Detrás del Gran Premio de México 2016 que pretende reunir a más de 350 mil personas los días 28, 29 y 30 de octubre en el Autódromo Hermanos Rodríguez, hay una batalla legal por la marca “Fórmula 1”, que en México está registrada desde 1979 por la empresa Bardahl de México, S.A. de C.V.
La firma mexicana asegura que la empresa holandesa FORMULA ONE Licensing BV, pretende que los registros de marca con número 234350 y 234821, que pertenecen a Bardahl en sus clases 1 y 4 queden sin validez.
Esta marca fue registrada en el año 1979, cuando sólo eran consideradas para el mercado mexicano de aceites y no para las carreras de autos, sin embargo FORMULA ONE Licensing BV, alega que su evento de carreras usa el mismo nombre y quiere imponer su uso en México, lo que supuestamente infringiría las leyes mexicanas.
La Clase 1 se refiere a la protección para productos químicos industriales, incluyendo aditivos para combustibles de motores de vehículos y de motores industriales, y la Clase 4 es para aceites y grasas industriales (no alimenticias) y lubricantes.
No obstante, y de acuerdo a los propios archivos del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), se demuestra que la firma mexicana Bardahl lleva la delantera, ya que obtuvo el registro en 1979, mientras que FORMULA ONE lo obtuvo en 1985 en la ciudad de París, Francia.
La historia de la marca se remonta a 1979, cuando la entonces Secretaría de Patrimonio y Fomento Industrial, hoy Secretaría de Economía, otorgó el derecho al uso exclusivo de las marcas “Fórmula 1” para autos nuevos y “Fórmula 2” para autos usados a favor de Bardahl, que avalan su marca dentro del rubro de aceites, lubricantes y aditivos.
Desde entonces, Bardahl comercializa estos productos bajo la leyenda “Fórmula 1” y “F1”, por lo que hacer uso de la misma por parte de otra razón social, de acuerdo con la Ley de la Propiedad Industrial en sus artículos 189, así como 88 y 211, conlleva una sanción para resarcir daños y confusiones que pudiera provocarse al dueño original de la marca.
A Ecclestone seguro le vale…
Pero al parecer al gigante FORMULA ONE Licensing BV, así como a su Director Ejecutivo Bernie Ecclestone poco les importa una pequeña empresa de un país en vías de desarrollo, ya que siguen promocionando en México la marca en la publicidad y difusión del evento de carreras a realizarse la próxima semana en el Autódromo Hermanos Rodríguez de la Ciudad de México.
Cabe destacar que a partir de la década de los 90, la firma con sede en la ciudad de Rotterdam comienza el registro masivo de las marcas “Fórmula 1” y “F1” en diferentes idiomas alrededor del mundo, en numerosas aplicaciones y clases, desde productos alimenticios, servicios de telecomunicaciones, eventos, gorras, ropa, etcétera, por lo que su portafolio en 2014 superaba ya los 2,900 registros en todo el mundo.
Bardahl podría solicitar medidas cautelares ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), alegando que FORMULA ONE Licensing no ha podido comprobar legalmente la relevancia mundial de su evento en el país y en el mundo, antes de 1979, cuando se otorgaron los registros 234350 y 234321 a favor de la firma mexicana.
En consecuencia, el organismo defensor de la propiedad intelectual e industrial en México, deberá ordenar el cese de la publicidad de las marcas “Fórmula 1” y “F1”, presente en productos y servicios ajenos a Bardahl y que pertenezcan a las clases 1 y 4, específicamente en productos como aditivos, aceites, anticongelantes y limpiaparabrisas, entre otros.
Este caso pondrá a prueba la legalidad y el respeto a las leyes mexicanas de la propiedad intelectual e industrial, ya que en meses recientes se han conocido casos de empresas mexicanas enfrentando a poderosas transnacionales en defensa de su marca, tales como el célebre iFone vs Apple, y la empresa de turismo ecológico Eccosport vs la armadora estadounidense Ford.