En 1988 un grupo de partidos cedió su registro para que Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano pudiera competir por la Presidencia de la República. Ese mismo conglomerado dio pie al Partido de la Revolución Democrática (PRD), que ahora está por morir.
Desde noviembre del año pasado Recovecos le ha descrito el enanismo opositor y en enero anticipó el surgimiento del contrapeso al avasallamiento del movimiento encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Este 24 de agosto un sector mayoritario en el PRD lanzó públicamente Futuro 21, que busca ceder el registro del Partido para una nueva agrupación. Su esperanza es que se sumen a ellos personajes progresistas y distantes del lopezobradorismo.
Gabriel Quadri, uno de sus oradores, anticipó algunos de los pasos de Futuro 21. El ex rector de la UNAM y ex priista José Narro alertó de los riesgos para el país. Beatriz Pagés, recién desempacada del PRI, también apareció por ahí.
¿Eso cimbra al oficialismo? No. En lo más mínimo.
Jesús Ortega rompió con López Obrador el 8 de enero de 2008 en el octavo piso del hotel Marquis Reforma debido a que el tabasqueño impuso a Porfirio Muñoz Ledo en el Frente Amplio Progresista. Ortega y su corriente Nueva Izquierda se dolían ya desde 2005 cuando López Obrador se decantó por Marcelo Ebrard como su sucesor en la CDMX y no por Ortega. Los desencuentros llegaron hasta ese 8 de enero en que, a gritos, terminaron su relación.
El chucho mayor buscó la semana pasada a Ivonne Ortega, quien acaba de renunciar al PRI, como Narro, por las formas poco limpias como les ganó Alejandro Moreno la presidencia del PRI.
Como se decía en los viejos tiempos, la caballada en Futuro 21 está más que escuálida. No pinta.
Y el otro contrapeso, el que confirmó Javier Corral en enero, también lució flácido. Muy pocos personajes dieron el paso al frente. Es más, muchos personajes que se reunieron con ellos desde finales del año pasado terminaron reculando.
Ni Futuro 21 ni el contrapeso de Corral tienen al López Obrador de López Obrador.
Y ya ni hablar del plan de Gustavo de Hoyos, presidente de Coparmex, quien terminó desinflando su propio plan al señalar que en realidad es algo así como un think tank.
El 2021 se acerca y la oposición no sólo está pasmada y noqueada, como diagnosticaron Margarita Zavala y Roberto Gil esta semana que recién concluyó.
¿No ha nacido el López Obrador de López Obrador? ¿Ricardo Anaya ya se vio en ese rol?
Abróchense los cinturones.
Punto y aparte. Ni José Narro ni Ivonne Ortega se van a integrar como afilados de Futuro 21. Por ahora.
Punto final. Xavier Azuara, Adriana Dávila y Jorge Luis Preciado están en la puja por la presidencia en San Lázaro. De los tres panistas, alguno de ellos fue calderonista. Y eso cuenta.