han estado parados? ¿Contra quienes luchan? ¿Son diferentes los delincuentes a los que ataja el Ejército, la Marina y la Policía Federal o estatal o municipal en tanto crimen organizado? ¿Hay crimen organizado seccionado?

 

Se da como ejemplo que hace tiempo se tuvo que vigilar cargas de aguacate de Michoacán a la frontera norte del país. Bien. ¿Cuánto nos cuesta esa vigilancia? ¿A quién beneficia ésta? ¿A los productores? ¿Se va a cuidar el factor producción en los empresarios? ¿Por qué no se ataja a la delincuencia y sólo se tiene que proteger de ella? Un guacamole muy caro, por cierto...

 

O a menos que la Gendarmería Nacional esté orientada a atender fenómenos criminales cuyo nombre no se nos da a conocer, o de seguridad nacional mexicana o de EUA... ¿será?

 

Todo es vago e indescifrable por ahora. El lenguaje para explicarnos la creación de este cuerpo es ambiguo e indefinible. “Es el cumplimiento de una promesa de campaña”. Sí. Bueno. ¿Y cómo se inserta esto en el panorama de inseguridad pública en México? ¿Por qué los militares se opusieron a que gendarmes provenientes del Ejército fueran comandados por el civil que se dijo en 2012? ¿Por qué 5 mil y no 10 mil? ¿Qué quiere decir ‘formación militar y preparación policial’?

 

En fin, muchas preguntas, pero ya está ahí la Gendarmería Nacional.  Bien. Hace falta si la situación es extrema. La vida y la seguridad patrimonial de los mexicanos son prioritarias. Es responsabilidad de gobierno su cuidado. Si se cumple la promesa aplaudiremos; si no: No.

 

@joelhsantiago